La invasión rusa de Ucrania ha llevado a los europeos a revisar su comprensión de la guerra y la seguridad nacional.

En los países nórdicos, muchos están pensando en cómo proteger mejor a su país de posibles amenazas futuras provenientes de su vecina Rusia.

Tanto Finlandia como Suecia presentan hoy 18 de mayo su solicitud para convertirse en miembros de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte), la alianza militar formada por Estados Unidos y 29 países europeos.

Finlandia: un cambio de la noche a la mañana para alejarse de la neutralidad

“El ataque de Rusia a Ucrania cambió totalmente el punto de vista de los finlandeses sobre el ingreso en la OTAN”, dice Leif Nummela, editor de la revista cristiana finlandesa Uusi Tie. El país se convirtió en miembro de la Unión Europea en 1995 y “poco a poco Finlandia también se acercó a la OTAN a través de varias formas de colaboración”. Formalmente, el país mantuvo su estatus neutral y en 2021, solo una minoría del 26% estaba dispuesta a cambiar de posición.

Pero “el ataque ruso a Ucrania y la terrible guerra que siguió ha cambiado las opiniones finlandesas casi de la noche a la mañana”, dice Nummela a Evangelical Focus. “Finlandia tiene más de 1.300 km de frontera común con Rusia, por lo que lo que piensan y hacen los rusos siempre es importante para nosotros”. Ahora, una mayoría muy clara del 76% de la población dice que es hora de unirse a la OTAN, según una encuesta realizada en mayo.

Una “actitud cristiana” que va más allá del miedo

Entre los cristianos finlandeses hay una “voluntad sin precedentes” de involucrarse en el apoyo a los refugiados ucranianos: ayudarlos a huir de la guerra, alojarlos en casas, enviar ayuda y, por supuesto, “orar por la paz en Ucrania y en todas partes”, explica Nummela.

“Como cristiano, creo que debemos trabajar duro para mantener la paz y evitar la guerra. Pero como la guerra es una triste realidad en este mundo, creo que es realista que Finlandia se una a la OTAN”, dice el periodista y también teólogo evangélico. No obstante, “nuestra máxima confianza está en el Dios vivo y todopoderoso. Hace un par de semanas en las noticias finlandesas entrevistaron a un pastor ucraniano que dirigía un centro de refugiados en Ucrania. Había perdido su casa en los bombardeos, pero esto es lo que dijo: “Tengo una casa y un país que no puede ser bombardeado (el cielo) y estoy de camino hacia allá”. Mientras tanto, hacía todo lo posible por servir a los demás”.

Este tipo de enfoque de la guerra es “la actitud cristiana correcta”, cree Nummela. “Desde el comienzo de la guerra, he notado una visión más realista de la vulnerabilidad y, a veces, incluso la tristeza de la vida en la tierra entre muchos finlandeses. Pero también espero que escuchen el Evangelio y pongan su máxima confianza en Cristo que es quien puede llevarnos a un país indestructible”.

Suecia: “Los cristianos están de parte de Ucrania”

En Suecia, la guerra en Ucrania y “el rápido cambio de opiniones en nuestro país vecino Finlandia” son las razones por las que el gobierno ha decidido abandonar su tradicional neutralidad, dice Olof Edsinger, teólogo que sirve como secretario general de la Alianza Evangélica Sueca. “La opinión pública también ha cambiado, pero no tan rápido, ya que especialmente la izquierda política ha enfatizado durante mucho tiempo la importancia de que seamos un país neutral”.

“Entre los cristianos las perspectivas varían, sobre todo en cuanto al rearme militar, y también en relación con el hecho de que la OTAN está en posesión de armas nucleares”, explica el representante evangélico. “Pero creo que la mayoría de los cristianos comparten los puntos de vista de nuestros principales partidos políticos, y ciertamente están de parte de Ucrania en el actual conflicto con Rusia”.

“En cuanto a mí personalmente”, agrega Edsinger, “apoyo nuestra solicitud para la OTAN debido a la ayuda que podemos brindar a nuestros vecinos nórdicos y bálticos. También me pregunto si realmente hemos sido tan ‘neutrales’ en las últimas décadas”.

Negociación en marcha

La membresía de Suecia y Finlandia necesitaría el apoyo de los 30 estados miembros de OTAN. Turquía ya ha expresado su oposición inicial aunque casi todos los demás países han acogido con satisfacción la solicitud de los dos países nórdicos.

Entre otros beneficios, ser miembro de la OTAN significa recibir apoyo militar de todos los demás miembros en caso de invasión militar (artículo 5 del tratado).