Que no nos enreden con vanas palabras

La ocasión del Senado ha sido modelo de la confusión entre acción política y doctrina religiosa. Ambas mezcladas como una “verdad”. 

08 DE DICIEMBRE DE 2024 · 18:00

Hemiciclo del Senado. / <a target="_blank" href="https://es.wikipedia.org/wiki/Senado_de_Espa%C3%B1a#/media/Archivo:Hemiciclo_del_nuevo_edificio_del_Senado_de_Espa%C3%B1a_(2012).jpg">Rastrojo</a>, Wikimedia Commons.,
Hemiciclo del Senado. / Rastrojo, Wikimedia Commons.

Me refiero a lo que se ha desarrollado en el Senado. La reunión y discursos de la red de valores que han organizado. 

Que cada uno crea y procure lo que mejor le parezca. Yo creo que eso no representa respeto ni obediencia a la Escritura. Eso es lo que antes hubo en los que guardaban la Ley, y presumían.

Es lo que opino, aquí con nuestro grupito. Nunca se me ocurrirá proponer algo así como modelo o ejemplo de respeto y sujeción a la Biblia. Todo lo contrario. Valores, todos los que se quieren. Verdad de verdad, ya se sabe.

Uno de los principales ponentes, el señor Mayor Oreja, es súbdito, proclamado por él mismo, del papado. Podría, por tanto, venerar una reliquia, ofrecer oblaciones por las almas en el purgatorio… Anunciar la “verdad” de la mediación de María... Creer y propagar como verdad absoluta que la hostia es el cuerpo y la sangre de Cristo… Todo eso, que ya sabemos, es creer en la Biblia a su manera. Nosotros creemos que eso es oposición frontal a la enseñanza de la Biblia.Lo que los fariseos creían como su credo de la Biblia, nosotros creemos que es una forma de creer contraria a la Biblia.

Me paree que la ocasión ha sido modelo de la confusión entre acción política y doctrina religiosa. Ambas mezcladas como una “verdad”. 

Cada cual puede, al menos en la denostada democracia, proponer un modelo de acción política. Luego te votan, y se ve. Cuando alguien piensa que su modelo tiene al mismo Cristo de componente, cualquier cosa puede ocurrir. Desde una cruzada… No hace falta la sala del Senado, toda la historia de nuestra (o de ellos solos) España está llena de portavoces de los valores del papado, que ahora son de libertad, justicia, y defensa de la familia…

Esto lo anoto a más de una semana de que llegue a nuestra conversación. Aquí en Sevilla ya tenemos la Magna, y esto tiene tela. Con el congreso de religiosidad popular, como medio y modelo de evangelización, se pondrán en la calle a procesionar un buen número de imágenes, locales y de otro sitios. Si piden el Senado, seguro que se lo dan.

De momento les han dado 600.000 eurillos, “sobrantes de partidas de Cultura”, que así nos va la cultura. Y no pasa nada. Pues aquí con los pasos nadie se mete. Pues todos, los de izquierda a la cabeza, deben proteger la cultura y religiosidad popular. Que no se quejen si pasada la Magna se pasan al Senado con sus valores, que son los mismos. El ayuntamiento, pues todo lo que pidan, que por algo Sevilla es Sevilla (ahora de derechas, pero antes, de izquierdas sería igual, porque lo ha sido en otros ejemplos). Franco le puso lo de “muy mariana”, ya verán los de la memoria histórica. Ya lo hemos visto.

Dos cuestiones creo que deben pensarse en eso del Senado, el creacionismo y el aborto.

Empiezo por el creacionismo. Que Dios creó los cielos y la tierra, el mar y todo lo que hay por esos sitios. Yo creo, y creemos en el grupito, lo que la Biblia diceporque lo dice la Biblia. Para las cosas de la Biblia no tenemos otra autoridad. No sólo el Génesis, también los Salmos, y otros escritos dicen eso. Por poner un caso: “Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía” (Hebreos 11:3). Si el autor, inspirado por el Espíritu Santo, lo dice, nosotros lo creemos. Lo tenemos.

Otra cosa muy diferente, y en eso nos vamos al Senado contra esos modos de creacionismo, es establecer una teoría o modo como la verdad. Yo creo, porque me ha sido (nos ha sido) dado, que el Dios soberano en todas las cosas creó, y sostiene, todas las cosas, las visibles y las invisibles. Pero no sé la manera, y no admito que me cambien la fe en una teoría como si fuese la fe en la Escritura. No. La creación por parte de Dios, es verdad. Las presentaciones sobre cómo se hizo, siempre son teorías, que pasan y envejecen. (Igual que pasan y envejecen las teorías sobre la no creación.)

Lo que sí conozco es que muchos que han presumido de “creacionistas”, y de seguir la Biblia “al pie de la letra”, han destrozado el mensaje del Evangelio de salvación. (Y sé cómo lo hacen.)

También es evidente que todos los modelos de cosmos habidos y por haber, con todas sus fantasías, (todas las herejías incluidas) han sido formuladas por “creacionistas”. Eso sí, el creador es variopinto, desde demiurgos hasta poderes opuestos. Luego, la manera de vivir y morir en la tierra, tiene que ver con esas fuentes iniciales. No debería olvidarse que el primer creacionista fue el diablo, que no negó la creación, sino el propósito del Creador. (Caín también era creacionista.)

Y pasamos al aborto. Yo creo que no se puede quitar una vida del lugar donde se protege por naturaleza. (Otra cosa es cuando existe una circunstancia de peligro para la madre.) También es evidente que existen casos de embarazos en situaciones humanas muy difíciles, por eso tomarlo de forma frívola es ya un delito social. Pero también creo, y conozco, que desde hace un buen tiempo ha sido instrumento usado para ganancia partidista por miserables que cuando han llegado al poder (con mayoría absoluta) no han impedido que se siga produciendo. Miserables. Sacan pecho en el Senado, pero se han olvidado de la misericordia y la justicia. Como soy creyente, Dios los juzgará. Además, parece que les queda poco tiempo, por eso están corriendo. En ellos el tiempo es juicio y muerte, en nosotros, vida y triunfo manifiesto con el Redentor.

¿Y los evangélicos? Pues por ahí andan. Yo me acuerdo de que hace ya bastante tiempo, lo que ahora es argumento recurrente, y creo que válido, sobre la no necesidad de llegar al embarazo, porque tenemos muchos medios para evitarlo a nuestro alcance, hubo en el mundo representado en el Senado todo un revuelo porque eso, los anticonceptivos, iban contra la vida y la familia. Eso antes, ahora habría que ver quién entre los reunidos en el Senado no los ha usado o los usa. Miserables, hipócritas.

Me entristece cada vez que pienso en la cifra de abortos en España. Pero no sé qué hacer. Tengo claro que no aplaudiré lo del Senado, eso sí. Y tengo claro lo que se dice en la Biblia, que la sangre inocente en la tierra clama venganza al Señor de los cielos. Cada gota está contada. Pero también tengo claro que en la Biblia existe una enseñanza que parece chocante. En el llamado Antiguo Testamento, son los de Israel los reprendidos por los profetas porque “abortaban a sus hijos echándolos a Moloc”. Y eso fue bastante común, aunque el pueblo sólo tenia la Ley de Moisés, para todas las esferas de la vida.

En el Nuevo Testamento resulta que nunca aparece el aborto como algo que tienen que tratar las iglesias o comunidades cristianas. (Es cierto que luego en su desarrollo sí lo colocan en plano central, junto a cientos de corrupciones, que ya se sabe.) Parece que no existe. Nadie habla de ese problema. Si Cristo y sus Apóstoles, en todo el Nuevo Testamento, ni siquiera mencionan el aborto en la sociedad en la que viven, ¿por qué lo tengo que poner yo de prioridad en mi predicación? El problema en las comunidades del Nuevo Testamento, aquello sobre lo que se les avisa, son asuntos variados, que siguen igual hoy¡pero el aborto en la sociedad no aparece!

No por la Escritura, sino por los datos de la Historia, nos enteramos de la situación terrible en la que estaban los niños en el imperio romano, que ni siquiera “eran niños” ¡después de haber nacido! hasta que el padre de familia no lo decidía. (¿Será esa parte de la familia tradicional?) Los que el padre no recibía en la familia, eran echados a los estercoleros donde siempre había perros al acecho. ¡Y eso ni se menciona en el Nuevo Testamento!

Ante esa situación mucho, mucho, no sé qué decir. Tristeza, y Evangelio, pero no el cinismo del Senado.

Y para terminar, otra cuestión sobre esto un poco rara. ¿Por qué la izquierda ha puesto el aborto como una bandera festiva? Ni entro ni salgo, pero me parece algo sin sentido. Yo he conocido a gente de izquierda, antiguos, que nunca se les ocurriría abortar. Tenían solidaridad con la prole.

 

¡Protestante Digital te necesita!

Gracias a quienes aportan económicamente podemos hacer esta labor de comunicación desde una perspectiva evangélica a través de una plataforma gratuita, con el propósito de ser sal y luz en nuestra sociedad. Si quieres que Protestante Digital pueda continuar con esta labor, ¡anímate a ser parte! Te necesitamos. 

Encuentra más información en apoya.protestantedigital.com.

Si lo prefieres puedes donar por Transferencia Bancaria. Asunto “Donativo Protestante Digital” en la cuenta de la Alianza Evangélica Española (CaixaBank): ES37-2100-0853-5702-0025-3551

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Reforma2 - Que no nos enreden con vanas palabras