Buffalo, Wyoming
25 de diciembre
Coordenadas: 44°20′51″N, 106°42′4″W

En mi comida de navidad, pruebo la carne de búfalo. Bueno, se trata de una mezcla entre carne de bisonte y ternera. Es dura y, según el cocinero del lugar donde me hospedo, con quien comparto un agradable día, contiene grandes propiedades nutritivas."/>

El silencio de los búfalos

Buffalo, Wyoming
25 de diciembre
Coordenadas: 44°20′51″N, 106°42′4″W

En mi comida de navidad, pruebo la carne de búfalo. Bueno, se trata de una mezcla entre carne de bisonte y ternera. Es dura y, según el cocinero del lugar donde me hospedo, con quien comparto un agradable día, contiene grandes propiedades nutritivas.

02 DE JUNIO DE 2007 · 22:00

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Su padre, el padre de su padre, y el padre del padre de su padre, como él los llama, comieron esta carne todos los días de su vida, y jamás estuvieron enfermos. Le pido que me hable de los búfalos, o bisontes, acompañándome a una taza de café y una tarta de manzana como no he probado nunca. De esas que se dejan enfriar en la ventana de la cocina, a la espera de un Huckelberry Finn que nunca aparece. Hasta el siglo XVII, el bisonte americano rondó holgadamente los territorios del norte del continente norteamericano. Fue venerado por muchas de las tribus nativas de norteamérica. En algunas naciones indígenas, la caza de éste animal era acompañada con un gran respeto, admiración por sus cualidades, y agradecimiento por todos los beneficios que aportaba. El cocinero me explica que en el momento de la muerte del bisonte, el cazador se acercaba a inhalar su último respiro como forma de beber sus virtudes. Fue conocido como "Dador de vida", pues todo de éste ser era utilizado como alimento, ropa de abrigo, indumentaria religiosa y hasta materiales de construcción. Miro por la ventana, y veo las montañas blancas entre las que tiempo atrás debieron de pastar los búfalos. Tenía un libro en casa, en el que se hablaban de estos majestuosos pero mansos animales. Manso significa dócil. Interesante adjetivo. El valor de las pieles empezó a ser apreciado por los ingleses en su llegada al Nuevo Mundo, y fue el motivo para la matanza de miles de éstos. Cuando muchas de las naciones nativas, incluyendo la Miami, Shawnee y Potawatomi fueron desplazadas, el bisonte americano llegó a un punto peligroso de acercarse a la extinción, pues fue rápidamente reducido de millones a unos cuantos cientos. Hoy en día, más de 250.000 de los 350.000 bisontes restantes son criados para consumo humano. Su carne tiene menos grasa y colesterol que la carne vacuna, lo que ha llevado al desarrollo del beefalo(1), cuyos restos tengo en mi plato. El cocinero me deja un rato a solas con mis pensamientos. Como los búfalos, pienso, nos vemos sensiblemente reducidos cuando nuestras convicciones son poderosas, o cuando somos verdaderamente útiles para nuestro entorno. Nuestra presencia debería notarse. Deslizo pensativo un billete de veinte dólares sobre el mostrador. Ya no se ve apenas búfalos. La ausencia es silencio. El silencio de los búfalos.
1) N. del T.: mezcla de las palabras beef, chuletón, y buffalo, búfalo).

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