El expresidente estadounidense Jimmy Carter murió este domingo a los 100 años. Carter cumplió un mandato como el 39º presidente de los Estados Unidos (1977-1981) y se identificó como bautista, siendo el primer presidente de esta confesión en gobernar en Estados Unidos.

Destacado activista en favor de los derechos humanos, Carter dedicó su vida, tras el paso por la política, a la promoción de la reconciliación y la paz en todo el mundo, por lo que fue reconocido en el año 2002 con el Premio Nobel de la paz. Su compromiso venía de una clara convicción cristiana, de la que a menudo hablaba y consideraba clave en su entendimiento de la acción social.

Breve biografía

Jimmy Carter nació en una granja en Georgia el 1 de octubre de 1924. Sus padres eran personas humildes que cada domingo acudían a la capilla bautista de su pueblo. El joven Carter cursó estudios medios y se licenció en ciencias en la Universidad Naval, pero no terminó su licenciatura en física. Ingresó en el ejército muy joven, sirviendo en inteligencia militar y fue destinado a varios submarinos.

Después de casarse y durante su vida militar continuó con sus prácticas cristianas y colaboró como profesor de la escuela dominical de su iglesia. Elegido como senador de Georgia en 1970, sorprendió a todos por su política antirracista y la integración de varios negros en su gobierno. Se presentó a las primarias del partido demócrata y las ganó contra todo pronóstico. Salió vencedor en las elecciones de 1976 por un estrecho margen.

Carter se convirtió en el primer presidente de un estado del sur desde el siglo XIX. Su presidencia fue muy polémica. Muchos le consideraron un presidente débil, pero fue por la Crisis de los Rehenes en Irán en 1980 por lo que perdió las presidenciales frente al candidato republicano Ronald Reagan.

Carter fue el primer presidente de los Estados Unidos que se reconoció como cristiano “nacido de nuevo”. Durante su presidencia asistió regularmente a la Primera Iglesia Bautista de Washington y mantuvo sus compromisos cristianos. También escribió algún libro con reflexiones bíblicas y devocionales.

Carter perteneció a la Convención Bautista del Sur hasta el año 2000, cuando salió de la organización por tener ciertas posturas discrepantes. Algunos bautistas retiraron su apoyo a Carter por su actitud frente al aborto y por sus ideas ecuménicas.

En los últimos años el ex presidente Carter se dedicó a actividades humanitarias y su mediación permitió solucionar varios conflictos internacionales, lo que le llevó a recibir el Premio Nobel de la Paz en el año 2002.

El Comité Nobel reconoció la vida de servicio de Carter “por sus décadas de esfuerzo incansable para encontrar soluciones pacíficas a los conflictos internacionales, promover la democracia y los derechos humanos y promover el desarrollo económico y social”.

También recibió el Premio Internacional de Catalunya en 2010, momento en el que visitó España para recibir el galardón y participar asimismo de la inauguración de la Iglesia Unida de Terrassa (Barcelona). En el breve mensaje que compartió en aquel acto, Carter citó la segunda carta del apóstol Pablo a los Corintios, capítulo 4 y versículo 18, afirmando que “las cosas que no se ven son las más importantes, puesto que son eternas”. Enfatizó la necesidad de recordar valores como “la paz, la igualdad, la humildad, la compasión y el amor, cosas que no se ven, pero que son las que más importan en la vida”.

A los Carter les sobreviven cuatro hijos: John William, James Earl, Donnel Jeffrey y Amy Lynn. También les sobreviven más de 20 nietos y bisnietos.