La práctica religiosa, en declive en España

Casi la mitad de los españoles se define como católico no practicante, en total un 46,4%, según el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicado en junio de 2019.

Desde el pasado mes de marzo, el CIS distingue en sus encuestas entre dos opciones: ‘católico practicante’ y ‘católico no practicante’. De los últimos resultados correspondientes a junio se desprende que un 68,9% de los españoles se definen como católicos. Esta cifra se divide en dos bloques, en el que un 22,5% del total de españoles dicen ser ‘católicos practicantes’ frente a un 46,4% que aseguran ser ‘no practicantes’.

Además, el estudio revela que un 11,3% se definen como ateos; un 8,2%, indiferentes o no creyentes (la categoría de indiferente también se incorporó en marzo); un 7,6%, agnósticos; y un 2,8%, creyentes de otra religión.

En cuanto a las minorías religiosas, el CIS no pregunta a qué religión pertenecen los encuestados aparte de la fe católica. Según los datos del Observatorio del Pluralismo Religioso del Ministerio de Justicia, la religión evangélica es la que más ha aumentado en lugares de culto durante las últimas décadas.

LOS JÓVENES, MENOS RELIGIOSOS

Una de las variables más interesantes que ofrece este estudio es la que tiene que ver con la edad y el sexo.

Así, se puede considerar que hay una diferencia sensible entre hombres y mujeres en la práctica de la religión católica. Un 28,5% de mujeres frente a un 16,1% de hombres, en este caso.

En el bloque más joven (18 a 24 años) es donde la estadística presenta más variantes respecto al total de la población. Los católicos ya no son mayoría (41,6) y solo un 6,7% de los jóvenes se identifican como católicos practicantes, frente al 34,9% que prefiere identificarse como católico no practicante. 

En cambio, ateos (26,9%) agnósticos (10,5%) e indiferentes/no creyentes (16%) suman más de la mitad de la población que en esta franja de edad parecen menos interesados en la religión.