Nuestro escudo
El Señor Jesús es el autor y consumador de nuestra fe. Eso significa que está con nosotros no sólo en el momento en el que le recibimos en nuestra vida, sino también en el día a día.
13 DE MARZO DE 2023 · 09:00

El famoso actor Denzel Washington pronunció el discurso de apertura en la fiesta anual de "We Care", una conocida ONG de una iglesia evangélica, en el que habló claramente de su fe cristiana y destacó la importancia de educar a los hijos “en el temor del Señor”. Denzel Washington, es uno de los cristianos más influyentes en Hollywood debido a a su fe en Jesús. “Todo lo que pienses que ves de bueno en mí y todo lo que pienses que he logrado es por la gracia de Dios, entended bien eso. Es un regalo", dijo. "Mi padre, Denzel Washington Sr. fue pastor de la Iglesia de Dios en Cristo durante 60 años; Yo sé que él está sonriendo en el cielo, viendo a su hijo hacer lo que puede, por la gracia de Dios”.
Pablo nos enseña que la fe es nuestro escudo (Efesios 6:16) Con ella podemos apagar los dardos del maligno. Nuestro enemigo nos ataca de muchas más formas de lo que podamos imaginar: dudas, desconfianza, intranquilidad, nerviosismo, stress, ansiedad, cansancio, miedo, burlas de los que nos rodean… La lista puede parecer interminable, pero nuestra defensa es siempre la misma: nuestra fe en la palabra de Dios. “El Señor es bueno con los que en El confían, con los que a El recurren. Es mejor esperar en silencio a que el Señor nos ayude”(Lamentaciones 3:25-26).
El Señor Jesús es el autor y consumador de nuestra fe (Hebreos 12:2). Eso significa que está con nosotros no sólo en el momento en el que le recibimos en nuestra vida, sino también en el día a día, porque es capaz de “pasar por alto” nuestras traiciones y nuestras debilidades, y siempre quiere restaurarnos. Sabe que el precio del perdón es muy alto, pero no le importa pagarlo porque desprecia una y otra vez las consecuencias lógicas de nuestra culpabilidad y sale a buscar a quién se ha perdido. Lo "abandona" todo para salir a buscar a quién está lejos. Hace una fiesta cuando volvemos a Él, y no deja de abrazarnos para que sepamos que nuestra traición está olvidada.
El honor de Dios se demuestra en seguir amando y mantener su Palabra, aún cuando muchos le desprecien, a Él y a sus promesas. De eso se trata su gracia.
Esa es la razón por la que nuestro escudo es la confianza en esa gracia. Vivimos por fe desde el primer momento en el que nos encontramos con el Señor, hasta el día en el que lleguemos a nuestro hogar definitivo y eterno. Vivimos por fe día a día porque Dios nos guía en cada momento, todo depende de Él, y no de nuestras fuerzas. No nos importa lo que haga el enemigo, no tenemos miedo de sus “dardos” ni de sus ataques, el escudo de la fe nos cubre por completo.
Dios es siempre bueno con nosotros ¡Hemos aprendido a descansar en Él y a no preocuparnos por nada!
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Con otro ritmo - Nuestro escudo