Protestante Digital renuncia al dinero de Pluralismo y Convivencia

La Alianza Evangélica Española ha hecho público en el día de hoy un Comunicado en el que informa de su renuncia formal a recibir subvenciones de dinero público que provenga del criterio de realizarse por ser una entidad religiosa. Esta decisión la tomó la AEE en su última Asamblea, pero no la ha hecho pública hasta este momento debido a que “de facto” se ha llevado a la práctica en esta última Convocatoria de la Fundación Pluralismo y Convivencia, a la que no se ha presentado. La decisión de la Asamblea fue “no solicitar subvenciones al Estado y organismos dependientes de él, concedidas como apoyo a confesiones religiosas por el hecho de serlo”. Con ello, explica la AEE, “queremos profundizar en una línea de actuación que ha sido la mayoritaria a lo largo de los años entre los evangélicos en España y que es coherente con la actuación del Protestantismo desde la Reforma”. La AEE ha recibido básicamente, en los últimos años una subvención anual de la Fundación Pluralismo y Convivencia dirigida a mejorar aspectos de su proyecto de comunicación Protestante Digital, aunque siempre con la visión de que su funcionamiento no dependiese económicamente de esta aportación. La Alianza y Protestante Digital, con esta decisión están dando “un paso de fe descansando en la provisión de Dios y el compromiso de su pueblo”. En este sentido, tienen abierta una petición de apoyo a la que pueden acceder aquí. CRITERIOS DE LA DECISIÓN TOMADA Este posicionamiento no incluye a aquellas subvenciones concedidas para proyectos de ayuda social o de tipo cultural que sea un bien para la comunidad, siempre y cuando que se concedan “en igualdad con otros prestadores de servicios sociales, sin atender a su consideración religiosa o no”. La razón de apoyar este tipo de subvenciones es que se consideran “no sólo legítimas, sino llenas de coherencia con el objetivo que persiguen. No representan trato de favor o discriminación positiva o negativa por el hecho de ser entidad religiosa quien las pida. Simplemente una entidad religiosa presta un servicio que la sociedad valora, que es útil a un colectivo importante de la población y que se presta con criterios de calidad y puede y debe ser financiado independientemente de la ideología de quien lo presta”. “Otra consideración nos merece el hecho de aceptar subvenciones dirigidas específicamente a entidades religiosas y por el hecho de serlo. Nuestro posicionamiento, y el de la mayoría de las Iglesias Evangélicas a lo largo del tiempo, ha sido el de no aceptar este tipo de subvenciones” expone la AEE, ya que en su opinión “la financiación de nuestras actividades es un privilegio de los creyentes y puede llegar en determinadas ocasiones a coartar la independencia de criterio de la organización que las recibe”. Pensando en otras entidades evangélicas que sí acuden a las fuentes de la subvención de dinero público en su calidad de entidades religiosas, la AEE especifica que “Nuestra toma de postura afecta, obviamente, a nuestra entidad. No queremos prejuzgar la actuación de cualquier otra entidad religiosa que tenga una postura diferente. Lo que nos mueve es ser más coherentes con nosotros mismos”. Puede leer aquí el Comunicado completo de la Alianza Evangélica Española