El impacto de un dron ruso sobre una iglesia evangélica en Kiev (Ucrania) ha matado a un padre y una niña de 5 años que vivían temporalmente en una vivienda que para personas que huían de la guerra en el este del país.

En la noche del sábado 22 al domingo 23 de marzo, dos misiles guiados rusos explotaron sobre los terrenos de la iglesia Emmanuil, que está situado en una zona industrial a las afueras de la capital ucraniana.

L.B., que lidera un ministerio cristiano infantil en Ucrania, ha contado a Evangelical Focus que el primer misil explotó en el aire y dañó el tejado de la iglesia, “causando destrozos con centenares de piezas en las paredes, vehículos y el territorio”.

En las redes sociales, Emmanuil ha compartido fotos que muestran ventanas rotas, escombros, así como un vídeo de una cámara de seguridad que muestra el momento del impacto de un dron. El ataque también dañó un estudio utilizado para transmitir los cultos.

La bomba de un segundo dron, cayó junto a una vivienda temporal prefabricada que la iglesia estaba usando en su terreno para hospedar a personas desplazadas internamente por los combates en otras zonas de Ucrania.

“La explosión mató al padre de la familia y su hija”, que tenía tan solo cinco años, ha explicado L.B. a Evangelical Focus. “Estaban durmiendo en esta casa modular temporal. La madre sobrevivió solo porque la onda expansiva la lanzó. La encontraron tumbada en un colchón”.

Oleksandr y Oleksandra junto a su niña Nicole servían en su iglesia de acogida en varios contextos, especialmente con los niños y adolescentes. “Ambos también eran activos con personas como ellos, desplazados que habían huido o perdido sus hogares en municipios destrozados de zonas (oblasts) como Donetsk, Luhansk, Zaporiyia”.

“Nuestra iglesia ha sufrido una tragedia terrible”

El liderazgo de Emmanuil expresaba horas después que “nuestra iglesia ha sufrido una terrible tragedia” que “ha tomado la vida de nuestros familia en Cristo”, y citaba el Salmo 34:18 (“El Señor está cerca de los quebrantados de corazón, y salva a los de espíritu abatido”).

También explicaban que “pese al dolor, sabemos que Dios no nos ha abandonado. Él está cerca incluso en la oscuridad. Creemos que el amor es más fuerte que la muerte, y que nuestra iglesia será renacida como un símbolo de fe, esperanza y firmeza. Es tiempo de brillar para la iglesia de Cristo!”

Una familia reagrupada de Orikhiv

Hace unas horas, un post en Facebook contaba el origen de la joven familia, que servían en una iglesia de Orikhiv, hasta que el peligro de los ataques y la confiscación de su negocio familiar obligó a la madre e hija a buscar un lugar seguro en la capital Kiev.

Allí donde fueron acogidos por Emmanuil, mientras el padre seguía sirviendo en su iglesia de origen con tareas como ayuda humanitaria y apoyo espiritual. Oleksandr, Oleksandra y Nicole (la hija) se habían reagrupado y vivían desde inicios de 2025 en la casa prefabricada en el terreno de la iglesia atacada.