“Lo asombroso del libro de Job”, por Juan E. Hofkamp

Un libro para ser leído y estudiado ahora y en el próximo siglo.

16 DE NOVIEMBRE DE 2023 · 18:00

Imagen promocional del libro.,
Imagen promocional del libro.

He logrado reunir en mi casa una biblioteca compuesta por 6.000 volúmenes. Entre ellos, comentarios a todos los libros de la Biblia. Unos once sobre el libro de Job, escritos por autores españoles, ingleses y norteamericanos. Pues bien: el que estoy comentando es uno de los mejores que he leído, junto al escrito por mi llorado amigo José María Martínez.

Este es un libro de gran calado histórico, con abundante documentación; un libro analítico, espiritual, profundo.

Unas líneas sobre el autor. Juan Enrique Hofkamp nació el 7 de enero de 1927 en la localidad de Quilmes, Buenos Aires. Desnació el 14 de julio de 2016 en la ciudad de Mendoza. Tenía 17 años cuando se entregó a Cristo.

En 1947 contrajo matrimonio con Lidia Martínez, de confesión evangélica. En 1954 el matrimonio decidió liquidar pequeñas empresas que tenía y ambos se consagraron a predicar las noticias de salvación, dedicando sus vidas a pleno tiempo a esta gloriosa tarea. Su hijo Walter escribe:“Mi padre, con su fuerza de voluntad, sus ojos puestos en Dios y su gran sabiduría, fue abriendo puntos de testimonio en distintos lugares. Estableció iglesias en Rodeo de la Cruz, Reducción, Colonia Bombal, en el gran Mendoza, en el barrio Santa Elvira, entre otros lugares”.

Para Juan Enrique Hofkamp el libro de Job es un libro asombroso, en primer lugar, por su estructura biográfica. Cuida mucho de dejar clara la realidad del personaje desde el primer capítulo del mismo al escribir sobre Un hombre y su pasado“Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job”. (Job 1:1).

En brillantes capítulos que siguen, Hofkamp escribe sobre asuntos trascendentales en la vida de Job. Lo hace con precisión, con frases tan digeribles como el pan y el agua. Hofkamp escribe en esos capítulos con claridad, ingenio y cortesía, ajustándose siempre a la verdad de la Biblia. Lo hace sobre la justificación de Job, su rectitud, su entrega a Dios, sobre el odio de Satanás, sobre la complacencia de Dios, cuando en una misteriosa conversación con el diablo le dice que no hay otro como él sobre la tierra, varón perfecto y recto (Job 2:3).

Para Hofkamp, “Dios se complace en la fidelidad y la integridad de sus hijos. Nada agrada tanto a Dios que la obediencia que proviene de la fe”.

Ha quedado escrito que para Juan Enrique Hofkamp el libro de Job asombra por su estructura biográfica. También es un libro asombroso por su contenido doctrinal y por lo que dice de los amigos o supuestos amigos de Job. A ellos dedica la segunda parte de la obra.

Hofkamp escribe sobre los amigos de Job en su vertiente psicológica. En actitudes que nada tienen que ver con la verdadera amistad.

En ese trabajo el autor argentino traza párrafos inmortales. Para él, los llamados amigos de Job, “aunque eran hombres maduros, poseedores de amplios conocimientos teológicos, profunda experiencia y sabiduría, carecían de la revelación que tenemos a través del Evangelio”.

Dice Hofkamp que uno de los tres interlocutores de Job, Elifaz, “no refleja la realidad de la situación de Job…. Sus palabras carecen de la dulzura consoladora que pretendía. Aplica a Job el mismo relato de infortunio que los impíos…. Su mentalidad estrecha, aferrada a la legalidad, le impide entender a un Dios soberano”. (Páginas 141, 199, 227).

Al tratar del segundo de los llamados amigos de Job, Bildad, Hofkamp observa que éste se caracteriza “por sus durezas en los juicios, lo que lo hace terminante y dogmático en sus argumentos. Acusa a Job de ocultar algún pecado grave. Llega a decir que Job está preparando trampas en las que él mismo se enredará y caerá. Plantea a Job cinco preguntas y afirma que si Job las hubiera tomado en cuenta no habría caído en su propia trampa”. (Páginas 165, 209, 237).

En el análisis del tercer supuesto amigo de Job, Zofar, Hofkamp afirma que “su doctrina se identifica con la de Elifaz y Bildad. Reprende duramente a Job y lo tacha de parlanchín. Muchas de sus expresiones son verdaderos desprecios contra la majestad, santidad y gloria de Dios. Considera que Job cayó de su grandeza y que su felicidad era propia de un malvado”. (Páginas 175 y 220).

Al final de la historia Dios reprende a los tres malos amigos y “justifica a Job elevándolo por encima de sus amigos y contrastándolo con ellos”. (Página 309).

Tal como escribí al iniciar este artículo, confirmo lo que dije sobre la grandeza de Lo asombroso del libro de Job, escrito por Juan Enrique Hofkamp. Se trata de un libro que debería estar en los lugares más altos en las bibliotecas de las casas. Un libro para ser leído y estudiado ahora y en el próximo siglo. Si un libro es el reflejo de la vida, como se ha dicho, en este de Hofkamp no hay más que descorrer los visillos de la ventanaLo asombroso del libro de Job, en palabras de Rubén Darío:

Es fuerza y valor,

es poder, es alimento,

antorcha del pensamiento

y manantial de amor.

Mis felicitaciones al autor, quien vive al otro lado de las nubes, extendidas a sus hijos y nietos, en este lado de la tierra.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - El punto en la palabra - “Lo asombroso del libro de Job”, por Juan E. Hofkamp