Mueren 160 personas al colapsarse el techo de una iglesia en Nigeria

El colapso del techo de una iglesia en la ciudad nigeriana de Uyo (estado de Akwa Ibom) ha provocado la muerte de al menos 160 personas.
El accidente se produjo en la iglesia evangélica de Reigners Bible Ministry durante una ceremonia a la que asistieron centenares de personas, entre ellos el gobernador del estado nigeriano de Akwa Ibom.

Una parte del santuario se encontraba en proceso de construcción y se tenía previsto que culminara el 10 de diciembre.

"He podido ver más de 100 cadáveres. Si pudimos salir vivos fue solo por la gracia de Dios", ha dicho al diario Punch una superviviente.

“LA CIFRA DE MUERTOS ES PROBABLE QUE AUMENTE”

Según el director del hospital universitario de Uyo, Etate Peters, donde se encuentran la mayoría de las víctimas “es muy probable que la cifra de muertos siga aumentando”.
El portavoz del gobernador de la provincia de Akwa Ibom, Ekerete Udoh, ha comunicado que las autoridades nigerianas lanzarán una investigación para indagar si las normas de construcción han sido observadas.

EL GOBERNADOR, ENTRE LOS SUPERVIVIENTES

Entre quienes han salido ilesos del derrumbe se encuentra el propio gobernador del estado, que ha declarado en televisión haber supervisado personalmente las labores de rescate y la evacuación de los heridos.

Al menos un ayudante del político y varios dirigentes de su administración han fallecido bajo los escombros, según la prensa nigeriana.

“ORACIÓN Y AYUDA”

El consejo de iglesias pentecostales de Nigeria ha pedido a todas sus congregaciones que “oren por las víctimas y donen medicamentos y dinero para tratar y ayudar a quienes han salido vivos de la tragedia”.
"Los miembros de las iglesias que puedan hacerlo, deben donar también sangre en los hospitales", ha declarado su presidente, Sylvanus Ukafia.

De acuerdo con el portal Sky News, los colapsos de edificios en Nigeria ocurren con regularidad debido a que los contratistas utilizan materiales de baja calidad y sobornan a los inspectores para que estos pasen por alto la ausencia de los permisos correspondientes.