Desafiadas a vivir la presencia de Dios

Con el lema “Llevamos su presencia”, el 30º Congreso Aglow congregó a unas 1.000 mujeres procedentes de diversos lugares de España y el extranjero.

AGLOW · 02 DE FEBRERO DE 2015 · 18:33

La 30ª Conferencia Aglow, en el Hotel Auditorium en Madrid, este 1 de febrero. / M.Gala,aglow
La 30ª Conferencia Aglow, en el Hotel Auditorium en Madrid, este 1 de febrero. / M.Gala

El trigésimo congreso de Aglow España ha reunido este pasado fin de semana en el Hotel Auditorium de Madrid a 1000 mujeres procedentes diferentes lugares de España, Portugal, Suiza, Guinea, Venezuela y Estados Unidos.

Las plenarias estuvieron en esta ocasión a cargo de Cheryl Brodersen, pastora de Calvary Chapel en California; Malú Cardona, misionera mexicana en España; y Ana Giménez, presidenta de Aglow España.

 

Cheryl Brodersen y Ana Giménez. / M.Gala

Cheryl Brodersen, autora de varios libros, recorrió en sus intervenciones el Antiguo y Nuevo testamento despertando anhelo y abriendo los ojos a la realidad de la presencia de Dios: “No invites a Jesús a casa para ignorarle: comienza el día saludándole, continua sirviéndole y vive adorándole.”, dijo.

Por su parte, Malú Cardona subrayó: “a todas nos llega un momento en el que tenemos que decidir si creemos al Dios en quien decimos que creemos”.

 

Presencia internacional en el Congreso. / M.Gala

A cargo de diferentes talleres estuvieron Jaz Jacob, Alejandro Abraham y Raquel Rey, quienes abordaron los temas: “Trabajar, servir y vivir desde un lugar de descanso”; “Misionero en tu lugar de trabajo”; y “el Bautismo en el Espíritu Santo”.

La parte musical estuvo a cargo de un equipo procedente de diversos lugares de la geografía española, con Rosa y Miguel, de Sal 150; Noemí Lorite; y Jaz Jacob entre ellos; y dos entusiastas intervenciones musicales de Maritza Barreñada (Ontheredbox) y María Ayo, quienes también compartieron sus testimonios personales.

Entre las asistentes, palabras de agradecimiento por lo vivido. He descubierto que Dios es un Padre que extiende sus brazos para acogerte, decía Amy.

La presencia de Dios es muy real -apunta María Antonieta- se respira amistad y unidad.

“Todo ha sido una gran confirmación de Dios -agregaba Cristina, otra asistente, al terminar el Congreso-. El taller de Jaz, en concreto, ha sido toda una bendición para mi vida”. 

Lo que he sentido en Aglow este año son más corazones dispuestos a traer el Reino de Dios a España, dice Rocío. No tanto que se ore por sus necesidades personales, sino que he visto mujeres dispuestas a llenarse de su presencia para traer Su reino.

 

Inspirados tiempos de alabanza. / M.Gala

Ana Giménez declaró que “este fin de semana ha sido toda una bendición” y animó a volver el próximo año, a Aglow 2016. Además agradeció a todos los colaboradores y voluntarios el esfuerzo realizado para que la conferencia pudiera llevarse a cabo con éxito.

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