¿Y si Dios existe? Un análisis de lo ocurrido con la publicidad religiosa-atea en buses

EL BALANCE Han sido analizados cerca de 1.500 comentarios relacionados con las noticias, cartas, y artículos publicados en La Vanguardia.es sobre la campaña ateísta en los autobuses de Barcelona. Cerca del 70% de los comentarios de los usuarios de LV.es debaten sobre la existencia (o no) de Dios, sin llegar a centrarse en la campaña autorizada por el Ajuntament y dejando a un lado las críticas a la iniciativa en los autobuses de Barcelona, que ha contado con el beneplácito de los gestores municipales. El reparto de opiniones entre creyentes y no creyentes es ecuánime (60-40%, aprox). En cuanto a la diversidad de opiniones sobre la idoneidad de la campaña publicitaria ateísta en los autobuses, la facción creyente se muestra crítica al no haber sido sometida a consulta popular, mientras que a la facción de la audiencia no creyente le importa poco el alcance de dicha iniciativa o la apoya. Los lectores de La Vanguardia.es han respondido al tema abriendo varios debates de fondo que a menudo se alejan de la mera polémica sobre lo adecuado de la campaña publicitaria en el transporte público. Buena parte de los participantes en los foros no dan mucha importancia a la campaña de los autobuses en sí y se centran en debatir sobre el contenido del mensaje: "probablemente Dios no existe, deja de preocuparte y goza de la vida". “TIENEN DERECHO” Apoyar este tipo de publicidad es la opción generalizada entre los que se consideran ateos porque reivindican esta forma de "recordarle a una parte de la sociedad, que también existimos, que la calle es de todos", tal y como decía el usuario ´coyote´. Incluso entre los que reconocen creer en Dios hay quien como el lector ´1956´ afirma que "tienen el derecho de expresarse" a pesar de no estar de acuerdo con el mensaje de la discordia. En defensa de la libertad de expresión, muchos lectores han aprobado la campaña, pero muchos se identifican con las palabras de ´Francesc´: "los que hacen esta campaña tienen derecho a hacerla, también tienen derecho a no hacerla y también tienen derecho a hacer el ridículo”. Incluso entre los mismos lectores que se reconocen ateos hay quien se opone radicalmente a la publicidad: "Como ateo que soy protesto por el uso publicitario de este tema. Es un tanto chorra buscar la provocación mediante estas argucias. Menos publicidad vacua y más efectividad ética, más hecho solidario, que tal y como anda el mundo siempre será de más provecho para todos" decía el usuario ´Y a mí qué’, demostrando la indiferencia generalizada frente a la acción publicitaria. LA IGLESIA CONTRAATACA La respuesta de la Iglesia evangélica no se hizo esperar. Reivindicaciones a favor de la existencia de Dios proliferaron en foros y blogs afines a la creencia en un ser divino, creador del cielo y de la tierra. De la libertad de expresión a la existencia de Dios. Y si existe, ¿es posible disfrutar de la vida? ¿A quién le preocupa realmente que Dios exista? ¿A quién le impide gozar de la vida? Y ¿Quién hay detrás de esta campaña? Preguntas que se repiten sin cesar en los foros de las noticias relacionadas con la campaña de publicidad ateísta en los autobuses de Barcelona. Debates candentes que no dejan de evolucionar. "Seguro que todos los ateos son felices por el mero hecho de serlos y los que creen en Dios no lo son por el hecho de creer, ¿Han hecho una encuesta estos felices ateos?", se preguntaba el usuario ´JLI´. Queda claro el tema del debate: ¿Se puede creer en Dios y gozar de la vida? al respecto, así respondía ´Txema´: "Soy católico practicante y gozo intensamente de la vida :-) Dios es Amor, Esperanza y Vida. Más bien me preocuparía no contar con Él". Es una muestra de la opinión de los creyentes que responden al mensaje ateísta en los autobuses. También se han hecho escuchar las voces de quien intenta dar una explicación al mensaje, como ´Kharloss´: "Sólo las malas conciencias y los inseguros necesitan que un ser superior las perdone sus maldades y les ampare ante su impotencia. La realidad es que si existiese ese dios, ya se habría dado a conocer". Y mientras el debate evoluciona hacia temas filosóficos, hay quien pone en duda los conocimientos en materia divina de los publicistas: "no es publicidad ateísta sino hedonista e informativa", sostenía ´riovan´. LA NECESIDAD APRIETA Apoyar o no la campaña es la opción de unos, pero en lo que coincide el grueso de los lectores es en pedir un desvío de la atención hacia preocupaciones más inminentes. En este sentido, el lector ´Hispano´ decía: "el problema es que para muchos el ateísmo es una nueva religión. Yo no soy creyente, mi mente no me deja, pero hacer propaganda pública de una interpretación de lo que sólo pertenece a la esfera más íntima de la persona me parece peor que un error: es una chorrada infantiloide". Por su parte, ´GAJ´ le apoyaba comentando que "es una manera más de gastarse el dinero, anunciarse para dar a conocer una agrupación, asociación o peña atea. Dejarse de tonterías y emplear las fuerzas en cosas más productivas. Cada persona es libre de tener sus creencias, no teniéndolas que anunciar en un autobús. De esta forma considero que no tendréis ni credibilidad ni respeto". Incomprensión es la palabra que resume la actitud que refleja la mayor parte de los comentarios de La Vanguardia.es. El peculiar tema que se publicita a mayor gloria del ateísmo en los buses de Barcelona ha sido el centro de todos los debates, y la polémica que se ha creado en torno a la existencia de Dios ha dado respuestas de lo más variadas. Por su parte, ´Sigrid´ trata de dar una respuesta a tal situación y apunta que "cuando se da tanta importancia a un tema es por algo. Los que creen, cada vez están más seguros de la verdad y los que no, cada vez más inseguros preguntándose el porqué de las cosas". Y mientras la crisis aprieta, hay quien como ´Orion´ se ciñe a la realidad más inmediata: "No me van a hacer creer ni no creer por un tonto anuncio en un bus, podrían gastarse el dinero en cosas más importantes. Creer es cuestión personal. Se matado en nombre de Dios y han matado también los que no creen. Es la humanidad."