Los laicos en la iglesia

Debemos aprender a valorar a los laicos como corresponsables de la labor pastoral en todas las áreas de la misión de la iglesia.

08 DE JUNIO DE 2021 · 16:00

Foto de <a target="_blank" href="https://unsplash.com/@adrigeo_?utm_source=unsplash&utm_medium=referral&utm_content=creditCopyText">Adrianna Geo</a> en Unsplash CC.,
Foto de Adrianna Geo en Unsplash CC.

Yo creo que en la iglesia evangélica en donde se defiende el sacerdocio universal de los creyentes, el cristiano laico debería tener un lugar más preponderante en la vida de las congregaciones que en otras confesiones en donde no se explícita de una forma tan clara el que todo creyente tiene una labor sacerdotal. Es posible que en nuestras iglesias en las que pensamos y proclamamos que no tenemos un clericalismo tan fuerte como el que se da en otras confesiones religiosas, el laico también esté infravalorado en su función pastoral o sacerdotal.  

Voy a hacer algunas preguntas desde el punto de vista que estamos viviendo en ciudades y ambientes secularizados, urbes impregnadas de una fuerte secularización. Por tanto, los que piensen o crean que no se da tal secularización con ese grado y fuerza, que no existen de una manera tan clara esas urbes o ambientes que dan lugar al predominio de un mundo secular, quizás no estarán de acuerdo con la línea de este artículo. No obstante, vamos a ello, pues tengo un deseo de entrar en el tema, siempre con mucha humildad y con la sensación de poder equivocarme.

Preguntas: ¿Tiene hoy, en un mundo tan secularizado, más posibilidades de impactar a los no creyentes el mensaje dado por un laico en su lugar de trabajo, en la calle o entre sus amistades que el de un profesional de la religión? ¿Puede causar menos rechazo? ¿Podría ser más natural y más aceptado el mensaje de un laico que el de un predicador profesional? ¿Se dan estas pautas de comportamiento en la ciudad secular que tan bien describió Harvey Cox en su libro La Ciudad Secular? ¿Se debería preparar mucho más a los laicos y concienciarlos de su labor evangelizadora y pastoral en medio del mundo? ¿Podrían tener los pastores su labor prioritaria en la preparación de los laicos para que fueran lanzados al mundo como sacerdotes en un ambiente cambiante y secularizado?

Pensad que, probablemente y en los contextos más secularizados, hay una cosa importante que se da en el ámbito de nuestras ciudades secularizadas. Es el hecho de que el clero, el profesional de la religión, a veces, se ve con cierto recelo y puede causar cierto rechazo. En muchos de estos contextos secularizados, quizás, podría tener más posibilidades de triunfar el mensaje evangélico lanzado por un creyente laico que tenga su trabajo secular, que el lanzado por el profesional de la religión que sigue causando cierto rechazo en medio de los ambientes seculares. Es posible que por eso sea conveniente potenciar el sacerdocio universal de los creyentes. Esto sería vital e importantísimo para la evangelización del mundo.

Hay que potenciar el sacerdocio universal de los creyentes, hay que creer en ello y más aún, ponerlo en práctica de una manera generalizada. Los pastores en los seminarios deberían ser concienciados y enseñados para trabajar en estas líneas de preparación de laicos para que se pueda cumplir con la tarea del sacerdocio universal que predicamos. Debemos aprender a valorar a los laicos como corresponsables de la labor pastoral en todas las áreas de la misión de la iglesia, laicos entrenados y formados para que la iglesia se entienda como servidora y responsable de aquellos que aún no pertenecen al ámbito de la iglesia misma. Vivir para los otros, para los que están fuera, para los que aún no forman parte de la iglesia como cuerpo de Cristo.

No es que queramos suprimir el profesionalismo de los sacerdotes o pastores, sino que desearíamos que ese profesionalismo los lleve a entender su función en la formación de laicos para trabajar y evangelizar en sociedades secularizadas en donde los profesionales de la religión pueden ser vistos con cierta precaución o recelo. Hoy, la formación del laicado y su concienciación como sacerdotes en medio de un mundo secular, podría ser la función prioritaria del profesional formado en seminarios.

Por otra parte, los seminarios también deberían estar abiertos para la formación de laicos que no van a ser profesionales del púlpito en las iglesias, sino profesionales laicos y trabajadores de muy diferentes áreas y disciplinas que aceptan tener una formación especial que les pueda habilitar en su labor evangelizadora y sacerdotal en medio de un ambiente secularizado y ajeno a la vida de la iglesia. Hoy, quizás, en alguna manera y en medio de la fuerte secularización que nos cubre, si es que estamos en lo cierto, ser sacerdotes laicos puede ser un tanto más ventajoso en la evangelización del mundo que ser pastores profesionales en medio de un mundo secularizado que da la espalda, en un porcentaje bastante elevado, a cargos religiosos e instituciones eclesiales. Trabajemos por un laicado adulto, preparado, con conciencia de su sacerdocio y evangelizador.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - De par en par - Los laicos en la iglesia