El bando del alcalde

Calzada para el tráfico rodado, carril para autobuses y taxis, carril para las bicis, carril para los patinetes, todas las calles cuentan con sus respectivas vías de transporte en la ciudad de Barcelona.

El transporte veloz ha ganado prioridad por encima del caminar de los viandantes.

Llegó un momento que motos, bicis y patinetes no solo circulaban por sus respectivos carriles, lo hacían también invadiendo la acera peatonal de calles, paseos y plazas.

El nuevo alcalde socialista Jaume Collboni se planteó dar solución a los conflictos que ello generaba, sobre todo en número de peatones accidentados, víctimas de esa anarquía de desplazamientos.

Todo era un circular veloz por la ciudad, para los ancianos y los niños cada vez era más peligroso salir a la calle.

La velocidad había ganado la batalla definitivamente.

Conscientes de ello, el gobierno local comunicó el siguiente bando.

“Señores vecinos y vecinas de Barcelona, por orden de nuestro Ilmo. alcalde se hace saber que a partir de hoy se prohibirá la circulación peatonal por las calles de nuestra ciudad.

Cada cual conducirá su coche, triciclo, moto, bici, patinetes, monociclos, monopatines, patines, etc., nada más salir del portal de su casa. Los carritos de niños llevarán incorporado un motor de aceleración, así como las sillas de los minusválidos que serán todas eléctricas.

En casos de necesidad extrema se aceptará circular sin medio de transporte, pero corriendo que te las pelas, como los niños que harán rodar el aro clásico. Se fijará la velocidad mínima en 30 km/h, por debajo de la cual se sancionará a los infractores.

Ya se pensará qué hacer con los ancianos, está en estudio. Entiende el gobierno local que satisfacemos de este modo los anhelos de salir pitando de la mayoría de los ciudadanos”.