Dionisio Llamazares opina que el concepto de ´notorio arraigo´ religioso está ya inutilizado

Llamazares hizo estas consideraciones durante una mesa redonda, en la que participó también el catedrático de Derecho Canónico, Daniel Tirapu, sobre ´Europa: Libertad Religiosa y Derechos Humanos´, organizada por la Iglesia de la Cienciología, con motivo de la reciente sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que reconoce el derecho de Cienciología a ser reinscrita como confesión religiosa en Rusia. El ex director de Asuntos Religiosos explicó que la cláusula de ´notorio arraigo´ se concibió como una cautela de la Administración cuando se creó el Registro de Entidades Religiosas dependiente del Ministerio de Justicia, y que el hecho de reconocérselo en su día a la FEREDE (Federación de Entidades Religiosas Evangélicas), a los musulmanes y a los judíos, se hizo más por razones históricas y porque se quería señalar un nuevo camino en la libertad religiosa en España. El hecho, explicó, de que ahora se le haya concedido también a la Iglesia de Jesucristo de los Ultimos Días (Mormones) y a los Testigos de Jehová, significa que no puede negársele el mismo reconocimiento a cualquier otra confesión religiosa que lo pida y que, por lo tanto, el propio concepto ´queda inutilizado´. Dionisio Llamazares se mostró crítico con la ley de Libertad Religiosa y el desarrollo jurídico para la constitución del Registro de Entidades Religiosas, por considerar que desde el punto de vista de la Administración permite que discrecionalmente se pueda negar la inscripción a cualquier persona o grupo que lo solicite, cuando no compete al Estado decidir qué es o no una confesión o grupo religioso. El director de la Fundación Pluralismo y Convivencia, José María Contreras, que se encontraba entre los asistentes a la mesa redonda, polemizó con Llamazares afirmando que esa situación sólo se ha producido en los últimos años en una ocasión (Cienciología) y que la Comisión responsable de decidir sobre la inscripción o no, nunca se había opuesto a ninguna solicitud, afirmación que Llamazares matizó afirmando que conocía casos en que esto había sucedido administrativamente antes de llegar a la Comisión.