El juicio de la diputada del Parlamento finlandés Päivi Räsänen y del obispo de la Diócesis de la Misión Evangélica Luterana de Finlandia, Juhana Pohjola, ha continuado en el Palacio de Justicia de Helsinki este lunes 14 de febrero.

Räsänen y Pohjola están acusados ​​de agitación contra un grupo étnico.

Según la fiscalía, Räsänen ha insultado a homosexuales en un librito, en un tuit y en un programa de radio. Räsänen considera que los actos homosexuales son pecado, pero también ha enfatizado en varias ocasiones que todas las personas, incluidos los homosexuales, son creadas por Dios y tienen una dignidad indivisible.

La primera audiencia se celebró el 24 de enero.

Fiscalía: puedes creer, pero no necesariamente expresar tu fe

En la segunda y última sesión del juicio, la fiscal y los abogados de Räsänen y Pohjola han dado las declaraciones finales sobre el caso. La fiscal Anu Mantila ha dicho que está bastante claro que Räsänen tiene libertad de religión, pero que eso no excluye la responsabilidad en el uso de versículos de la Biblia.

“Si fuera así, los puntos de vista de la Biblia han suplantado a la Constitución finlandesa”, ha asegurado Mantila.

La fiscal hizo una distinción entre el lado interno y externo de la libertad religiosa: las personas pueden pensar lo que quieran, pero la expresión de la fe puede ser restringida. “Hago hincapié en que la libertad de pensamiento y de conciencia es irrestricta. Este tribunal no aborda los puntos de vista religiosos de la Biblia y la homosexualidad. Se trata de la expresión de estos puntos de vista”, ha señalado.

La fiscal ha reiterado su posición anterior de que los hechos humanos y la identidad son indistinguibles. “Cuando se juzgan las obras, se juzga a toda la persona. Las acciones no pueden separarse de la identidad porque las acciones son parte de la identidad. Entender las obras como pecado es despectivo”, ha dicho.

Según la fiscalía, el carácter insultante de las expresiones de Räsänen es evidente. La ofensa se enfatiza por el enfoque en la identidad sexual, que considera el “núcleo de la humanidad”.

La fiscal se ha referido a un informe del Consejo de Europa que recomienda que los estados adopten una postura firme contra las violaciones de los derechos de las minorías sexuales. Según las recomendaciones del Comité de Ministros del Consejo de Europa (31 de marzo de 2010), las comunidades religiosas también deben promover la tolerancia de la homosexualidad.

“La fuente relevante es el Código Penal de Finlandia”

Matti Sankamo, el abogado de Päivi Räsänen, ha señalado en su declaración final que la fiscal se ha basado en varias recomendaciones e informes del Consejo de Europa y prácticas en escritos legales estadounidenses, que, sin embargo, son irrelevantes en este caso.

“Son fuentes de derecho relevantes el Código Penal finlandés, su razonamiento y las prácticas de la Corte Suprema y la Corte Europea de Derechos Humanos”, ha dicho Sankamo. “Hay muchos informes del Consejo de Europa y pueden justificar cualquier cosa”, ha remarcado.

La sección sobre incitación contra un grupo de personas se encuentra en el Capítulo 11, Sección 10 del Código Penal de Finlandia. Prohíbe amenazar, difamar e insultar a cierto grupo de personas. Según Matti Sankamo, difamar e insultar requiere la intención de insultar y hacer acusaciones infundadas, lo que, según Sankamo, no sucede en el caso de Räsänen.

Para el abogado, un procedimiento punible típico sería difundir información, opinión u otro mensaje en el que se considere deseable la violencia o la discriminación, se compare a las personas con animales o parásitos, y en general se llame delincuentes a las minorías. “Está bastante claro que este no ha sido el caso en los escritos de Räsänen”, afirma.

Sankamo también se ha basado en el hecho de que hablar sobre un tema políticamente delicado siempre es ofensivo en principio y no se debe limitar sólo por la posibilidad de los insultos. “Esto conduciría a un efecto silenciador, que es un peligro para una sociedad abierta y el orden democrático”, concluye.

El abogado ha reiterado los comentarios que había hecho en la audiencia judicial anterior, de que la denuncia del fiscal contiene acusaciones erróneas. Contrariamente a lo que afirma el fiscal, Räsänen no ha dicho que uno deba deshacerse de la homosexualidad o que los homosexuales sean inferiores como seres humanos, ha recordado.

“La fiscalía busca silenciar la enseñanza de la ética sexual en el cristianismo”

Juhana Pohjola está acusado de distribuir y mantener en la página web de su editorial el librito de Päivi Räsänen. Según Jyrki Anttinen, abogado de Pohjola, el texto del folleto no es de ninguna manera ofensivo para las minorías sexuales y no ha sido escrito con el propósito de denigrar.

Anttinen critica la política del fiscal, de que expresar las propias opiniones bíblicas puede ser un delito. “Uno debe tener derecho a expresar su punto de vista basado en la Biblia. Esto es libertad religiosa”, ha apuntado.

“La distinción entre el hombre y sus obras es una norma universal y una enseñanza cristiana básica sobre la creación y la redención”, ha afirmado Anttinen.

Según él, no es la ley finlandesa ni las opiniones de los acusados ​​basadas en la Biblia las que se contradicen entre sí, sino la ley finlandesa y la interpretación de la fiscal de los textos de los acusados. “A través de sus interpretaciones, la fiscal busca silenciar y criminalizar la enseñanza bíblica de los acusados ​​y la ética sexual en general en el cristianismo”, ha resumido.

Anttinen también ha recordado que el folleto trata sobre la comunicación religiosa de la comunidad cristiana, que está protegida en la constitución por las disposiciones sobre libertad de religión y conciencia y libertad de expresión, así como por las convenciones internacionales de derechos humanos.

“Aceptar la interpretación de la fiscal conduciría a la criminalización de la confesión pública del cristianismo. No es posible imponer una restricción tan profunda en el área central de la práctica religiosa”, ha dicho Anttinen.

Al final del juicio, Tuomas Nurmi, el presidente del tribunal, ha declarado que la decisión se hará pública el 30 de marzo.

“La libertad religiosa incluye el derecho a creer y enseñar a otros”

Después del juicio, Päivi Räsänen ha dicho a los medios que está animada y que espera que la absuelvan. “Por supuesto, el tribunal ahora está considerando esto, pero tengo mucha confianza”, ha señalado.

Según Räsänen, la fiscal ha profundizado en el núcleo de la libertad religiosa, afirmando que la libertad religiosa permitiría tener fe en la mente, pero expresarla puede ser ofensivo.

“Al final, se trata de si se puede expresar qué es el pecado en la ética sexual, con base en la enseñanza de la Biblia”, ha expresado. 

“Si no se permite que se exprese, entonces se viola la libertad religiosa, porque esta incluye el derecho a creer, pero también a enseñar, difundir y compartir la fe a los demás. Según la lógica de la fiscal, estaríamos en China o Corea del Norte en términos de libertad religiosa”, ha dicho Räsänen.

La fiscal Anu Mantila ha explicado a los medios que vale la pena dejar las especulaciones sobre la sentencia. Mantila aún no ha tomado una posición definitiva sobre una posible apelación. “Leeremos la sentencia y veremos si la posición del tribunal se corresponde con la posición de la fiscalía y en qué medida puede no corresponder y tiene sentido ir a la apelación”, ha añadido.