“El feminismo no puede, ni debe, amparar los disparates de la ley trans”
Vientres de alquiler, prostitución, ley trans y otros asuntos se tratan en esta entrevista a Lidia Falcón, figura clave del feminismo en España.
MADRID · 14 DE DICIEMBRE DE 2021 · 09:00
El debate social sobre la ley trans dentro del feminismo ha permitido singulares puntos de contacto, entre ellos el que se está produciendo entre el feminismo clásico en España y movimientos protestantes como la plataforma Seneca Falls.
Lidia Falcón invitó hace unos meses a Asun Quintana, presidenta de Seneca Falls y del grupo de trabajo de Mujer y Sociedad de la Alianza Evangélica Española, a un coloquio sobre la ley trans y los problemas que esta ley plantea al desdibujar la diferencia de sexo, con consecuencias graves sobre todo para mujeres y niños.
Falcón concedió una entrevista a Protestante Digital en la que repasó aspectos de la actualidad relacionados con el feminismo y la política, pero también desveló historias personales, como los lazos familiares que tiene con el protestantismo, así como algunas hondas experiencias personales.
Ley trans, abolicionismo y vientres de alquiler
Lidia Falcón, considerada un referente de la lucha por los derechos de las mujeres en España -por lo que incluso llegó a ser encarcelada durante el régimen de Franco-, expresa en la entrevista su decepción por el rumbo político de los partidos de izquierda que han desdibujado las reivindicaciones del feminismo.
Como ejemplo, Falcón apuntó a la falta de voluntad por parte del PSOE a llevar adelante la abolición de la prostitución. La promesa de Sánchez no es más que “un intento” que no llevará a nada, porque “no cuenta con el apoyo de sus socios en este ámbito”.
Pero más preocupación mostró al apuntar a la ley trans. “El lobby trans está haciendo una campaña soterrada, con el apoyo de grandes corporaciones económicas, introduciéndose en diversos espacios de poder. Su avance nos ha dejado desconcertadas”, expresa Falcón.
A pesar de que la ley viene con el aval de los partidos de izquierdas, para Lidia Falcón “eso no es feminismo, porque aunque el feminismo tenga en sus diversas vertientes algunas diferencias, ninguna va en contra de la libertad y la dignidad de las mujeres”.
Otro asunto en el que mostró su contundente oposición es en la pretendida regulación de los vientres de alquiler. “Es una acción de explotación”, bajo la que “está creciendo un comercio infame”, denuncia Falcón.
Su posición hacia la fe
En la entrevista, Falcón se define como atea, aunque expresó su cercanía con el protestantismo por su importancia en el origen del movimiento feminista y también por los lazos familiares. Incluso cuenta cómo cuando estaba en la cárcel, una de sus tías protestantes la visitó, algo que recuerda todavía con agradecimiento.
Falcón expuso su decepción con la jerarquía católica, ante la que considera que la sociedad tiene “un sentimiento de desconfianza por lo mal que se han portado durante siglos”, y teme el avance en Europa de un islam que “somete a la mujer”.
Movimiento político
Falcón está convencida de que la acción social y de influencia a pie de calle no es suficiente para cambiar las cosas, por eso sigue militando en política a través del Partido Feminista. “Los movimientos sociales, cualquiera que fuere, se nos permite espacios de reunión o manifestación, la libertad de expresión, pero luego no se nos deja ir a más”, comenta.
También dijo que mantiene la “esperanza” de que la situación social pueda cambiar, a pesar de la fuerte oposición mediática y política que se pueden encontrar en la actualidad. Para ello, considera fundamental que la sociedad aprenda a no dejarse engañar, tema del que ha escrito abundantemente en su último libro, “La filosofía del engaño”.
“Es un llamamiento a las clases trabajadoras, a las mujeres, para que no se dejen engañar, porque entonces sí que no habrá salida. Debemos tener la lucidez suficiente para identificar dónde está la verdad y dónde el engaño”, concluye Falcón.
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