Definición del amor
Puesto que Dios derrama su amor en nuestros corazones, debemos amarnos los unos a los otros de forma proactiva.
29 DE SEPTIEMBRE DE 2024 · 11:00
Un día escuché a un predicador lanzar un reto mientras estaba en la universidad. Obviamente, como estaba estudiando en Manchester, lo dijo todo en inglés. Pero lo recuerdo bastante bien. Tomé notas y agregué mis propios pensamientos a lo que dijo. He decidido traducirlo para beneficio de los lectores de Protestante Digital. Espero sea de bendición para muchos:
1ª Juan 4:7-11 afirma: “Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros”.
Para poder poner esto en práctica, leed 1a Corintios 13:4-8, que Dice:
El amor es sufrido,
Es benigno;
El amor no tiene envidia,
El amor no es jactancioso,
No se envanece;
No hace nada indebido,
No busca lo suyo,
No se irrita,
No guarda rencor;
No se goza de la injusticia,
Más se goza de la verdad.
Todo lo sufre,
Todo lo cree,
Todo lo espera,
Todo lo soporta.
El amor nunca deja de ser.
Puesto que “Dios es amor” (1ª Juan 4:8, comparado con Efesios 3:18-19), lee el mismo pasaje intercambiando la palabra amor por “Jesús”:
Jesús es sufrido,
Es benigno;
Jesús no tiene envidia,
Jesús no es jactancioso,
No se envanece;
No hace nada indebido,
No busca lo suyo,
No se irrita,
No guarda rencor;
No se goza de la injusticia,
Más se goza de la verdad.
Todo lo sufre,
Todo lo cree,
Todo lo espera,
Todo lo soporta.
Jesús nunca deja de ser.
Finalmente, puesto que Dios derrama su amor en nuestros corazones (Romanos 5:5b, 1ª Tesalonicenses 4:9b) y debemos amarnos los unos a los otros de forma proactiva (Juan 13:34-35, Romanos 12:10, Hebreos 13:1, 1ª Pedro 1:22, 1ª Juan 3:11), una última pregunta:
¿Eres capaz de sustituir “amor” por tu propio nombre?
NOTA: Si la respuesta es un “no”, ¿dejarás tu nombre y harás que los verbos estén en su forma futura? Tened presente 1ª Juan 3:11, que afirma: “Porque este es el mensaje que habéis oído desde el principio: Que nos amemos unos a otros”.
Por un año más
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