El Padrenuestro
Hay en el Padrenuestro siete súplicas, o peticiones, y una doxología final.
24 DE AGOSTO DE 2012 · 22:00

No es un libro, pero es la oración más importante que tenemos en el Nuevo Testamento. Es el Padrenuestro, enseñada por Jesús a sus discípulos. Sobre ella se han escrito miles de libros.
Yo sólo le dedicará este breve artículo. Lleno de pasión, pero artículo y breve al fin y al cabo.
La gran importancia del Padrenuestro estriba en que su Autor es el mismo Jesucristo. Esta breve oración ejerce en nosotros un gran poder y nos cautiva de tal forma porque las palabras que la componen son palabras de Jesús, palabras vivas porque El era y es el Autor de la vida.
Cuando recitamos el Padrenuestro estamos repitiendo palabras que salieron puras e inspiradas de los labios del Salvador.
De ahí que la oración del Padrenuestro debiera convertirse para nosotros en la llave que abriese nuestras mañanas y cerrase nuestras noches.
Hay dos versiones del Padrenuestro en el Nuevo Testamento: Mateo y Lucas. La de Lucas, en el capítulo 11, está destinada a gente que todavía no sabe orar. Es muy breve. La de Mateo, más completa, está redactada pensando en los creyentes, en personas acostumbradas a orar. Por esto aconseja evitar vanas palabras en la oración.
Hay en el Padrenuestro siete súplicas, o peticiones, y una doxología final.
Las súplicas son:
Santificado sea tu nombre.
Venga tu reino.
Hágase tu voluntad.
Danos el pan nuestro de cada día.
Perdona nuestras deudas
No nos metas en tentación.
Líbranos del mal.
La doxología final se encuentra en el último versículo: Tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos.
Comentaristas bíblicos de todos los tiempos han relacionado el número siete con símbolos, imágenes y textos de la Biblia.
Los siete dones del Espíritu Santo.
Los siete candelabros del templo.
Las siete estrellas en la mano de Jesucristo, según el Apocalipsis.
Las siete naciones que los judíos debían derrotar antes de entrar en la tierra prometida.
Las siete vueltas que dieron los hebreos en torno a las murallas de Jericó.
Los siete días de la semana.
Las siete edades de la vida.
Los siete tramos de la marcha espiritual del alma.
Los siete períodos de la Historia.
El Padrenuestro es la oración más excelente que se ha producido en toda la Historia de las religiones.
Saludos,
Juan Antonio Monroy
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - El punto en la palabra - El Padrenuestro