Las Vegas: stand del Evangelio en la mayor exposición pornográfica

Heather Veitch, fundadora de J.C.´s Girls ("Chicas de Jesucristo"), y Annie Lobert, fundadora de "Prostitutas para Jesús", trabajarán en los pasillos de la Expo del Entretenimiento Adulto en Las Vegas entregando tratados y testificando de Jesucristo a quien quiera escucharlas. La Expo se lleva a cabo todos los años durante el mes de enero y se espera que atraiga a 40.000 personas. También incluye los Premios AVN, la versión de los Oscar de las películas para adultos. El ministerio de Veitch trabaja cada semana en clubes nocturnos locales, donde ella y otras mujeres de su iglesia asisten y pagan por una de las chicas que ofrecen ´lapdance´ (baile en privado). “Son sólo tres minutos, los pagamos y cuando la tenemos en frente, le decimos que no lo haga, que le traemos un mensaje de Dios", comenta la predicadora. Después de hablarles de Jesús a las prostitutas, les dan tratados que hablan de Jesús y su mensaje; y las invitan a la iglesia. Veitch dice que los bares son muy pragmáticos: les han permitido siempre entrar, conociendo su actividad espiritual, con la única condición de que paguen por estar con las bailarinas. HISTORIAS DE REDENCIÓN Heather Veitch empezó a bailar en bikini en 1995 cuando a los 21 años se encontró sola, sin dinero y con un hijo. Ganaba "entre 200 y 700 dólares por noche, trabajaba tres días y no me desnudaba en público”, aclara. Más tarde actuó en algunas películas pornográficas (soft porno) de bajo presupuesto. Aunque llegó a ganar 2.000 dólares por noche, decidió retirarse en 1999 ante el temor que cundía por la llegada del nuevo milenio. Fue entonces cuando se convirtió a Cristo, se casó con su estilista, Jon Veich, estudió maquillaje y peluquería y tuvo otra hija. En su nueva vida nada la unía al pasado vivido, hasta que en 2003 se enteró de que una de sus mejores amigas ´stripper´ había muerto sola por alcoholismo y droga. "Nunca hablé de mi pasado con nadie, pero este episodio rompió de verdad mi corazón y supe que tenía que regresar y hablar con las chicas de que existe otro camino, y Dios se ocupa de nosotras también", cuenta Heather. Por su parte, Annie Lobert (nacida en 1967) trabajó 16 años como prostituta y acompañante en Las Vegas , Minneapolis, Minnesota y Hawai. Actualmente lidera el ministerio que ella misma fundó, “Prostitutas para Jesús”, organización internacional que se ocupa de la trata de personas, la prostitución, la violencia sexual y la explotación vinculados a la pornografía y la industria del sexo. UN REFUGIO Muchas de las prostitutas que estas predicadoras han abordado a través de sus ministerios, han sido conmovidas al escuchar que Jesús las ama pese a su estilo de vida. Algunas han pedido oración, otras han dejado la industria del sexo o han abandonado la idea de abortar. En 2008, el ministerio “Prostitutas para Jesús” estableció una “casa de seguridad”, en colaboración con la Iglesia en el Sur de Las Vegas. El programa, titulado "Destiny House", es un refugio seguro para las víctimas del tráfico sexual y sirve sobre todo a las prostitutas y trabajadores locales de comercio sexual.