“Nunca ha sido tan barata la esclavitud”

Desde que en 1999, la ONU designara el día 25 de noviembre como Día Mundial contra la Violencia hacía la Mujer, son muchos los que se unen en estos días para reivindicar la dignidad de la mujer, ante unos abusos que continúan siendo una triste realidad en nuestro mundo.

Como viene siendo habitual en los últimos años, las Consejerías de la Mujer y de Juventud del Consejo Evangélico de Madrid (CEM), no quisieron pasar la oportunidad de alzar su voz ante este problema, y el pasado sábado organizaron un acto en Madrid,con el patrocinio de la Comunidad de Madrid, y el apoyo de Diaconía España y su campaña #rompelacadena, al que acudieron numerosas organizaciones que trabajan a favor de los derechos de la mujer.

TENER A JESÚS COMO REFERENTE

El acto estuvo presentado por la Consejera de la mujer del CEM, Asun Quintana, quien señaló la importancia de recordar que “Dios no margina, aunque muchas religiones sí” y de tener a Jesús como referente, ya que “en contra de las tradiciones de la época, fue amigo, sanador y maestro de las mujeres, devolviéndolas su dignidad perdida”. Además, reivindicó la responsabilidad que como cristianos e iglesia local tenemos de luchar contra un tipo de violencia que “solo existe por el hecho de ser mujer”, y llevar un mensaje de esperanza a las víctimas.

Quintana recordó que en la historia protestante tenemos muchos referentes que abrieron el camino: “ Matin Luther King, contra el racismo,William Wilberforce, abolicionista, o la declaración de Séneca Falls, el primer manifiesto en pro de los derechos de la mujer, que se firmó en una capilla protestante de Nueva York”.

El mundo de la política también estuvo presente en el acto, de la mano de la Beatriz Elorriaga, diputada del Partido Popular en la Asamblea de Madrid, senadora y Secreta Ejecutiva de Acción Social del PP en Madrid .

La diputada popular, hizo hincapié en la necesidad de la sensibilización ante una lacra tan presente en nuestra sociedad, así como la participación de toda la sociedad civil, porque “a día de hoy existe una esclavitud moderna que hay que erradicar, y es responsabilidad de todos” .

Tras estas primeras intervenciones, un grupo de tres actrices, dirigidas por Alicia Mendo, escenificaron una poesía de Jeny del Pilar Londoño. Sobre el escenario,cada una de las tres mujeres, representaban muchas de las diferentes formas de maltrato que, a lo largo de los siglos, han sufrido y siguen sufriendo las mujeres, por el mero hecho de serlo, sin importar su condición social, su edad, u origen.

MUJERES REALES DETRÁS DE LAS CIFRAS

Otra de las ponentes que participó en el acto, fue Mabel Lozano, actriz,directora y documentalista, que lleva muchos años involucrada en la lucha contra la trata de mujeres y la esclavitud sexual.

Mabel Lozano reivindicó el arte como una manera de concienciar y denunciar este tipo de problemas, a pesar de que,como ella misma contó, cuando empezó a hacer cortos sobre estos temas “la mayoría de mis amigos pensaban que estaba loca, y se reían de mi”.Aún así,ella sigue alzando su voz a través de sus películas, porque “por encima de las cifras, que son escalofriantes, están Leika, Yani, y muchas mujeres reales más, con nombres, apellidos, y una historia que necesita ser contada”.

Dos de sus cortos pudieron verse en el acto de sábado: “Escuchame”, que trata el problema de la esclavitud sexual desde el punto de vista de quienes pagan por consumir prostitución,un gran problema en nuestro país, porque “nunca ha sido tan barata la esclavitud como ahora”; y ”Naciente”, un corto que pretende sensibilizar a las nuevas generaciones del peligro del maltrato, ya que cada año son más jóvenes las víctimas,y, como denunciaba Lozano: “entre nuestras adolescentes cada vez se tolera más el maltrato, y lo excusan porque consideran que si las controlan, es porque las quieren”.

YA NO PODRÁS DECIR QUE NO LO SABÍAS

El broche final del acto, lo puso el cantautor David Bea, un artista muy comprometido con temas sociales, que ha viajado por todo el mundo para dar voz a todos aquellos que sufren pobreza, abusos o maltrato.

“Es importante pasar a la acción, no quedarnos de brazos cruzados, porque, podemos mirar hacia otro lado, pero ya no podremos decir que no lo sabíamos”, expresó David Bea, citando una frase de William Wilberforce, que da título a una de las canciones que interpretó durante el acto, y cuya vida inspiró la conocida canción “Amazing Grace”, que también cantó David Bea el pasado sábado, para recordar que “la esperanza ante esta gran lacra es posible, Jesús hace posible esa restauración, y es un privilegio para nosotros poder aportar nuestro granito, nuestra olla o nuestro camión de arena, cada uno lo que pueda”.