Guarda tu corazón
Soy frágil, pero su poder se perfecciona en mi debilidad y eso me hace fuerte.
06 DE DICIEMBRE DE 2021 · 13:00

Mucho de lo que habita en mí está infectado de pecado. Mi naturaleza tiene el sello de la desobediencia primigenia, ecos de la caída pegado a mi ADN. Es una marca que he mirar con desdén sin dejar de doblegar a diario, sometiéndola al perdón de Dios; el único capaz de limpiar una y otra vez el rastro sucio que el pecado va dejando en mí.
Mi lucha es constante, no tiene tregua. Mis fuerzas están limitadas, pero cuento con Él, esa cobertura espiritual que me ciñe de poder y como si me tratase de una heroína, me hace poseedora de una fuerza nunca imaginada.
Ese amigo cercano me recuerda a diario que dependo de Él, que no puedo ni debo dormirme en los laureles dejando pasar el tiempo imprudentemente.
¡He de guardar mi corazón!
Medir mis palabras, barnizarlas de gracia haciendo de ellas vocablos que agraden al Padre. Estar atenta a la voz de mi maestro y aprender más y más de Él.
No quiero desviarme del camino trazado, por ello, debo sentarme cada día a sus pies y dejar que vuelva a marcarme las coordenadas; soy torpe y tiendo a perderme entre cantos de sirenas.
He de cuidar aquello que hago y eso otro que pienso. Guardar mi corazón, mirar a la cruz para ver en ella mi nueva naturaleza, redescubrir los estragos de esa vieja condición que me persigue y me lleva a rastrear ilusorias utopías impropias de quien ha nacido de nuevo.
Soy frágil, lo reconozco, una fragilidad que no escondo, no camuflo, necia sería si lo intentará pues sé que me conoce sobradamente, es Mi Creador, pero su poder se perfecciona en mi debilidad y eso me hace fuerte.
Esta lucha no es fácil, nada en esta vida lo es, pero, cuán bueno es saber que algún día este cuerpo tan proclive al pecado expirará y con ello la cárcel de barrotes invisibles.
La muerte parirá vida, una vida sublime que se nos ha prometido, una vida en plena libertad, lejos de todo peso del pecado.
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Íntimo - Guarda tu corazón