Bienaventuranzas de este otro reino

Nuestra sociedad actual se rige por ciertos valores que son distintos de los que el Maestro señala. Juzguen ustedes y consideren si nosotros los cristianos también nos vemos envueltos en ellos. Bienaventurados los que tienen de todo y jamás han pasado necesidad, porque ellos conseguirán muchos amigos y de ellos serán las mejores oportunidades en este mundo. Bienaventurados los que se ríen de todo, saben cómo divertirse y hacen del exceso y la banalidad su estilo de vida, porque ellos tendrán ganadores donde quiera que vayan. Bienaventurados los orgullosos, los que se la creen y los sabihondos, porque ellos podrán opinar de cualquier tema sin sonrojarse y tendrán siempre quien les consulte. Bienaventurados los duros y fuertes, los que se imponen para conseguir el éxito a cualquier precio, porque ellos harán las reglas que otros seguirán. Bienaventurados los que buscan el doble sentido, jamás examinan sus motivaciones y no sienten pudor alguno, porque ellos sabrán siempre como salir bien parados. Bienaventurados los que saben urdir conspiraciones y tienen capacidad para avivar la discordia y los enfrentamiento, porque ellos retendrán el poder por mucho tiempo. Bienaventurados serán ustedes cuando todo el mundo los reconozca en la calle y hagan fila para pedirles autógrafos, de tal manera que deban usar guardaespaldas para protegerse. Dichosos serán cuando asciendan la escalera de la fama y viajen siempre en primera. Les digo que deben considerarse felices cuando estén mucho tiempo en los top ten y sean incluidos entre los ricos y famosos. Felicítense y celébrenlo en el mejor lugar posible, pero recuerden que en este mundo nunca se puede confiar en nadie. Daniel Bianchi – Pastor, Vicepresidente COMIBAM Internacional - Argentina