La teología no es lo mío

Tu llamado es conocer a Dios, a pesar de lo que hagas. El estudio teológico es en esencia la manifestación de ser cristiano.

Colombia · 01 DE FEBRERO DE 2017 · 21:48

Foto: Aaron Burden (unsplash.com),
Foto: Aaron Burden (unsplash.com)

Recuerdo que antes de entrar al seminario para realizar mis estudios teológicos, mis amigos, vecinos y,sobre todo, mis hermanos de la iglesia me interrogaban sobre el tipo de estudios a realizar. Además de responder que estudiaría teología, me tocaba explicar sobre la productividad y el significado de la teología (a pesar de mi poca exactitud) así como un as bajo la manga.

Antes de darles la explicación me decían: “¡Vaya! ¡Vas a ser cura!” o “¡Vas a ser pastor!”. Otros decían: “¿Qué dijiste?” Y “¿Geología?”. A partir de esas expresiones sacaba el as de mi manga.

Nuestro primer mito implica un llamado o una vocación. Evidentemente, al decir “la teología no es para mí” manifestamos un rechazo a dicha ciencia o ejercicio (aunque no es un asunto meramente académico). Ahora déjame aclarar algo. Muchas personas tienen en su mente una verdad a medias de lo que es la teología; y en muchos casos no saben de qué trata en absoluto.

En primer lugar, como el origen de la palabra lo manifiesta, la teología es el estudio o tratado acerca de Dios. Considerando ésta básica definición aseveraría que cada cristiano debería conocer a Dios o estudiar acerca de Dios. Dado que el cristiano debe amar a Dios sobre todas las cosas, debemos conocerle primero. Difícilmente apreciaríamos a alguien si nada o poco conocemos sobre esa persona. ¿Cierto?

J.I. Packer en su libro “El conocimiento de Dios ” lo expresó hermosamente de esta manera:

“La ciencia más elevada, la especulación más encumbrada, la filosofía más vigorosa, que puedan jamás ocupar la atención de un hijo de Dios, es el nombre, la naturaleza, la persona, la obra, los hechos y la existencia de ese gran Dios a quien llama padre.”

Así que, si tienes un don para el canto, si trabajas, estudias o cualquier cosa que hagas, no debe ir separado de tu vocación divina que transciende el tiempo y el espacio, pero que a la vez se proyecta en nuestras acciones naturales. Tu llamado es a conocer a Dios, a pesar de lo que hagas. El estudio teológico es en esencia manifestación de ser cristiano. ¡La teología es lo tuyo!

 

Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado. (RVR1960)

 

Luis Carlos Movilla Puccini – Ldo. Teología – Barranquilla (Colombia)

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