¿Cómo servir al Maestro?

Quieres servir a Dios, pero no sabes el modo, cómo, cuándo y de qué manera y le pides que Él abra con sus llaves donde mejor lo crea y donde quiera. Mas, se hace larga a veces la espera ¡tan larga! que has llegado a preguntarte si tu voz no llegó hasta la alta esfera porque Dios no parece contestarte. No temas, deja ya de atormentarte observa en torno tuyo la vida que palpita y muy cerca de ti, tal vez delante hallarás el lugar donde Dios, en verdad, te necesita. Quizá cerca de ti una vida se marchita y está necesitando de tu voz, el riego o... tal vez, si el silencio a meditar te invita elevarás a Dios, por otros, nuevo ruego. Pues en la obra de Dios, no existe el “luego” siempre es aquí y ahora ¡a cada instante! en la dura tarea o en el solaz sosiego o en el joven vigor del caminante. Si esto aprendes, verás cuán importante es para los que a Dios servir queremos buscar menos razón condicionante y hacer lo que está cerca y ¡adelante! ¡tan cerca! que por eso, a veces, no lo vemos.

Clara Rosique (Revista Nosotras) Selecciona: Isabel Pavón