Valencia prohibirá presencia oficial de altos cargos en procesiones

El Gobierno de la Generalitat valenciana ultima la reforma de la ley de Transparencia para prohibir a los altos cargos de la Generalitat asistir a actos religiosos y procesiones «corporativamente».

El objetivo de la modificación del título dos de la ley (que regular las normas de buen gobierno del Ejecutivo autonómico) pasa por definir y diferenciar cuál debe ser el comportamiento de los altos cargos a título individual y cuál el funcionamiento de las instituciones.

En esta área religiosa, la reforma legal persigue que los miembros del Gobierno valenciano tengan derecho a acudir a procesiones y ceremonia a título personal (según su ibertad de conciencia) , pero no puedan hacerlo de forma «corporativa», es decir, en representación oficial.

La Conselleria de Transparencia trabaja con los técnicos el encaje legal de estos preceptos, que se incluirían en el título dos de la ley a modo de “protocolo de ética y buen gobierno”.

Con todo, el departamento que dirige Manuel Alcaraz (conseller de la Generalitat por la cuota de Compromís) establecerá excepciones en aquellos actos que trasciendan el ámbito puramente religiosos y gocen de valor histórico o cultural.

Por ejemplo, el Ejecutivo salvará de la prohibición a celebtraciones como el Misteri d’Elx o la Romería de la Santa Faz de Alicante.

Se pretende terminar "con la obligatoriedad de derecho o de hecho en determinadas celebraciones y mantener una relación fluida con las distintas manifestaciones religiosas".