Obedecer al que gobierna
“Cuando una ley es injusta lo correcto es desobedecer” - Mahatma Gandhi. Por medio de la ‘no violencia’ sentó las bases para independizar la India del Imperio Británico. ¿Hizo bien?
11 DE NOVIEMBRE DE 2017 · 21:50
Por lo que ocurre cerca y lejos del lugar que habitamos, los que nos consideramos miembros de la iglesia de Dios que edifica Jesucristo (01) a menudo vemos desafiado, y aún destruido, el orden que creemos correcto para nuestra vida terrenal (02).
La globalización que siguió al fin de la Guerra Fría condujo a la Era de la Posverdad; esta sostiene que no importa aquello en lo que creas si te sientes bien con hacerlo. Conviene repasar la obra de quienes no participaron de los males citados para no caer en ellos. Martin Luther King (03), pastor evangélico bautista en EE.UU y mentor del movimiento por la igualdad de derechos para los ciudadanos afroamericanos se definió en el mismo sentido usado por Gandhi (04). También Nelson Mandela (05), primer mandatario de raza negra en la historia moderna, gobernó para desmontar la odiosa estructura social y política heredada del ‘apartheid’ (06) combatiendo el racismo institucionalizado, la pobreza y la desigualdad social, y la promoción de la reconciliación social. Otros líderes políticos y sociales obstruyen la labor de un gobierno eligiendo otros métodos para hacerse oír: crean el caos usando el desorden público; cortan rutas; arrojan bombas incendiarias y dañan patrimonios públicos y privados.
Con este escrito nos sumamos a quienes analizan a la luz de la Biblia cual deba ser nuestra conducta para actuar como lo que somos: “sal de la tierra y luz del mundo” (07)
Reproduzco del libro “Liberando las Naciones: Principios Bíblicos de Gobierno, Educación, Economía y Política” (08) cuyos autores viven y trabajan en EE.UU. Lo hago reconociendo que esta opinión se apoya firmemente en el contexto político, social y económico norteamericano. Respecto de ‘gobierno’ dicen los escritores:
“En el Antiguo Régimen se empleaba la expresión buen gobierno; por ejemplo, en los Decretos de Nueva Planta y Buen Gobierno que reformaron la Monarquía Hispánica bajo Felipe V. Tenía su ‘contrafigura’ en la expresión mal gobierno, del que nunca podría acusarse al rey absoluto, sino a sus ministros (incluso en una revuelta, como el motín de Esquilache (09), la expresión utilizada era ¡Viva el rey y muera el mal gobierno!, similar al grito de Dolores del cura Hidalgo en la independencia mexicana). El despotismo ilustrado en buena parte buscaba su propia legitimación en las reformas que mejoraran la situación del pueblo, pero sin comprometer la primacía teórica de la legitimidad de derecho divino clásica del absolutismo.
En un sistema de gobierno democrático, la legitimidad proporcionada al gobierno por las urnas, de un modo parecido se busca renovar constantemente con la ‘buena calidad’ de su ejercicio o gobernanza, medida por los modernos métodos de la demoscopia (10).
La crítica al concepto de gobernanza desde un punto de vista antiglobalización suele asociarlo a lo que se conoce como pensamiento único, confusamente denominado ‘neoliberal’, vinculado a las propuestas de política económica para países del Tercer Mundo o en vías de desarrollo del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
La perspectiva desde la que se utiliza el término gobernancia desde estas instituciones (o desde los medios académicos o empresariales) no se restringe a una posición puramente tecnócrata, sino que asume un cierto grado de enjuiciamiento moral (a veces paternalista) de estados o sistemas políticos y económicos, en cuyo enjuiciamiento suelen utilizar calificativos como ‘prácticas virtuosas’ o ‘hacer bien o mal los deberes’. No hay que olvidar por otro lado, que como dice el profesor Ángel Iglesias (11) la legitimidad no se consigue sólo con eficacia y eficiencia, sino que es también fundamental el elemento democrático en el que se subsumen la transparencia, la rendición de cuentas o la participación. La eficacia y la eficiencia son valores propios del utilitarismo económico y de la gestión, aunque, situados en un contexto político, quedan totalmente impregnados de la influencia de la dimensión política. Con todo, las organizaciones públicas se ven abocadas a adoptar estrategias de actuación mediante la incorporación de innovaciones en la acción pública. Ciertamente, estas innovaciones, su forma y contenido, dependen de la coordinación del aparato administrativo con otros actores privados y con los ciudadanos. En gran medida la gobernanza consiste sobre todo en la confluencia y difícil equilibrio entre la eficiencia y la participación democrática.
Cuando la gente oye la palabra gobierno, usualmente piensa en el gobierno civil, porque en muchas naciones este es el gobierno. En un sentido general, gobierno significa dirección, regulación, control y restricción. Hay muchas esferas del gobierno, cada una de ellas proveyendo dirección, regulación, control y restricción. Las esferas del gobierno pueden ser divididas en internas y externas. Otro nombre con que se conoce el gobierno interno es autogobierno. Todo gobierno se inicia internamente, en el corazón del hombre, con su habilidad de gobernar su conciencia, voluntad, carácter, pensamientos, ideas, motivos, convicción, actitudes y deseos. De acuerdo a la manera en que el hombre se gobierne internamente, afectará sus acciones externas, su hablar, su conducta, uso de las propiedades, etc. Cada esfera externa del gobierno es un reflejo de la esfera interna. En otras palabras, lo interno es causal de lo externo.
El tipo de gobierno que existe en los hogares, iglesias, escuelas, negocios, asociaciones o en las áreas civiles de un país, es el reflejo del autogobierno dentro de los ciudadanos.
El erudito Holandés del siglo XVII Hugo Grocio (12), quien sistematizó el tema de la Ley de las Naciones, resumió el principio de autogobierno en la siguiente cita: ‘El que no sabe como gobernar un reino, no puede administrar una Provincia; ni tampoco puede gobernar una Provincia, ni puede ordenar una Ciudad; quien no sepa regular una Villa; no puede guiar a una Familia; ni tampoco puede gobernar bien una Familia que no sabe Gobernarse a sí misma; ni tampoco nadie puede Gobernarse a sí mismo a menos que su razón sea Enseñorearse, Disponer y Devorar a sus vasallos; tampoco la Razón puede gobernar a menos que ella misma sea gobernada por Dios y (completamente) obediente a Él.’
La Biblia enseña que los gobernantes deben ser autogobernados. Una cualidad de un líder de la iglesia es ‘que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no saber gobernar su casa ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?)’ (13) Hay actualmente muchos líderes del gobierno civil que están tratando de gobernar su nación, aunque son incapaces de dirigir y controlar efectivamente sus propias vidas. Estos hombres y mujeres deben ser reemplazados por aquellos quienes puedan gobernar sus propias vidas. Los autogobernados son los que tienen verdadero poder; de acuerdo con la Biblia: ‘Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad’. (14)
La afirmación de Grocio revela cómo el fluir del poder en un país ocurrirá de lo interno a lo externo. Él habla de unidades de gobierno descentralizadas administrando menos poder mientras más alejados estén del individuo. Resumiendo sus ideas: El gobierno efectivo principia en un individuo que aprende a gobernarse a sí mismo. Mientras más autogobierno interno posee una persona, necesita menos gobierno externo. Consecuentemente, cuando se requieren más reglas y leyes para mantener a la gente actuando correctamente, es una revelación de una disminución en el nivel de autogobierno. La historia nos enseña que el hombre puede controlarse a sí mismo, pero solo en un grado limitado. Puesto que el autogobierno no puede ser impuesto exteriormente y el hombre es limitado en su autodisciplina personal, debe haber otra fuente de control interno.
Grocio nos revela que el hombre únicamente puede ser realmente autogobernado si su razonamiento, voluntad y deseo están gobernados por Dios. La base del autocontrol es la obediencia al Creador y Sus normas de conducta que se encuentran en la Biblia (15).
Conforme el pueblo de una nación se vuelve menos autogobernado y renuncia al poder, el gobierno civil (especialmente el gobierno nacional) crecerá y crecerá, elaborando más y más leyes (muchas fuera del ámbito de su jurisdicción), gastando más y más dinero. La carencia de autogobierno conduce a un mayor gobierno externo centralizado, lo que resulta en pérdida de la libertad individual. La gente de una nación libre será no solamente autogobernada, sino que también trabajará voluntariamente en unidad con otros para el bien de la nación entera. La mayor parte de la historia nos revela que las uniones civiles fueron el resultado de una centralización vía fuerza política y del poder militar, en lugar del consentimiento voluntario. El Cristianismo proveyó las bases de ‘Comunidad unida, no por ligas externas, sino por la fuerza vital de principios e ideas distintivos.’
El constitucionalismo norteamericano (el cual ha afectado las constituciones de muchas naciones) está basado sobre la idea Bíblica del pacto (16). La Biblia está llena de pactos entre hombre y hombre y entre Dios y el hombre. El pacto que Dios hace con los hombres a través de la obra redentora de Jesucristo es el principio de un cambio interno en el corazón, necesario para la fundación de la libertad en un individuo y en una nación.
Los pactos de matrimonio bíblico mantienen los matrimonios unidos y fuertes. Sin familias fuertes, ninguna nación puede permanecer por largo tiempo. La unión exterior de un pueblo es el resultado de una unidad interior de ideas y principios que residen en los corazones de la gente. La unión obligatoria que es impuesta por la fuerza externa y por el temor, nunca permanecerá. La unión no puede ser forzada exteriormente, sino que debe surgir de la unidad interior.
Para que una nación permanezca unida, debe ser inculcado al pueblo un entendimiento de los fundamentos y del sistema de un gobierno libre. Un pacto o un convenio entre la gente, sobre la base de un nivel local, es la base de la unión política. Para que la gente pueda entrar en pacto o convenios, debe compartir creencias, propósitos, ideas y fe comunes. El unirse para desarrollar propósitos civiles empieza al ponerse de acuerdo para realizar propósitos independientes, tales como trabajos en las casas, iglesias, escuelas, clubes y determinadas organizaciones.
Los fuertes lazos internos dentro de la gente producirán una unión fuerte; un pueblo trabajando junto y en unidad traerá un gran incremento a la fortaleza de un país. La aplicación del principio de unión en los diferentes niveles de gobierno permitirá que estos trabajen juntos por el bien de todos, mientras que el autogobierno en la gente asegurará que de la misma manera, los derechos de los individuos serán mantenidos. Los principios de autogobierno y unión deben ser mantenidos en balance; demasiado énfasis en la unión resultará en centralismo, mientras que demasiado énfasis en autogobierno lleva a la desintegración de la nación.”
Estemos en parte o en todo de acuerdo con el enfoque compartido, a la luz de lo que nos ocurre en España en estos días de enfrentamientos sin diálogo, roguemos al Señor de señores, el Rey de reyes y Soberano de las naciones, para que nos ayude a reconocer el sitio en el que nos ha puesto en su Plan de Redención, la relación que tiene con la misión que nos ha encomendado, y ésta con la sociedad que navega sin rumbo dando la espalda a Dios. Y nos ayude a reflexionar y actuar sabiendo que la Creación toda “será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo.” (17)
-------ooooooo0ooooooo-------
Notas
Ilustración: Impactante foto de un plenario del Parlamento de la Unión Europea. http://www.europarl.europa.eu/meps/img/background/plenary_session.png
01. Mateo 16:18.
02. Reflexión personal sobre el aburguesamiento de los creyentes que se aferran a una tradición materialista..
03. Dr. Martin Luther King (1929 – 1968), Premio Nobel de la Paz 1964, asesinado por su militancia civil.
04. Mohandas Karamchand ‘Mahatma’ Gandhi (1869 – 1948), abogado indio asesinado por su militancia civil.
05. Nelson Mandela (1918 – 2013), abogado sudafricano, Premio Nobel de la Paz 1993, con Frederik De Klerk.
06. ‘Apartheid’ significa ‘separación’, sistema político social impuesto en Sudáfrica y Namibia hasta 1992.
07. Mateo 5:13,14.
08. Autores: Stephen K. McDowell & Mark A. Beliles, Providence Foundation, 2 de agosto, 2002, 215 páginas.
09. Masiva revuelta en Madrid, en marzo de 1766, motivada por la carestía de pan siendo Carlos III rey.
10. Parte de la sociología que estudia las orientaciones y la opinión pública sobre alguna cuestión.
11. Ángel Hermilo Iglesias Alonso, Doctor en Ciencia Política por la Universidad Complutense de Madrid.
12. Hugo Grocio, o Hugo Grotius, o Hugo de Groot (1583 – 1645), jurista, escritor y poeta holandés.
13. 1ª Timoteo 3:4-5.
14. Proverbios 16:32.
15. El cuarto presidente de los Estados Unidos y principal arquitecto de la Constitución de este país, James Madison expresó: ‘Hemos comprometido todo el futuro de la civilización Norteamericana, no sobre el poder del gobierno, lejos de ello, hemos comprometido el futuro de todas nuestras instituciones políticas sobre la capacidad de autogobierno de la humanidad; sobre la capacidad de todos y cada uno de nosotros de autogobernarnos, controlarnos y sustentarnos nosotros mismos de acuerdo a los Diez Mandamientos de Dios.’
16. Los pactos civiles empezaron en Norteamérica en el año de 1620 cuando los Peregrinos Ingleses redactaron el Convenio del Mayflower. Ellos fueron capaces de pactar vivir juntos en una sociedad civil, porque algunos años antes habían convenido reunirse en un estado eclesiástico.
17. Romanos 8:21-23.
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Agentes de cambio - Obedecer al que gobierna