“Incluso las drogas y la violencia se convierten en algo positivo en el mundo del Orgullo”

Un think tank que ha analizado el programa de los últimos años del festival LGTBI de Suecia ha encontrado una alarmante colisión con las políticas de salud. El estudio muestra la “colorida oscuridad” del movimiento, dice Per Ewert, del Clapham Institute.

Joel Forster , Redacción PD

Evangelical Focus · Estocolmo · 03 DE AGOSTO DE 2018 · 11:00

Una de las actividades del Orgullo LGTBI. / EuroPride 2018,
Una de las actividades del Orgullo LGTBI. / EuroPride 2018

Durante diez días el EuroPride 2018, el mayor festival LGTBI en el continente, llena las calles de Estocolmo con banderas arcoiris y todo tipo de actividades públicas. Entre el 27 de julio y el 5 de agosto, decenas de miles de personas provenientes del resto del territorio europeo se han reunido bajo el lema “Por una Europa unida, abierta al mundo”. ¿Pero qué valores hay tras el movimiento LGTBI? 

El think tank sueco Clapham Institute ha observado los detalles del Orgullo en Estocolmo “desarrollando un estudio de su programa online de 2017”. El informe, de 38 páginas, ha sido publicado y compartido con los medios bajo el título “La colorida oscuridad”. Las conclusiones muestran que la violencia y el consumo de drogas fueron abiertamente promovidos durante el Orgullo. Una realidad que va “en contra de los objetivos de salud pública” del gobierno explica el director del Clapham Institute, Per Ewert.

 

Per Ewert, presidente del Clapham Institute.

Durante el Orgullo de 2017, la prostitución fue presentada como algo positivo, atentando claramente contra los esfuerzos del país escandinavo para acabar con la explotación sexual de las mujeres a través de una legislación contra el tráfico sexual. Lo que popularmente se conoce como el ‘Modelo nórdico’.

Los autores del informe esperan que el documento ayude a distinguir una imagen real de un movimiento que ha recibido mucho apoyo en los últimos años. “Ningún patrocinador, columnista de opinión ni político podrán decir que no lo sabían”, dice Ewert.

 

Pregunta: Como un think tank cristiano, ¿qué lleva al Clapham Institute a analizar en profundidad el contenido del programa del Orgullo de Estocolmo de 2017?

Respuesta: El Orgullo de Estocolmo es uno de los mayores acontecimientos de Suecia, pero cuando comenzamos a examinar el asunto encontramos, para nuestra sorpresa, que nunca se había hecho un estudio sobre el contenido del festival. Lo que encontramos en el programa fue mucho peor de lo que esperábamos y eso hizo que aún fuera más importante hacer este análisis.

 

P: Una de las conclusiones de vuestro estudio es que conceptos negativos como “violencia”, “chemsex” o “dominación” son presentadas como algo positivo. ¿Qué nos dice esto acerca de los valores del movimiento LTBI?

R: En el programa del Orgullo se hace evidente que el movimiento no se enfoca en los valores positivos que la visión popular del festival indica. Por el contrario, revela claramente una ideología de individualismo radical, especialmente en lo referido a sexualidad y género. Romper normas y oponerse a cualquier tipo de autoridad se convierte en un bien inherente, y esto resulta en las dramáticas consecuencias de que incluso las drogas y la violencia se convierten en algo positivo en el mundo del Orgullo.

 

P: El estudio interpela a las autoridades suecas para que se replanteen su apoyo al Orgullo de Estocolmo, en tanto que “está lejos de ser un socio confiable en la salud pública”. ¿Cómo habéis llegado a esta conclusión?

R: Tomamos nuestro punto de partida de los informes oficiales de salud pública del gobierno de Suecia, que reflejan que las enfermedad mentales, las drogas y las autolesiones son reales e incrementan los problemas en la sociedad. La Mesa Nacional de la Salud y el Bienestar ha declarado que todas las partes de la sociedad deben trabajar juntas para solucionar estos problemas. El contenido del programa del Orgullo muestra que, de hecho, ellos trabajan en contra de los objetivos de salud pública. Esa es también la razón por la que hemos concluido que ninguna parte madura de la sociedad tiene motivos para apoyar el Orgullo.

 

P: ¿Dirías que el movimiento LGTBI en Suecia promueve la prostitución?

R: La principal organización LGTBI en Suecia, la RFSL, intenta desde hace años abolir la prohibición de la prostitución el país. Este verano el Orgullo de Estocolmo ha dado un enfoque especial a esta cuestión organizando un seminario con una nueva organización llamada Fuckförbundet (un juego de palabras con el término sueco que se refiere a ‘gremio’), que respalda abiertamente la prostitución.

 

P: ¿Cómo han reaccionado los medios a vuestro informe? Algunos han dicho que tiene un sesgo anti LGTBI. ¿Qué respondéis?

R: La estrategia principal parece haber sido silenciar el informe hasta la muerte. Sin embargo, para nuestra sorpresa, el responsable del Orgullo se mostró dispuesto a reunirse conmigo en un debate en directo por la radio nacional. Quizás por primera vez, el conductor del programa dirigió las preguntas críticas al responsable del Orgullo y no a mí. Fue una sorpresa positiva pero tuvo la consecuencia de que el Orgullo se retiró de un debate en la televisión nacional dos días después.

Nuestro informe no es anti-LGTBI. Es crítico con el movimiento, que no es lo mismo. Hemos dejado muy claro que nuestra perspectiva no es la de la ética sexual, sino la de la salud pública. En este sentido diríamos que el Orgullo es una amenaza, sobre todo, para la propia gente del movimiento, ya que el festival crea y promueve un entorno oscuro y con riesgos para la salud de las personas que se encuentran en la esfera, que a menudo se encuentran en una situación vulnerable. Nuestro deseo con este informe es revelar la verdad de lo que el propio Orgullo presenta, de tal manera que ningún patrocinador, columnista de opinión ni político pueda decir que no lo sabía, y obviamente ayudar a las personas de la comunidad LGTBI para que no queden atrapadas en esa oscuridad.

 

P: De cara al Euro Pride de este año, ¿existen connotaciones alarmantes en los eventos que se han anunciado?

R: Tristemente, nuestras advertencias parecen haber pasado inadvertidas para los organizadores. El enfoque en las drogas, el sadismo, la prostitución y la ideología de género están completamente desconectados de las relaciones duraderas. Un rayo de luz en el programa de este año es una persona llamada Kitty, que ha organizado un seminario sobre violación y abuso en el mundo BDSM, e intenta trabajar en contra de esto. Sin embargo, en general, el programa es tan favorable hacia la violencia y el sadismo como lo fue el año pasado. 

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