“A todos aquellos que llevan años rogándole al Señor que nos avive”.

Un día como el de hoy es muy especial en Cataluña, y realmente; aunque el origen y lo que llega a ser hoy en día, es un compendio de varias cosas..... El Día del Libro, aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y Garcilaso de la Vega, es una jornada simbólica para la literatura mundial o “San Valentín catalán”, y también “Sant Jordi” cualquiera que sea su denominación, no hay duda de que el 23 de abril es un día especial. Y la preciosa costumbre del... “Yo te doy un libro y tú me das una rosa” me parece deliciosa y no me rasgo las vestiduras por ello, además de todo el despliegue de libros, libreros y muchísimo más que me encanta.

Y lo que son las cosas, o quizá debería de escribir... Los perfectos renglones de Dios, han hecho que por diferentes razones me haya llegado junto a otras preciosas cosas, un libro del que yo ni me acordaba, ni de que había escrito en él; me estoy refiriendo al que me sigue pareciendo un precioso libro coordinado por Juan Gili y Pedro Gelabert. Es de la primavera del 2003... ¡Ya ha llovido! Y me sigue pareciendo que tiene una portada espectacular, me encanta que me hayan pedido escribir en él junto a diferentes hermanos y hermanas prácticamente en un número igual. ¡Adelantados a su tiempo! ¿No es cierto? pero es que nos estamos refiriendo a dos siervos de Dios muy especiales ¡Juan Gili, hoy con el Señor y Pedro Gelabert!

El tema del avivamiento es una preocupación constante y recurrente para nosotros los cristianos y estoy cansada de escuchar que si España es la tumba de los predicadores, que el Evangelio no prende demasiado por culpa de esto o de lo otro y son muchos los que se olvidan de verdades profundas que se tocan en distintos lugares de este libro y por diferentes personas que coincidimos en ello, y sobre todo nos olvidamos del poder del Espíritu Santo. Han pasado muchos años, pero lo que es yo, sigo pensando lo mismo; aunque obviamente añadiría algunos puntos de vista más, debido al paso del tiempo.

El prólogo está escrito por Juan Gili y el Epílogo por Pedro Gelabert, y antes de citar a todos los que hemos escrito, un capítulo al principio y otro como en respuesta al final, me gustaría resaltar algo muy bonito, una breve semblanza del conocido himno “Avívanos Señor” con partitura musical incluida antes de un excelente capítulo escrito por Bernard Coster titulado, La carga por el avivamiento.

Las personas a las que nos pidieron colaboración fuimos: y lo cito por el orden puesto...

Federico Aparisi, Enric Capó, Jaime Fernández, Félix Fontanet, Beatriz Garrido, Daniel González José Grau, Ana María Huck de Vangioni, Carlos López, Samuel Pérez Millos, Cesca Planagumá, Esther Rodriguez, Clara Rosique, Carmen Sanchez, Joana Vázquez de Velázquez.

Conservó con un cariño muy especial este libro dedicado y firmado por Juan Gili y Pedro Gelabert y... Aisssssss ... se me empañan los ojos.

La mayoría de nosotros coincidimos en varias cosas, la falta de intimidad y celo por y con el Señor, la falta de sed por él, tiempo a solas con nuestro Dios para poder recibir y luego dar..... Pero permitid que os transcriba literalmente algo de lo que lo que está escrito en la contraportada del libro.

Avívanos, Señor

¿En qué medida los evangélicos en nuestro país tenemos sed de Dios?

¿Nos falta más amor, más celo, y más fe en el cumplimiento de nuestra misión evangelizadora?

Vertebrado sobre el himno Avívanos, Señor, este libro tiene una sola finalidad: despertar el interés de los creyentes de prepararse espiritualmente y pedirle a Dios que nos envíe un avivamiento espiritual.

En aquel año ninguno soñábamos con los fantásticos medios que el Señor pone hoy a nuestra disposición para llevar la Palabra al mundo, ni con una pandemia que casi arrasa con todo. Pero cuando Dios llama a un hombre o una mujer para sí y para servirle, lo marca a fuego con una sed indescriptible de su persona, después viene todo el resto.

He intentado encontrar en la web puesta en el libro y me dice que no está disponible, pero si alguno tiene interés en él puede ponerse en contacto con el actual, realmente hace años, Director de Evangelismo en Acción, Benjamín Martín Martínez

No puedo despedirme sin dejar la letra de este viejo y precioso himno deseando que sea de bendición para cada uno de vosotros:

Avívanos, Señor.

Sintamos el poder

Del Santo Espíritu de Dios

En todo nuestro ser.

Avívanos , Señor.

Tenemos sed de ti:

Las lluvias de tu bendición

derrama hoy aquí.

Avívanos, Señor.

Despierta más amor,

Más celo y fe en tu pueblo aquí

En bien del pecador.

Avívanos, Señor,

Con nueva bendición:

Inflama el fuego de tu amor

En cada corazón.