Hallan al asesino de una niña coreana evangélica de 11 años

El detenido ha sido arrestado en la Península, adonde se había trasladado tras cometer los hechos. En un breve comunicado, la policía afirma que en relación con la muerte violenta de la niña de nacionalidad coreana In-Sil Oh, de 11 años de edad, "funcionarios de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Las Palmas, en colaboración con la Brigada Provincial de Policía Científica y la U.D.E.V. Central de la Comisaría General de Policía Judicial, han procedido en la Península a la detención de un ciudadano coreano como presunto autor de los hechos". EL PADRE ENCONTRÓ EL CADÁVER La niña fue hallada muerta el sábado por la tarde en la vivienda familiar situada en el número 215 de la calle La Naval, a la altura de la plaza de Manuel Becerra, en el popular barrio de La Isleta. La menor se encontraba sola en el momento del crimen y su cadáver fue hallado por el padre al volver a la casa. La vivienda es un inmueble de dos plantas que tiene un comercio de artículos coreanos a la altura de la calle. Aunque enseguida se realizó la autopsia de la menor, los datos no fueron hechos públicos debido al secreto de sumario decretado por el juez encargado del caso, que ha impedido también conocer cualquier otra circunstancia relacionada con la muerte de la niña. Al parecer, la policía baraja que el móvil del crimen fuera económico. El comisario que lleva el caso indicó que un posible desencadenante fue «el robo de dinero y de joyas», finalizando con la muerte de la niña que sufrió una «fractura en el cráneo» debido a que le dieron un golpe con un objeto «contundente», que aún se desconoce cuál podría haber sido. EL DETENIDO CONFIESA SU CRIMEN El detenido, Sang Ok Lee, de 49 años de edad, era una persona cercana a la familia de la víctima. Según la jefa Superior de la Policía Nacional, Concepción de Vega, «la niña le llamaba ‘tío´ aunque no tenía una vinculación de sangre con la niña». El asesino de la niña coreana, tras ser detenido fue acusado de cometer delitos de asesinato, agresión sexual y robo con violencia. Sang Ok Lee tras prestar declaración ante el juez ha confesado ser el autor del crimen. DOLOR DE EVANGÉLICOS CANARIOS Según ha podido saber la redacción de Protestante Digital gracias a Visitación Castillo, de la iglesia de Gran Canaria, se trata de la hija de un matrimonio evangélico que pertenece a la iglesia evangélica coreana de la comunidad. El abogado que lleva el caso, Woo Func Chang, admitió que este colectivo está con un «estupor y dolor impresionante». La muerte de In-Sil ha causado gran consternación en la numerosa comunidad coreana residente en Las Palmas de Gran Canaria desde hace años, muchos de ellos evangélicos, como los padres de la niña. Ante la noticia de esta pérdida, todos los evangélicos canarios también han sentido un hondo dolor ya que, después de celebrar el funeral de Rubén Santana en Canarias, las islas vuelven a estar de luto sabiendo que el asesino de una niña evangélica ha sido encontrado en esta misma comunidad autónoma. “La Isla de Gran Canaria está pasando por momentos de gran tristeza y dolor, gracias a Dios los creyentes tenemos la esperanza de la Resurrección en Cristo” –dice Visitación Castillo, evangélica canaria, en su carta a PD. “La comunidad coreana es muy apreciada entre los creyentes, pues son hermanos que se toman muy en serio el estudio de la Palabra y la práctica de ésta” –concluye la lectora antes de hacer un llamado a la oración a todos los hermanos en la fe de la familia de In-Sil Oh. El pasado sábado se celebró en el Colegio Coreano de Las Palmas un acto de luto por la muerte de In Sil Oh, alumna de este centro escolar, donde estudiaba la lengua coreana, en el que participaron cerca de 300 personas.