Joaquín
Joaquín quiere dar a conocer su saber, y no pierde ocasión para atribuirlo a la Gracia de su Señor.
15 DE JULIO DE 2021 · 22:00
Al principio del confinamiento todos sabíamos que cada cual lo sufriría de diferente modo, pero nos preocuparon en especial aquellos ancianos y ancianas que días antes salían de casa para dar cuatro pasitos por la calle. Temíamos que ya no volveríamos a verlos.
Podría haber escrito un relato, de acorde con esta sección de cuentos, inspirado en la vida de Joaquín, un anciano que ha tenido que soportar todo un año de encierro entre las cuatro paredes de una residencia en Barcelona y que se ha visto perjudicado con la pérdida de movilidad y de visión.
Pero he preferido atender a su petición de dar publicidad a una de sus averiguaciones teológicas extraída del texto bíblico que conoce al dedillo.
Él ha sido una persona muy querida en las diferentes iglesias que ha asistido en Barcelona y aún asiste. A sus casi 90 años mantiene una actividad pensante envidiable en el campo de la ciencia y la teología.
Lo compagina con unos deseos intensos de comunicarse con el mundo, a pesar de que las residencias de ancianos están de espaldas a la sociedad, o la sociedad de espaldas a ellas.
Séneca dijo que “el sabio en su retiro es útil a la comunidad”, pero Joaquín además quiere dar a conocer su saber, y no pierde ocasión para atribuirlo a la Gracia de su Señor.
Sí, su nombre completo es Joaquín Rehués Domènech, hijo de valenciano y catalana, huérfano de madre a los pocos días de nacer.
Pero no me extiendo más y transcribo un texto de su creación, del que seguro espera alguna reacción de los lectores.
También adjunto los links de unos videos suyos (video 1, video 2, video 3 y video 4) grabados el año 2009 sobre una teoría matemática por la que demuestra empíricamente cómo hallar el máximo común divisor y mínimo común múltiplo en números decimales, descubierta por él.
Y EL SOL SE OSCURECIÓ
“Cuando era como la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena. Y el sol se oscureció, y el velo del templo se rasgó por la mitad”. (Lucas 23:44-45)
Lo que deseo transmitir no es lo más importante aunque tiene su importancia. Lo más importante es Dios hecho hombre sobre la tierra y la salvación que hizo para todos los seres humanos a través de la muerte de Jesús Hombre.
Poco antes de expirar Jesús en la cruz, está escrito en el evangelio de Lucas que hubo tinieblas sobre toda la tierra y que el sol se oscureció, pero con el sol se oscureció todo el sistema solar aunque no se mencione.
Tres horas sin la luz y la energía que emite el sol. Tal como dice el texto, fue el propio sol que se oscureció por acción divina, y no como consecuencia de algún fenómeno natural.
Según creo este hecho no figura en los registros de astronomía. Y debería ser considerado o expresado porque ocurrió gracias al Dios eterno, creador y salvador de su creación, revelado en la Santa Escritura la Biblia.
Y todo ello no según yo, sino según esta Santa Escritura, infalible, cierta y buena.
Gracia
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Cuentos - Joaquín