El Senado francés ha aprobado por unanimidad una propuesta de resolución que pide “hacer de la lucha contra la violencia pornográfica una prioridad de las políticas públicas”.

La moción, presentada por Laurence Rossignol (Partido Socialista, PS), Annick Billon (Centrista), Laurence Cohen (Comunista) y Alexandra Borchio Fontimp (Los Republicanos), es el texto del Senado más suscrito de la V República, con 255 firmas. Pero no es vinculante para el Gobierno.

Lucha contra la violencia pornográfica y protección de menores

La moción pide “un refuerzo de la persecución penal, del personal y de los medios materiales de que disponen los servicios de investigación y los jueces para luchar contra la violencia pornográfica e impedir la distribución de contenidos violentos ilícitos”.

El texto insta al Gobierno a “explorar todas las medidas fiscales para gravar la actividad de la industria pornográfica y los miles de millones de euros de beneficios que genera cada año”, y propone que toda violencia sexual cometida en un contexto pornográfico sea considerada delito de incitación a la violación o a la agresión sexual.

También pide que se haga cumplir la ley que obliga a los sitios pornográficos a establecer un sistema de control de la edad de sus visitantes, bloqueando a los que no la cumplan, con el fin de proteger a los menores.

Además, los senadores han subrayado la necesidad de hacer efectivas las tres sesiones anuales de educación afectivo-sexual en la enseñanza primaria y secundaria, previstas por ley desde 2001, y de contratar a profesionales sanitarios para intervenir en este ámbito.

“Pedimos al Gobierno que asuma las recomendaciones del Senado y haga todo lo posible para poner fin a la violencia sistémica causada por las prácticas de esta industria”, concluyen los autores de la moción.

Los evangélicos franceses “acogen con satisfacción la moción”

Unos días antes de que se adoptase la resolución, el Consejo Nacional de Evangélicos de Francia (CNEF, por sus siglas en francés) emitió un comunicado en el que animaba a los senadores y demás parlamentarios “a ocuparse de este tema para proseguir sus esfuerzos en la lucha contra la violencia pornográfica”.

“La violencia pornográfica es una distorsión de la sexualidad tal como la alienta la Biblia: sana y respetuosa entre un hombre y una mujer que consienten y se comprometen mutuamente. La explotación humana que resulta de la industria pornográfica es un atentado contra los derechos humanos y la dignidad”, señalaban desde el CNEF.

Según la entidad evangélica que representa a la mayoría de las iglesias y organizaciones evangélicas independientes en Francia, “las medidas de la propuesta de resolución parecen pertinentes: constituyen un primer paso urgente ante un desafío ineludible para nuestra sociedad”.

“Los protestantes evangélicos acogen favorablemente la propuesta de resolución que llama a luchar contra la violencia pornográfica”, declaraba en Twitter el director de comunicación del CNEF, Romain Choisnet.