Una sola carne serán
El poeta loa el connubio de dos hermanos en la fe cristiana, y mediante sus versos glosa lo que vendrá tras el esposamiento.
24 DE JULIO DE 2015 · 12:04
UNA SOLA CARNE SERÁN
Hermano,
mi voz alumbra la noche para decirte que llenes de amor
los días de esta mujer que hoy besas y que a vivir
caminará contigo para partir el pan y coserte abrigo,
compartiendo el vino del alma que alivia las penas.
Hermana,
varona de este varón, sé que leíste los proverbios
anotados junto a los hermosos salmos de David.
Y porque eres libre de amar, te das con fuerza antigua,
como la extranjera Rut, con vida verdadera y luz de Dios.
Hermano,
varón de esta varona, sé digno en tiempos de ternura
o cuando te entumezca el dolor. Sé bueno de corazón
y hombre pendiente de ella; sé testigo de su felicidad
y sé libre para darle libertad de ser.
Hermana,
tu vida se fundirá en la suya y juntos una sola carne serán,
con el espíritu esposado hasta que lo señale el Señor.
Así la soledad tendrá derrota como milagro del enlace
y de la arcilla renovada para que en lecho terrenal
goce vuestro amor, cual cantar de Salomón.
Hermanos,
en este tiempo hasta las manzanas cuestan sudor.
No se desenamoren si les hinca la espuela de la tribulación
o si sombras de abismo intentan desbautizar vuestro hogar.
Nada puede con el Verbo que los ilumina para que se tengan
por todos los andenes de la vida.
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Barro del Paraíso - Una sola carne serán