#SeAcabó normalizar ciertas conductas

El beso forzado en la boca, los calificativos subidos de tono, el manoseo etc. son hechos normalizados hace años.

30 DE AGOSTO DE 2023 · 11:00

Luis Rubiales, llevando a hombros a Athenea del Castillo en otra polémica imagen / AFP,Luis Rubiales
Luis Rubiales, llevando a hombros a Athenea del Castillo en otra polémica imagen / AFP

 ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; ¡que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo! ¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos! ¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida; los que justifican al impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho! Isaías 5:20-23

Está circulando un nuevo video con el que se intenta responsabilizar a la jugadora Jennifer Hermoso, del gesto de Rubiales hacia ella. Viendo el video de las jugadoras celebrando la victoria, y riéndose del beso (ellas lo llaman beso, él lo llama pico para quitarle importancia). Lo que pienso es que están con la euforia de la victoria, y no se han parado a pensar con frialdad en el tema. No han asimilado lo que ocurrió. Lo están descubriendo en ese momento, se ríen, Jenni explica cómo le sujetó la cabeza (no dice nada en absoluto de la pregunta que supuestamente le hizo el presidente, de consulta antes de besarla), risas eufóricas y nerviosas…

Cuando la euforia baja, y ante las reacciones del presidente y de los medios, Jenni reflexiona y se posiciona ante este hecho. Porque cuesta asimilar y darse cuenta de que se nos ha vejado, cuando la vejación está integrada en la cultura.

Este gesto del beso forzado en la boca, como los calificativos subidos de tono, manoseo etc. son hechos normalizados hace años...como se ha normalizado que un hombre, más aún un jefe, se puede permitir esto con sus subordinadas o empleadas. 

Las futbolistas lo normalizaron… como yo cuando lo vi, me rebotó en mi interior, me indignó y se lo dije a mi esposo. Y eso que pensé que igual tenían una relación entre ellos... lo dejé pasar con mucha incomodidad, como cientos de detalles de la vida diaria. Los dejas pasar.  Porque la sensación es como la de luchar contra una montaña que siempre ha estado ahí, y no te planteas moverla de su lugar...

Pero esto no es excusa. Jenni Hermoso en un principio, lo normalizó, aunque ya había dicho que no le gustó, en el primer video. Cuando se le fue la euforia y se le pidió su postura, ante las declaraciones de Rubiales, ya en frío tuvo que reflexionar y pronunciarse, se dio cuenta y valoró el hecho desde otra perspectiva, la perspectiva de género. Y negó rotundamente su consentimiento. Y también digo que aun cuando hubiera sido consentido, que no lo parece ni lo creo, está fuera de lugar y es machismo. Pero sería menos grave claro.

Muchas jugadoras de la selección española han manifestado son tratadas así en el pasado, y en su diaria relación con el entrenador y con Rubiales. Línea de trato machista, que las considera niñatas de pataleta y quejicas. Por eso se plantaron las 15 que no acudieron a los Mundiales para denunciar lo que ocurría. Por eso cuando ganaron Rubiales se tocó los testículos mirando al entrenador como una victoria de la testosterona sobre las niñatas.

Hace unos dias, una amiga muy cercana paseaba con su bebé, y desde una ventana un hombre le empezó a decir palabras de contenido sexual, que iban subiendo de tono hasta la obscenidad. Eso sigue estando normalizado. A mi amiga le dio tanto, miedo que entró rápidamente en un portal.  Las mujeres se tienen que tragar estas cosas... Porque hasta hace nada eso era normal, nos teníamos (y tenemos) que aguantar. Incluso hace más años era un orgullo que te dijeran cosas por la calle.

Ahora este acto se identifica como acoso callejero, y está multado. Recordemos también el episodio de los colegios mayores en Madrid, donde desde el “de los chicos” se vociferaba a voz en grito ante el “de las chicas”, insultándolas de la manera más obscena, tratándolas como vulgares objetos sexuales. Pues bien, algunas chicas ya habían normalizado estos actos, y lo tomaban como una broma o parte de la "cultura estudiantil".

También se normaliza la violencia en los hogares de tanto usarla, o el hablarse a gritos. Hace 20/30 años incluso era normal que tú marido te pudiera pegar, una normalización tan enraizada en la cultura, que está presente en la juventud de nuestros días, tal y como vemos en el barómetro del CRS (2021) cuando un 15,4% de los chicos afirma que si la violencia es de “poca intensidad” no es un problema para la pareja. 

Creo que puedo poner otro ejemplo en otra área de qué es normalizar algo porque ya se ha interiorizado. En el área de la educación de los niños. En este sentido ha habido una revolución. Hoy en día dar un azote a un hijo es denunciable, cualquier acto de violencia a los hijos es denunciable. Hablar incluso de ello está absolutamente fuera de lugar. Hace unos años, el azote y los castigos extremos y drásticos incluso físicos eran lo normal. Estaban normalizados. 

Ahora se emplea el método Montessori, y la disciplina positiva, basada en la comunicación, el amor, y la empatía y enseña las herramientas a los padres para entender el comportamiento de sus hijos (incluso cuando no es adecuado) y reconducirlo con respeto, sin luchas de poder y de un modo siempre positivo, sin control excesivo y a la vez ni permisividad. Se basa en el respeto mutuo y la colaboración, todo con la intención de enseñar al niño competencias básicas para la vida.

A los de la antigua escuela nos cuesta aplicar esta forma de educar y de ver al niño.  Hemos normalizado muchas conductas educativas que ahora son escandalosas. Pero antes estaban normalizadas. Los cambios cuestan, cambiar de mentalidad cuesta.

El machismo es una ideología, una forma de ver el mundo, de ver a la mujer como ser inferior. Y se necesita un verdadero y profundo cambio de mentalidad. Por eso es tan difícil la rehabilitación de un maltratador, pero no imposible. Sé. Como seguidora de Jesús, que el cambio profundo y total sólo puede venir a través de El.

Por eso se puede entender a Jenni Hermoso y a las jugadoras en su primera reacción hacia ese beso. Esta normalizado en muchos ambientes. Esta asumido el piquito, la palmada en el trasero, colocarse casi encima de ti por detrás para ver tu pantalla, mirarte de arriba abajo, fijando los ojos en tus pechos, que te hagan burla por detrás, que te ignoren tus opiniones aquellos que saben menos porque se creen más listos por el simple hecho de ser varones,  que te hagan la vida imposible por ser mujer, que hagan chistes machistas, que “te respeten mucho y consideren igual” pero no te dan oportunidad ni te dan participación a la hora de opinar y decidir...

Concluyendo, no cambia la cuestión principal este último video donde se ve a Jenni y al resto de compañeras riéndose del beso. No nos aporta nada que cargue la responsabilidad a la jugadora, que es lo que intenta Rubiales. #SeAcabó

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Seneca Falls - #SeAcabó normalizar ciertas conductas