Jesús Adrián Romero y Halloween

En un sacrílego e irreverente escenario mostrando en pantalla gigante calabazas colgantes alegóricas a  la sombra y a la muerte, el cantante Jesús Adrián Romero hace violencia de la habitual iconografía evangélica referida a la luz, la liberación y la vida plena en Jesucristo.

República Dominicana · 05 DE NOVIEMBRE DE 2015 · 04:28

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En un sacrílego e irreverente escenario mostrando en pantalla gigante calabazas colgantes alegóricas a  la sombra y a la muerte, el cantante Jesús Adrián Romero hace violencia de la habitual iconografía evangélica referida a la luz, la liberación y la vida plena en Jesucristo, para hacer lucir sus amplios conocimientos sobre los orígenes de Halloween como, sin con estas particulares declaraciones, se propusiera rescatar al evangelio del ridículo y anticuado estilo con que, según él  dice, los proclaman sus aburridos e impertinentes seguidores.

Ante este dramático desfase en que él ubica la iglesia, su propuesta es que los cristianos salgamos disfrazados y comencemos a repartir dulces por las casas el 31 de octubre, día de Halloween, para de esa forma darle un poco de colorido y atractivo a nuestra fe y hacer de nuestro mensaje algo más interesante y entretenido.

Las explicaciones que ofrece Romero sobre el significado de Halloween y su llamado a que “redimamos” esta fiesta pagana, resultan innecesarias, inoportunas y no aportan nada a la mejor proyección y al avance del cristianismo evangélico. Como quiera que se vean estas explicaciones, a quien más le aportan es a esta celebración pagana y en nada favorecen la fe cristiana ni a la iglesia.

Sin embargo, todo esto viene a revelar que cuando el ministerio del arte evangélico está al servicio del espectáculo y el consumo comercial, se corre el riesgo de lastimar la identidad evangélica y crear ruidos y confusiones como este que, sin que nadie se lo pidiera, nos acaba de regalar el hermano Romero.

Estos grandes ministerios están diseñados para el consumo masivo, tienen que ser productivos y rentables lo que, si no se tiene cuidado, llega a ser su principal motivación. Se habla de la marca, del posicionamiento, de la competitividad, de estrategia, de marketing y de todos los recursos técnicos capaces de mantener en los primeros planos a estas empresas religiosas. De esa manera, se pierde mucho del contenido esencial y del propósito y la motivación que originalmente impulsaron estos ministerios.

Entre los graves desaciertos de este comentario está el llamar “conspiradores” a los cristianos que no comparten esta fiesta pagana, además de desdeñar a los cristianos que aprovechan esta fiesta para distribuir literatura en afirmación de sus creencias. Romero fue duro hasta tratar con ironía y desdén a los creyentes que para la ocasión reparten “tratados” con mensajes cristianos. Expresó de forma directa su repudio a los creyentes que andan repartiendo folletos evangelísticos de Chick Publications que, según él, lo que hacen es “es contaminar la mente de la gente”.

Para Romero, esta es una fiesta totalmente inofensiva, somos los cristianos quienes la hemos interpretado como dañina, satánica y tenebrosa. Romero alega que a la iglesia no le gusta la diversión y busca algo para rechazarla porque, simplemente, su papel en rechazar cosas. Esto quiere decir que éste destacado cantante tiene una pobre noción de cuál es la misión de la iglesia y de que forma la está llevando a cabo.

 

Halloween en la República Dominicana
Mientras Jesús Adrián Romero nos insta a celebrar la fiesta pagana de Halloween,  aquí en la República Dominicana podemos decirle que ya casi hemos erradicado de nuestro ambiente cultural esta celebración foránea que promueve el terror, la muerte y el miedo. Nosotros aquí en República Dominicana hemos decidido durante esta noche y siempre hablar de nuestro Señor Jesucristo, quien vino a dar vida, y vida en abundancia.

En este 31 de octubre, con mucha honra lo decimos, los dominicanos no tenemos que redimir el día de Halloween, prácticamente ya lo hemos erradicado. En la República Dominicana es el Día Nacional de los Evangélicos Protestantes, establecido por ley. Precisamente en este día 31 estamos preparando la gran celebración del 498 aniversario de la Reforma Protestante y el más grande bautismo de creyentes en la historia del país.

La misma noche del 31, evangélicos de todo el país estarán concentrados en una gran celebración que será llevada a cabo en Santo Domingo con el auspicio del Consejo de Confraternidades de Pastores Evangélicos (CONACOPE).

 

Mi humilde recomendación para este destacado y talentoso hermano

Es cierto lo que dice el hermano Romero, que en su avance el evangelio de los primeros siglos logró rescatar algunos elementos de otras culturas e integrarlos sin conflicto a su cosmovisión. Y estos elementos redimidos nos han llegado como valores integrados a la práctica cristiana, fechas, símbolos, tradiciones y otros. Así opera Dios en la dinámica de la historia y de las culturas.

Sin embargo Halloween, sin dudar de las buenas intenciones de los cristianos de esa época, no logró ser rescatado como un elemento factible para ser integrado al cristianismo. El profundo antagonismo que Halloween plantea a lo que es y representa el Evangelio de Jesucristo no permite ser rescatado e integrado en su esquema de fe y principios. Intentarlo a estas alturas no se sería más que una descabellada necesidad. Hay prácticas que hay que iluminar con el poder de la Palabra de Dios, e ir erradicándolas del corazón y la mente de los hombres, porque son abominación a Jehová y así lo declaran las Escrituras.

El hermano Jesús Adrián Romero tiene la oportunidad de reflexionar sobre todo lo que ha dicho. Hacerlo con sinceridad y responsabilidad cristiana, no como una forma de reposicionarse en términos mercadológicos, sino de reorientar su visión y su teología. Su recuperación no debe tener como indicador el aumento de las ventas de sus productos, sino la salud de su espiritualidad y la recuperación de una visión y de un enfoque genuinamente evangélico y apegado a los principios enmarcados en la Palabra de Dios.

Quizás esta crítica haya sido dura, pero más que denostar a nuestro hermano oramos por su reorientación, para que ese ministerio que el Señor le ha dado continúe expandiéndose de forma sana y edificante. Todos cometemos errores. Sin duda estas explicaciones han resultado fallidas y lo más recomendable es corregirlas y seguir hacia adelante.

Nuestro hermano Romero necesita ser pastoreado y necesita descanso y reflexión para su ministerio. Bien le vendría un tiempo de reflexión y el consejo sabio de hombres de Dios que han pensado el Evangelio con un sentido teológico y contextual que tiene siempre la Palabra de Dios, la Biblia, como su referencia y su norte.

Mi pedido para el hermano Romero es comprensión y oración. Que el Señor lo ayude y le guíe, y que ese talento que el Señor le ha dado sea comprometido con un mensaje más edificante y provechoso del Evangelio de luz y vida que nos ha entregado nuestro Señor Jesucristo.

 

Tomás Gómez Bueno – Periodista y escritor - República Dominicana

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - TOMÁS GÓMEZ BUENO - Jesús Adrián Romero y Halloween