Atentado contra iglesia bautista en EEUU

El atacante disparó en medio del culto dominical, causando la muerte de 26 personas, entre ellos varios menores de edad. Hay al menos 20 heridos.

Redacción PD

TEXAS · 05 DE NOVIEMBRE DE 2017 · 19:46

La iglesia bautista atacada. / Twitter Max Massey,
La iglesia bautista atacada. / Twitter Max Massey

Un hombre ha atacado la Primera Iglesia Bautista de Sutherland Springs (Texas, EEUU) durante la celebración del culto dominical de la mañana. 

El Gobernador de Texas, Greg Abbott, confirmó en conferencia de prensa que 26 personas perdieron la vida como consecuencia del ataque, otros 20 están recibiendo atención médica en hospitales locales. "Pedimos el consuelo, la guía y la sanidad de Dios para aquellos que están sufriendo", agregó Abbott.

El responsable del tiroteo fue identificado con el nombre de Devin Kelly. Aún se desconocen las causas que lo llevaron a ingresar a la iglesia y disparar a los feligreses. En conferencia de prensa las autoridades confirmaron que el sujeto huyó, la policía lo persiguió, y falleció en su vehículo mientras huía. Aún está bajo investigación si se suicidó o falleció a consecuencia de los disparos de la policía.

Los agentes encontraron varias armas en el vehículo del sujeto quien iba vestido de negro y con chaleco antibalas. Las autoridades lo identificaron como un hombre blanco de edad joven.

También se confirmó que los fallecidos tenían entre 5 y 72 años de edad.

El pastor de la iglesia y su esposa estaban de viaje, pero ellos mismos han confirmado en un comunicado que su hija, de 14 años, ha sido una de las fallecidas en el ataque.

La noche del domingo ha habido una vigilia de oración celebrada cerca del edificio de la iglesia. Más de 100 personas, incluidos los residentes de la pequeña ciudad y otros de los alrededores, participaron. El gobernador también asistió a la vigilia.

Un pastor de otra iglesia en la población, a unas calles del lugar del atentado, ha dicho a CBS News: “Somos una comunidad pequeña, con mucha fe. Estamos seguros que están en los brazos de Cristo. Cuando yo estaba predicando en nuestra iglesia, más allá en la calle, nos llegaron llamadas de que había alguien disparando en la iglesia bautista. Conozco a todas las personas de esa iglesia”.

Sutherland Springs es una pequeña población de unas 600 personas, a 45 kilómetros al sureste de San Antonio (Texas), por lo que todas las víctimas serían conocidas por los vecinos. Un centro comunitario está acogiendo a los familiares. 

Según un listado de 2015 en el directorio nacional de la Convención Bautista del Sur, la Primera Iglesia Bautista de Sutherland Springs se estableció en 1926. Tiene casi 270 miembros y atrae a unas 180 personas para los servicios dominicales.

El gobernador de Texas dijo en su perfil de Twitter: "Nuestras oraciones con todos los que han sido lastimados por este acto del mal".

"Hemos recibido a múltiples pacientes del tiroteo", ha dicho una portavoz de un centro médico en la localidad de Floresville, a 15 millas de donde se han producido los hechos, según Fox News.

Helicópteros se encuentran en el lugar, así como agentes del FBI.

Grupos de personas han orado en las calles colindantes mientras se esperaban noticias del interior del templo.

También el presidente de los EEUU, Donald Trump, ha reaccionado desde Japón, donde se encuentra iniciando una gira de 13 días por varios países asiáticos.

El mandatario ha dicho en conferencia de prensa que, "nuestros pensamientos y oraciones están con las víctimas del tiroteo en Texas. Gente que estaba en un lugar de alabanza y adoración. No podemos expresar el dolor que sentimos. En momentos como éste, hacemos lo que hacen los estadounidenses: nos unimos, unimos nuestras manos, nos mantenemos firmes. Todo Estados Unidos está orando a Dios por la sanidad de los heridos y por las familias afectadas".

Más temprano el mandatario acudió a la red social Twitter para publicar sus primeras reacciones. "Que Dios esté con la gente de Sutherland Springs, Texas. El FBI y la policía están en la escena. Estoy monitoreando la situación desde Japón".

 


EL ANTECEDENTE DE CHARLESTON

El último ataque de esta envergadura en una iglesia estadounidense ocurrió en Charleston (Carolina del Sur) en junio de 2015. Dylan Roof, un joven blanco, entró en una iglesia de Charleston (Carolina del Sur) y mató a tiros a nueve personas afroamericanas en el que fue considerado uno de los peores crímenes de odio. Roof fue condenado a muerte.

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