Diputado pide al Gobierno de Oaxaca el fin de la intolerancia religiosa

Un diputado del Congreso estatal de Oaxaca, uno de los Estados con mayor persecución religiosa en México, dijo al gobierno del Estado el pasado 17 de marzo que “ya basta de intolerancia religiosa en Oaxaca”. El diputado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Alejandro López Jarquín, pidió al gobierno estatal que ponga fin a los abusos de autoridad, detenciones arbitrarias, discriminación y violación a la libertad de culto contra personas que profesan creencias o cultos ajenos a la religión católica o a los usos y costumbres. Junto con Hidalgo, Guerrero, Estado de México, Chiapas y Tabasco, Oaxaca es uno de los principales focos rojos de intolerancia religiosa. En diciembre del año pasado, Eliseo López Estrada, teólogo Oaxaquense, dijo que en el estado Mexicano de Oaxaca “nuestra historia predominan fuertes tintes de intolerancia hacia las minorías que los protestantes hemos tenido que lidiar con las visiones conservadoras tradicionalistas (católicas) que van en contra de los que creen diferente”. Para mayor conraste entre teoría y realidad, el pasado 5 de diciembre, México celebró el 150 aniversario de la promulgación de la Ley sobre Libertad de Cultos, aprobada el 4 de diciembre de 1860. CASOS DE INTOLERANCIA RELIGIOSA EN OAXACA En las comunidades de La Palma y Santiago Teotlasco de Ixtlán de Juárez, San Juan Yaá en Villa Alta, Ayutla Mixe y Santa María Yohueche, se han presentado casos de intolerancia religiosa que no han sido resueltos por las autoridades estatales, dijo el diputado. Por esto, López propone al Congreso local un acuerdo para exhortar al titular del Poder Ejecutivo a que acepte las recomendaciones de la Comisión de Derechos Humanos que se dictaron a raíz de los casos de intolerancia religiosa registrados en la Sierra Norte de Oaxaca; y que a través de la secretaría general de Gobierno y la dirección de Asuntos Religiosos se lleven a cabo las encomiendas que dicta la recomendación. SAN ANDRÉS YAÁ López también expresó que en la Sierra Norte se han registrado actos en contra de la libertad religiosa y que hace 6 meses fueron expulsados varios habitantes de la comunidad de San Andrés Yaá por profesar la religión cristiana evangélica. La responsabilidad de lo ocurrido señala al presidente municipal, Daniel Mateo Marcial, quien asumió el cargo hace 2 meses y a fecha de hoy no ha aplicado ninguna acción para solucionar la expulsión de evangélicos, y menos aún para poner fin a la persecución religiosa que siempre ha existido en el municipio, pero que se ha incrementado en las semanas recientes. OIDOS SORDOS A RECOMENDACIONES DE DDHH Además dijo que se ha ignorado la mencionadarecomendación emitida por la Comisión para la Defensa de los Derechos Humanos que detalla la intolerancia que existe en la comunidad, principalmente en contra de los hermanos Imeldo y Claudio Amaya Gabriel, y recordó que el Estado mexicano es laico y los usos y costumbres (católicos) no son pretexto para tales acciones.