Construir un pozo

Nuestro mundo se divide en dos tipos de personas.

26 DE MAYO DE 2025 · 10:00

Foto de Pavlo Semeniuk en Unsplash,
Foto de Pavlo Semeniuk en Unsplash

«En verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce». (Salmo 23:2)

Hace años, un amigo que trabaja en el campo me comentó que en las grandes extensiones de terreno hay dos maneras de tener controlados a todos los animales de tu propiedad. Una es colocar vallas para que no puedan saltarlas y escaparse; la otra, es construir un pozo, porque los animales no se van del lugar donde pueden beber agua, comer y descansar. 

Esto me hizo pensar que, mayoritariamente, nuestro mundo se divide en dos tipos de personas. Por una parte, están aquellos que construyen vallas para controlar a los demás y someterlos a su autoridad; los que quieren que no nos salgamos de lo que ellos dicen y que siempre hagamos lo que ellos dictaminan. Por otra parte, nos encontramos con aquellos que construyen pozos para que todos podamos tener agua; aquellos que regalan gracia, amor, bondad, los que nos ayudan a vivir y disfrutar de todo lo que Dios nos ha dado.

Si el mundo sigue en pie todavía, es debido los que construyen pozos; aquellos que conocen el amor de Dios y siempre quieren regalárselo a los demás.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Con otro ritmo - Construir un pozo