La paja en el ojo

En la Biblia se menciona la paja como símbolo de la inconsistencia humana, ejemplo de destrucción de los malvados y para condenar los juicios sobre los hermanos.

15 DE ABRIL DE 2021 · 19:10

La paja está constituida por los tallos secos de ciertas gramíneas como los cereales, a los que se les ha quitado ya la espiga mediante la trilla y han quedado solamente las “cañas” rotas. / Antonio Cruz.,
La paja está constituida por los tallos secos de ciertas gramíneas como los cereales, a los que se les ha quitado ya la espiga mediante la trilla y han quedado solamente las “cañas” rotas. / Antonio Cruz.

Nosotros tenemos paja y forraje para nuestros asnos,

y también tenemos pan y vino para mí y para tu sierva,

y para el criado que está con tu siervo;

no nos hace falta nada. (Jue. 19:19)

 

¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano,

y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? (Mt. 7:3)

 

Se llama “paja” a los tallos secos de ciertas gramíneas como los cereales (trigo, avena, centeno, cebada, arroz, etc.), a los que se les ha quitado ya la espiga mediante la trilla y han quedado solamente las “cañas” rotas.

Tradicionalmente se ha usado como alimento para el ganado, especialmente para los rumiantes (ovejas, cabras, vacas, camellos, etc.) ya que estos animales pueden digerir la celulosa que contiene la paja, gracias a las bacterias que poseen en sus estómagos (Gn. 24:25, 32; Jue. 19:19; 1 R. 4:28; Is. 11:7).

Sin embargo, se trata de un alimento pobre que conviene mezclar con vegetales frescos más nutritivos.

En hebreo existen varios términos para referirse a la paja: teben, תֶּבֶן, significa “paja” o “rastrojo”; qash, קַשׁ, es también “paja” u “hojarasca”; jashash, חֲשַׁשׁ, indica “paja” o “hierba seca” que se quema fácilmente (Is. 5:24; 33:11).

También el griego del Nuevo Testamento posee varias palabras, como ákhyron, ἄχυρον, que se refiere a la paja como el tallo del cereal que ha sido separado de la espiga y se puede quemar (Mt. 3:12; Lc. 3:17).

Mientras que karphos, κάρφος, es la pequeña mota de paja o de alguna ramita seca que puede entrar en el ojo y molestar o perturbar la visión (Mt. 7:3-5; Lc. 6:41-42). Los egipcios acostumbraban mezclar barro con paja para elaborar ladrillos con el fin de hacerlos más porosos y resistentes.

En la Biblia se menciona la paja en relación a las profecías sobre la era gloriosa del reinado de Cristo, en la cual se acabará la crueldad de la naturaleza y “el león comerá paja como el buey” (Is. 65:25).

La paja en el ojo

Oveja comiendo paja en un establo de Nazaret (Nazareth Village). / Antonio Cruz.
 

Asimismo, este producto vegetal aparece como símbolo de la inconsistencia humana ya que los malos “son como tamo (paja) que arrebata el viento” (Sal. 1:4); quienes se oponen a Jehovah serán pisoteados “como es hollada la paja en el muladar” (Is. 25:10) y serán quemados como la “paja en fuego que nunca se apagará” (Mt. 3:12; Lc. 3:17).

También aparece frecuentemente la imagen de la paja que es arrastrada por el viento como ejemplo de destrucción de los malvados (Is. 17:13; Os. 13:3; Sof. 2:2).

Y, por último, en el Nuevo Testamento, Jesús condena los juicios temerarios sobre los hermanos, refiriéndose a que es demasiado fácil juzgar la brizna de paja en ojo ajeno y, a la vez, no ver la enorme viga en el propio (Mt. 7:3).

El mal de la crítica destructiva en el seno de las congregaciones ha venido allanándole el terreno al Maligno, durante toda la historia de la Iglesia. No es que Jesús esté aquí prohibiendo toda clase de juicio sobre los demás sino sólo la costumbre de juzgar injustamente a los hermanos.

Se condena la práctica demasiado frecuente de censurar, descubrir y divulgar defectos de otras personas, que posiblemente sean menos importantes que los propios del que así juzga. ¿Por qué el discípulo de Cristo no debe comportarse de esta manera?

Si nos dedicamos a evidenciar las briznas de los demás, Dios también nos juzgará a nosotros sin misericordia. Nuestras críticas destructivas darán lugar a la venganza de los injustamente tratados.

Los juicios inapropiados siempre serán parciales ya que es difícil contar con todas la evidencias necesarias para emitir un juicio cabal. Quienes se aventuran con tales juicios temerarios, a menudo, evidencian más de sí mismos que de los otros a quienes se pretende juzgar.

Y, desde luego, este tipo de crítica destructiva contra el hermano muestra a las claras que el amor de Dios y la compasión fraternal no moran en nosotros.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Zoé - La paja en el ojo