Apertura del I Concilio Ateo en Toledo

“Todavía no existe ninguna institución especialmente destinada a combatir y a destruir la creencia en Dios, que es el que mayor mal produce” –decía un integrante de la Federación Internacional de Ateos (FIdA), quien, junto a otros filósofos y pensadores ateos ayudó a desarrollar esta organización. Dos años después, en noviembre de 2007, la federación celebra el I Concilio Ateo de Toledo. La Federación Internacional de Ateos es una organización que se define como “racionalista”, con ideas antirreligiosas y que lucha por “la libertad individual”. Los integrantes de la federación dicen estar convencidos de que las instituciones religiosas no son sino instrumentos de dominación y sometimiento y que, por tanto, debe combatirse a la religión bajo todas sus formas. Su lema es “Ateísmo o barbarie”, como reza su manifiesto público, que se puede ver en la página web de la federación. “Pensamos que jamás se ha dado al ateísmo la importancia que posee como fundamento de las bases científicas, políticas y filosóficas de Occidente”, sigue explicando su declaración de intenciones. EN TOLEDO El I Concilio Ateo de Toledo significa un paso más en la consolidación de un movimiento ateo organizado. Y para ello, eligen Toledo, donde se celebraron hasta dieciocho concilios durante la dominación visigoda en la península y donde Recaredo se convirtió al catolicismo en el III Concilio de Toledo. Este lugar emblemático de la religión tiene además el aliciente de albergar el Arzobispado del cardenal Cañizares, adalid de los valores más tradicionales y conservadores católicos. Ahora, la FIdA quiere convertir la ciudad en el lugar emblemático de la anti-religión. Ese es su desafío. “Las exigencias expansivas de la fe, en especial las del monoteísmo absoluto del Islam y las de las distintas versiones del neocristianismo evangélico, del catolicismo romano y de la ortodoxia oriental, van minando paulatinamente el campo de nuestras libertades” –dice el Coordinador de la FIdA, Francisco Miñarro.