¿El crecimiento de la iglesia en Asia forma parte del plan de Dios para avivar Europa?

El siglo XX fue testigo del extraordinario crecimiento del cristianismo en Asia y esa realidad está impactando ahora en Europa, ya que los cristianos de toda Asia han emigrado a Europa en los últimos treinta años.

Según The Chinese Overseas Christian Mission hay 347 iglesias chinas en Europa, 167 en el Reino Unido, 31 en Italia, 28 en España, 27 en Francia y 23 en Alemania. Su lista de iglesias incluye al menos una congregación en 22 países europeos diferentes. Estas son solo las iglesias chinas y probablemente solo una pequeña parte de ellas. A eso hay que añadir las iglesias coreanas, las filipinas, las tamiles y muchas más.

Del 17 al 21 de octubre de 2022, 600 líderes cristianos de toda Asia se reunieron en Bangkok (Tailandia) para el Congreso Asia2022 bajo el tema “Repensar la Iglesia y la Misión: La agenda de Dios para hoy”. El congreso fue una clara manifestación de la salud de la iglesia en Asia en tres dimensiones: vitalidad, unidad y profundidad.

A lo largo de la semana, los delegados del congreso escucharon historias sobre la vitalidad y el crecimiento de la iglesia en Asia, a menudo en los lugares más sorprendentes. Los movimientos misioneros autóctonos de Asia están plantando iglesias entre grupos de personas no alcanzadas. Están innovando formas de iglesia que pueden satisfacer las necesidades de las florecientes megaciudades de Asia. Y están estableciendo estructuras para la formación de líderes y la educación teológica que reflejan la cultura y los valores asiáticos.

El congreso fue convocado conjuntamente por el Movimiento de Lausana en Asia, la Alianza Evangélica de Asia y la Asociación Teológica de Asia, lo que constituye una importante demostración de la unidad evangélica. Aunque existen diferencias culturales significativas tanto dentro de las tres regiones de Asia Meridional, Asia Sudoriental y Asia Oriental como entre ellas, todo el programa hizo hincapié en la mancomunidad de valores y perspectivas asiáticas como un don para la iglesia. Esta unidad también se expresó en el énfasis que dieron a la importancia de la colaboración entre generaciones, con una de las principales sesiones dirigida por líderes más jóvenes.  Estos se mostraron agudos al declararse “la Generación del Ahora” y no “la Próxima Generación”.

Sin embargo, lo más importante fue el mensaje de unidad entre culturas. En la última mañana, la teóloga japonesa Eiko Takamizawa contó la historia de Chizuko Tauchi, una misionera japonesa en Corea a principios del siglo XX que estableció un orfanato que atendió a los niños coreanos antes, durante y después de la guerra de Corea. Fue un poderoso testimonio de una mujer joven que se humilló para cruzar una brecha cultural que a menudo se considera insuperable con el fin de compartir el evangelio de palabra y obra.

En tercer lugar, el congreso destacó por su profundidad teológica y misionológica. Todos los expositores bíblicos y ponentes plenarios eran asiáticos. La mayoría eran doctores y entre ellos había dos mujeres. Aunque el congreso se celebró en inglés, la influencia del pensamiento occidental se puso en tela de juicio en varios puntos, y se animó a los escasos invitados occidentales a dar un paso atrás para permitir a los asiáticos, naturalmente deferentes, compartir libremente en los grupos de la mesa. 

No cabe duda de que la Iglesia en Asia ha alcanzado la mayoría de edad. No solo hubo pruebas de una reflexión teológica y misionológica verdaderamente autóctona de Asia sino que un gran número de las iglesias de Occidente pueden aprender mucho de nuestros hermanos y hermanas orientales. Más aún, aprovechar más las oportunidades de colaboración entre Oriente y Occidente es algo que beneficiaría enormemente a la iglesia mundial.

Fui invitado a asistir en mi calidad de Director Corregional de Lausana Europa y a impartir un seminario sobre los retos y las oportunidades de la asociación entre Europa y Asia, junto con el Presidente de la Misión Evangélica del Mekong, el Dr. Chansamone Saiyasak.

El equilibrio de poder en el cristianismo mundial ha cambiado. Los últimos 50 años de migración de cristianos asiáticos, latinoamericanos y africanos han cambiado el rostro de la iglesia en Europa. No obstante, como subrayé en mi seminario, la mera presencia de iglesias asiáticas en Europa no significa que estén alcanzando a los europeos con el evangelio. Como dijo un hermano chino que asistió al seminario, muchas de las iglesias chinas “son como flores que han sido plantadas en suelo europeo pero sin quitar la maceta”. ¡Me hizo pensar en que eso también es cierto para muchas iglesias europeas!

Lausana Europa se compromete a desempeñar su papel en la ruptura de esas macetas para que las iglesias europeas y las del Mundo Mayoritario puedan conectarse y aprender las unas de las otras y alcanzar juntas a esta generación con el evangelio. Ya que el crecimiento de la iglesia en Asia (y en otros lugares del Mundo Mayoritario) es también parte del plan de Dios para avivar Europa.  

Jim Memory, co-director Regional de Lausana Europa