Josué Enfedaque: “Mi héroe no puede ser otro que Jesús”

Hoy estamos con la segunda parte de nuestra serie sobre ‘Predicadores jóvenes en España 2015’. Después de conversar con Moisés Peinado en Córdoba la semana pasada ahora nos encontramos en la isla de Mallorca con otro predicador joven. Se trata de Josué Enfedaque.

Le oí predicar en Barcelona a principios del mes y me bendijo tanto que quise que formara parte de esta nueva serie. Además de llevar seis años enseñando las Escrituras, tiene una gran carga para esta nueva generación de jóvenes.

Aquí tenéis un poco de información sobre nuestro hermano.

Nombre: Josué Enfedaque

Fecha de nacimiento: 26 de enero 1984 (a punto de cumplir 31 años)

Lugar de nacimiento: Mallorca

Estado civil: Casado con Leonor desde el 2008 y es padre de dos hijos

Will Graham (WG): Gracias por estar con nosotros en Brisa fresca hoy. Quiero empezar diciéndote algo muy especial: ¡feliz cumpleaños! Qué cumplas muchos más años en el gozo del Señor. Antes de arrancar con la entrevista, Josué, ¿podrías decirnos algo sobre ti y lo que haces para que los lectores te conozcan mejor?

Josué Enfedaque (JE): ¿Un poco sobre mí? Pues, mi mujer y yo trabajamos con los adolescentes tanto en Mallorca como en Menorca bajo el lema ‘Dios es guay’ (un acróstico que quiere decir: Grande en amor, Único, Alegre Y… ¡mogollón de cosas más!). Además, ambos formamos parte del equipo de Sentido Contrario en Mallorca y de Creo en Ti en Barcelona.

Soy un apasionado de las series, las películas, los libros de fantasía y los comics. Pero mi verdadera pasión es estudiar y leer la Biblia para poder enseñarla de forma relevante, dinámica y divertida. Me encanta leer y sueño con ser escritor (aunque, si Dios quiere, durante este 2015 verá a la luz mi primer libro: “¿PLAY?: si la vida fuera un videojuego… ¿cómo se ganaría?”).

WG: Gracias, Josué. Empecemos, pues, con la primera pregunta. ¿Cómo sabías que Dios te estaba llamando a predicar?

JE: La verdad es que inicialmente no sentí el llamado específico a predicar, sino que el llamado que sentí fue el de servir a los adolescentes. Pero responder a ese llamado me ‘obligó’ a estudiar la Biblia intensamente y, sobretodo, a enseñar cada semana. Fue un reto difícil ya que enseñar a adolescentes fue todo un reto y con el tiempo Dios fue abriéndome puertas para enseñar en otros lugares, reuniones y áreas tanto de mi iglesia local como en otras iglesias.

WG: Qué bien. Y ¿cómo podría un joven saber si Dios le está llamando a predicar?

JE: No tengo una respuesta ‘definitiva’ a esa pregunta. Pero, basándome en mi experiencia personal, mi opinión es que la clave es obedecer a todo lo que Dios nos va pidiendo. Y esa obediencia es la que nos lleva justo al lugar donde Dios nos llama, sea la predicación o sea otro ministerio.

WG: A nivel práctico, ¿cómo sueles preparar un sermón? ¿Qué haces exactamente para producir un mensaje?

JE: Como normal general tengo un devocional diario donde oro y leo al menos un capítulo de la Biblia y escribo lo que Dios me va revelando en un cuaderno que siempre llevo conmigo. Cuando llega el momento de preparar una predicación acudo a ese cuaderno para ver qué tema puede ser el oportuno mientras lo pongo en oración.

Una vez elegido el tema, voy estudiando el texto de dos maneras (siempre en una actitud de oración). Primero, lo leo en varias versiones he intento sacar todas las ideas que puedo por mí mismo sin ayuda de material externo. Segundo, extraigo toda la información que puedo con la ayuda de material extra como libros, comentarios, diccionarios, etc. para intentar ser lo más fiel al texto posible.

Una vez he estudiado el texto preparo la proposición y el bosquejo de la predicación y finalmente la escribo de arriba abajo en mi ordenador ya que me gusta que queden registradas.

WG: ¿Y quiénes son algunos de tus héroes en la fe, Josu?

JE: ¿Héroes? Mi héroe no puede ser otro que Jesús, qué respuesta tan original e inesperada, ¿verdad?

WG: Sí, es nuestro héroe por excelencia. Amén. ¿Tienes algunos más?

Al margen de Jesús, elegir uno también me es muy difícil. Mejor te daré mi top 3 (dos bíblicos y uno que no):

Me encanta Pedro (porque me siento muy identificado con su vida y sus defectos).

Admiro mucho a María (la madre de Jesús). Su obediencia es increíble, porque aunque Jesús era Hijo de Dios, también era su hijo y nunca impidió que su hijo cumpliera su propósito, aunque eso le provocara mucho dolor.

Mi héroe teológico no-bíblico es C.S.Lewis. Su libro “Mero Cristianismo” me fascina, pero por si fuera poco, la saga literaria “Las crónicas de Narnia” me parecen una pasada. Ese hombre si consiguió traducir el evangelio para su generación (y para las que vamos detrás).

WG: Me alegro de que hayas nombrado a C.S. Lewis. Soy de su ciudad (Belfast). Pasé por su casa varias veces el verano pasado. Es un crack. Bueno, siguiente pregunta, ¿en qué consiste, para ti, un buen predicador?

JE: Cualidades importantes hay muchas, pero una cualidad que valoro mucho en un predicador es que sea un fiel traductor del evangelio. Es decir, para mí el buen predicador es el que consigue descubrir esas verdades que Dios nos dejó dentro de la Biblia y las transporta a nuestra realidad, usando el lenguaje de nuestra sociedad, de una manera fiel, relevante y práctica a la vez. Esa es la cualidad de que más valoro de un predicar dentro del pulpito.

Por otro lado, la cualidad que más valoro de un predicador fuera del pulpito es que tenga una vida coherente. Es necesario aclarar que coherente no significa perfecta, pero creo que si las acciones no van de la mano de las palabras la enseñanza pierde fuerza (aunque sea extraordinaria).

WG: ¿Cuáles son algunos de los peligros que un predicador tiene que enfrentar?

JE: En mi opinión, hay varios peligros que los predicadores debemos tener presentes siempre. Por un lado, está el peligro a que lo que digamos sean nuestras propias palabras y no palabra de Dios. Por otro lado, está el peligro a creer que se trata de nosotros, en lugar de reconocer que es Dios el que nos da la capacidad de predicar. Y por último está el peligro de predicar en un tono en el que parezca que la predicación no es para nosotros, cuando en realidad al primero al que Dios habla es nosotros como predicadores.

WG: En tu opinión, ¿cuáles son los grandes desafíos y necesidades del cristianismo contemporáneo?

JE: Vivimos en una sociedad muy exigente con sobredosis de entretenimiento y creo que el predicador tiene la difícil tarea de conseguir usar un lenguaje y unas formas adaptadas a nuestros tiempos para captar la atención del que escucha pero sin perder ni hipotecar el contenido del evangelio.

WG: Y para ir terminando: sabiendo que Protestante Digital está llegando a millones de jóvenes cada mes, ¿qué consejo le darías a un creyente joven en nuestros días?

JE: Pues la verdad es que no se me ocurre un mejor consejo que las palabras de Dios a Josué: «Estudia constantemente este libro de instrucción. Medita en él de día y de noche para asegurarte de obedecer todo lo que allí está escrito. Sólo entonces prosperarás y te irá bien en todo lo que hagas. Mi mandato es: “¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas”» (Josué 1:8-9)

WG: Mil gracias, Josué, son palabras preciosas. Pues nada, todos te deseamos un muy feliz cumpleaños y que sigas bendiciendo las islas de Mallorca y Menorca con tu ministerio de predicación y enseñanza. ¡Ánimo y adelante!

* La semana que viene estaremos conversando con: Andrés Bitar (Madrid)