“Dispuestos y convencidos” del poder del evangelio

El encuentro anual que la Alianza Evangélica Española celebró en Sevilla este pasado fin de semana, Idea 2016, comenzó con la ponencia de Jaime Memory, misionero durante quince años en Córdoba y profesor del Redcliffe College en Reino Unido.

El conferenciante internacional mostró su conocimiento de la situación en Europa, analizando la realidad apoyado en estadísticas y cifras muy elocuentes, que mostraban los distintos retos que afronta España, los cuales son compartidos por muchos otros países de su entorno.

“Crisis” fue una de las palabras destacadas, ante la que se planteó entenderla como “oportunidad”, indicando que el papel de la iglesia nunca puede ser escapar de la realidad. Por ello, Memory insistió en que la iglesia, en la situación actual, puede -y debe- aprovechar las oportunidades que la sociedad presenta como colectivo humano organizado, y ante el que la Biblia ofrece respuesta en el evangelio de Jesús.

UNA ESPAÑA DISTINTA

“La sociedad española -decía Memory- ha cambiado mucho en los últimos cuarenta años. Hay un contexto diferente” y por eso la iglesia debe “reflexionar sobre cómo comunicar y encarnar el evangelio para los españoles de hoy”.

“Tenemos que ser capaces de pensar como misioneros enviados a nuestra propia cultura y sociedad”, postuló Memory, animando a los presentes a comprender que Dios envía a cada cristiano en su contexto particular a “ser luz” y “ser levadura para leudar la masa”, una idea que se expresó durante el resto de las jornadas por los ponentes y participantes.

CONOCIENDO LA CRISIS

Ese análisis de la realidad se presentó en cinco aspectos que, según el ponente, muestran situaciones críticas, y que se pueden aplicar tanto a una realidad global como a una situación particular -por ejemplo, en un barrio o una ciudad en la que esté la iglesia-. Es “un juego de lentes para ver la sociedad y las oportunidades que existen para el evangelio”, indicó Memory.

En primer lugar Jaime Memory trató el aspecto económico, reconociendo que estamos en “una situación precaria”, con un grave problema de paro y el estancamiento de la economía, que hace prever una prolongación en el tiempo de los problemas actuales.

En cuanto a la política, la “crisis” se puede apreciar en el rechazo a los proyectos de unión política y económica (UE) y el resurgimiento de los discursos extremistas. “La izquierda radical culpa de los males a Europa”, advirtió Memory, mientras que la extrema derecha, “los movimientos xenófobos”, aprovechan la crisis de refugiados para criticar asimismo la respuesta de una Europa que parece caer en la fragmentación, tras 50 años en el camino hacia la unión.

“En España, la credibilidad política es un problema común. La historia política de España se ve marcada por la corrupción”, comentó Memory, destacando también el problema de la independencia de Cataluña como situación política “sin resolver”.

EL RETO SOCIAL MIGRATORIO Y DEMOGRÁFICO

En cuanto a la crisis social, Memory reconoció la situación de dificultad que ha generado la llegada masiva de refugiados en los últimos meses. Comentando los aspectos migratorios, también hizo énfasis en el gran número de población joven que está saliendo de España ante la escasez de oportunidades laborales. “España está echando fuera a su generación más preparada”, apuntó.

Un problema que se desarrollará a medio plazo es el “de la natalidad:nuestro poco entusiasmo como europeos a tener niños está muy por debajo del relevo necesario de dos hijos por mujer. Los efectos serán catastróficos”, dijo Memory. En España, que “encabeza el retraso de la maternidad” esta situación “no tardará” en mostrar sus consecuencias, advirtió.

Tras mencionar los desafíos medioambientales que están generando situaciones de precariedad y desigualdad, Memory se centró finalmente en la “crisis espiritual”. “Hay dos amenazas evidentes: el secularismo y el avance del Islam”, indicó, aunque “otra crisis espiritual menos evidente pero más importante es la ideología del consumismo”.

“Consumo, luego existo”, es el “lema de nuestra sociedad. Si volvemos al crecimiento económico, volveríamos al progreso”, creen muchos, indicó Memory. Así “el crecimiento económico es la esperanza escatológica para el futuro”. La filosofía de la mayoría de la población española es que “todo estará bien si puedo salir y comprar lo que quiero, como quiero y cuando quiero”, consideraba el ponente.

OPORTUNIDADES PARA LA IGLESIA

La situación crítica presenta, sin embargo, muchas oportunidades para el evangelio. “Europa está en crisis, España está en crisis. Eso abre a las personas al evangelio. Hay muchas oportunidades para la misión”, añadió Memory.

Sobre la situación económica, “muchas iglesias pueden expresar el amor a través de la obra social. Muchos bancos de alimentos se han abierto. Otros ayudan con cursos de economía familiar y otros recursos”, explicó.

La situación política presenta también oportunidades. “En tiempos de corrupción, los evangélicos deben preguntarse ¿no será por la ausencia de personas de fe que hemos acabado en esta situación?”. Memory contó la historia de un político en Alemania, teniente alcalde de su localidad, que le contaba que entró en política “para ser sal y luz, para establecer la vida cristiana en medio de la política (...) para tener una ciudad bajo la influencia de Dios de forma que toda la sociedad se influya”. “Ojalá -añadió Memory- tuviéramos más políticos cristianos con esta visión. Pero no los tendremos si no animamos a los creyentes a meterse en este mundo”.

La oportunidad social “es inmensa”, compartió el ponente. “En España hay muchas iglesias étnicas. Es un gran desafío la integración de inmigrantes y nacionales. Tienen cosas que enseñarnos. Nos necesitan y los necesitamos. Es una oportunidad para el evangelio”.

Aún la emigración de jóvenes puede ser vista “como una forma de bendición, ya que todos estos jóvenes cristianos que se han marchado pueden ser luz y servir para los propósitos de Dios donde se encuentren. Muchos misioneros “no oficiales” se han ido. Es parte de la misión de Dios en nuestros tiempos. Dios usa la inmigración y la emigración”.

La llegada de refugiados, “millones de musulmanes, ¿son un peligro o una oportunidad?”, preguntó Memory. “Muchos huyen del islam, vienen buscando esperanza. Dios podría tener un plan para estas personas”, respondió.

Sobre la baja natalidad, Memory expresó que “la cosa más misional es criar hijos. Esta crisis demográfica es una oportunidad para el evangelio” dado que “los jóvenes pueden mostrar que en el reino se valora la familia por encima de la carrera, las cosas o la comodidad”.

Las oportunidades “medioambientales se dan siendo buenos mayordomos en nuestro entorno. En este campo podemos colaborar con otros -ONG, entidades, Ayuntamientos...- que se preocupan por este asunto”.

LA SITUACIÓN ESPIRITUAL Y EL EVANGELIO

Finalmente Memory destacó las oportunidades espirituales. “Entre los políticos se habla del progreso... Pero la vuelta de la esclavitud (sexual), el aborto de bebés, el culto al cuerpo, la diferencia entre ricos y pobres... No estamos progresando, estamos volviendo al paganismo grecorromano”.

“Esta fue la situación cuando el evangelio llegó a Europa. Este continente fue el primero en cristianizarse, el primero en descristianizarse, y puede ser el primero en recristianizarse”, comentó Memory.

“El evangelio fue, es y siempre será la única esperanza para Europa. Necesita una iglesia dispuesta, abierta a la transformación. Una iglesia misional, que entiende la misión como su sistema operativo, lo que controla su vida” lo que “requiere que recuperemos nuestra confianza en el evangelio como la única esperanza para Europa y un fuerte compromiso con nuestra sociedad”.

Porque en definitiva para la iglesia el punto de vista sobre cualquier situación viene marcado por su esperanza eterna, concluyó Jaime Memory. “Lo que controla nuestro punto de vista no es como van las cosas, sino la resurrección de Jesús de entre los muertos. Este es el punto de inflexión en medio de la crisis, saber que Dios tiene un plan. Sea persecución o prosperidad, el futuro nuestro está asegurado. Cómo ocurre y cuándo ocurre... está en manos de Dios. Pero si nos mantenemos lejos de la sociedad, Dios no puede hacer su obra de transformación. Esta es la visión del reino”.