¿Cómo lee la Biblia esta generación?

Muchos cristianos evitan lecturas extensas y vuelven “una y otra vez a los pasajes que sienten como inspiradores y reconfortantes”, dice la investigadora Ruth Perrin.

Joel Forster

  · Traducido por Cristina Rovirola

Evangelical Focus · ESPAÑA · 04 DE ABRIL DE 2017 · 12:17

Los hábitos de lectura de la Biblia están cambiando, dice Ruth Perrin.,
Los hábitos de lectura de la Biblia están cambiando, dice Ruth Perrin.

¿Cómo se relacionan hoy en día los jóvenes con la Biblia? Esta es una de las preguntas que Ruth Perrin, miembro de Leech Research en St. John’s College (Durham, Reino Unido), ha estado intentado responder en los últimos años.

En su investigación ha comprobado que más de 1 de cada 5 cristianos jóvenes rara vez, o nunca, leen la Biblia y sólo atienden a la Escritura en un contexto de iglesia. Los sermones o predicaciones son la fuente principal del conocimiento bíblico.

Hace unos 50 años, los líderes de iglesia “podían asumir que la gente sabía lo que eran la Semana Santa y la Navidad, o que habían escuchado de Daniel en el foso de los leones, o de David y Goliat. Eso ya no es así y por eso las iglesias tienen que empezar desde el principio con verdades bíblicas muy básicas”, dice Ruth Perrin. 

Ruth es miembro de Leech Research en St. John’s College (Durham, Reino Unido) y miembro asociado del personal de King’s Church. Tiene 20 años de experiencia en el ministerio; predicando, formando y enseñando en la iglesia y en contextos paraeclesiales con un particular (pero no exclusivo) interés en la fe de adultos jóvenes. Sus trabajos se van publicando en el blog Discipleship Research.

 

Pregunta. Una de las estadísticas de tu estudio muestra que el 89% de las personas que tienen entre 18 y 30 años dicen que su conocimiento bíblico proviene principalmente de aquello que le enseñan (ej. sermones, estudios bíblicos). ¿Qué se podría hacer para animar a las personas a leer realmente la Biblia en su casa y no depender solamente de los mensajes de los domingos?

 

Ruth Perrin.

Respuesta. ¡Esa es la pregunta del millón! Creo que tenemos que inspirar a las personas a entender cuán interesante puede ser la Biblia, lo bonita e ingeniosa que es su literatura. La pasión por Las Escrituras es contagiosa así que empezar con predicadores entusiasmados y creativos es un buen comienzo. 

Generar un ambiente colaborativo –en grupos pequeños o algo así– donde se anima a las personas a compartir, hablar, aprender juntos y no solo esperar que un experto conceda ‘la respuesta’, es también inspirador. Creo que normalmente la gente se queda desconcertada con algunas partes de la Biblia, especialmente el Antiguo Testamento. Una visión en conjunto para dar perspectiva de cómo encaja todo es algo que he visto que ayuda a muchas personas.

Es imprescindible que las personas se encuentren con Dios en Su palabra y no sólo lean por deber. Tengo una página web que pretende ayudar a las personas a encontrar puntos de identificación con personajes de las Escrituras con el fin de inspirarles a leer por ellos mismos más a menudo. 

 

P. La mayor parte de tu trabajo ha sido cualitativo, te has sentado con decenas de personas para saber sobre su vida cristiana. ¿Qué te ha sorprendido más (tanto positiva como negativamente) en estas conversaciones?

R. En mi trabajo he usado varios métodos: cuestionarios, grupos focales y entrevistas. El proyecto en el que trabajo actualmente trata de entrevistas personales, aunque los artículos de la página web actual se basan casi todos en conversaciones de grupos focales. 

Lo que más me ha sorprendido en las entrevistas es cuánta información personal está dispuesta la gente compartir con una persona desconocida. Es un auténtico honor escuchar las historias de las personas y, en algunos momentos, parece como una forma de ministerio pastoral, simplemente dando a la gente tiempo para hablar y realmente ser escuchada. 

 

P. A muchos se les ha dicho (incluso en canciones de escuela dominical) que tienen que “leer la Biblia cada día”. La realidad es que sólo una minoría lo hace. Por lo que has investigado, ¿cuáles son los mayores obstáculos? 

R. Estar ocupado. Muchos de nosotros corremos a una velocidad altísima o estamos conectados a pantallas 24/7. Se necesita una verdadera disciplina para hacer tiempo para leer la Biblia.

Muchas de las personas con las que he hablado han empezado a escuchar versiones en audio mientras se desplazan al trabajo o hacen tareas prácticas. Otros están leyendo juntos con su pareja o un amigo y parece que eso ayuda. 

Es una lucha dura especialmente para aquellos con niños pequeños. Hay una tensión entre buscar un tiempo intencional para estar con Dios de manera regular (incluso si no es diariamente) y recordar que adoramos a un Dios de gracia que entiende las etapas de nuestra vida. 

 

P. ¿Crees que generalmente las iglesias en el Reino Unido tienden a sustituir la Biblia por otros recursos de discipulado cristiano en sus reuniones de jóvenes? 

R. Realmente no puedo comentar sobre el trabajo con jóvenes en el Reino Unido. Ha pasado mucho tiempo desde que estuve involucrada y no tengo datos sobre esto. La Dra. Melody Briggs ha hecho un trabajo interesante sobre cómo leer la Biblia con niños. Está publicado como parte de la serie bíblica B81, Interpretando Historias de la Biblia con Niños y Adolescentes.

Lo que diría es que los adolescentes que se están desarrollando necesitan ver la relevancia de lo que les enseñan en su propia situación. La habilidad para entender conceptos abstractos continúa en desarrollo en adultos jóvenes (¡el cerebro humano se sigue desarrollando hasta la edad de los 25!). Así que hagan lo que hagan los líderes de jóvenes, sus jóvenes necesitan sentirlo directamente relevante para poder encontrarle un sentido.

 

P. Dices que muchas iglesias tienen un “canon dentro del canon". ¿Crees que en el pasado (ej. Hace unos 50 años) las iglesias predicaban sobre una mayor diversidad de pasajes bíblicos?

R. La idea de “un canon dentro del canon” está bien establecida entre los académicos. Significa que aunque los cristianos dicen que tienen todo el Canon de las Escrituras como palabra autoritaria de Dios, hay porciones que, en realidad, consideran más importantes y sobre las que enfocan su atención, a menudo excluyendo otras.

Es por eso que muchas personas conocen el Nuevo Testamento mucho mejor que el Antiguo, y teológicamente hay razones para poner más énfasis en aquello escrito sobre Jesús. Aun así, diferentes tradiciones tienden a enfatizar diferentes porciones del Nuevo Testamento.

Por ejemplo: los evangélicos reformados a menudo ponen mucho énfasis en la epístola de Romanos; aquellos interesados en la acción social enfatizan el evangelio de Lucas; los carismáticos y pentecostales pasan mucho tiempo leyendo el libro de los Hechos. ¡Sólo las iglesias valientes estudian Jeremías (más que sólo unos cuantos capítulos felices), o Crónicas o Levítico! El efecto es que muchas personas nunca leen trozos largos de la Biblia, solamente vuelven una y otra vez a las pasajes que experimentan como inspiradores y reconfortantes.

Sobre lo que los predicadores hacían 50 años atrás, no sé si tengo el derecho de comentar. Pero está claro (según estudios de la Sociedad Bíblica) que en el Reino Unido las personas tenían una base más sólida sobre conocimiento bíblico así que podías asumir que la gente sabía lo que era Semana Santa y la Navidad, o que habían escuchado de Daniel en el foso de los leones, o de David y Goliat. Eso ya no es así y por eso las iglesias tienen que empezar desde el principio con las verdaderas bases bíblicas. 

 

P. Te has encontrado con que muchas mujeres dicen que no están acostumbradas a que se escuchar acerca de modelos femeninos a seguir de la Biblia. ¿Qué efectos negativos puede tener esto en la manera en la que se acercan a la Biblia?

R. De nuevo, hay mucha literatura y discusión acerca de los efectos de la Biblia sobre las mujeres. Algunas han rechazado las Escrituras como ‘irremediablemente patriarcales’, otras se esfuerzan para intentar redimir interpretaciones y encontrar nuevas inspiraciones para las mujeres. 

Algunos estudiosos argumentan la idea de una ‘gran nube de testimonios’ es muy importante en particular para las mujeres, que a menudo están orientadas de manera relacional. Creo que inconscientemente impedimos que las mujeres encuentren los modelos a seguir que buscan en las Escrituras.

Decirle a una mujer mayor que imite al apóstol Pablo, o a una niña con poca autoestima de 13 años que sea como Moisés, puede no ser de mucha ayuda o inspiración. Hay mujeres maravillosas, valientes y piadosas en las Escrituras pero muchas veces quedan desatendidas porque son personajes secundarios en el texto. He escrito sobre esto en el Grove Booklet B42, Mujeres Inspiradoras

 

P. Finalmente, ¿por qué empezaste el blog de investigación sobre el discipulado? ¿Cómo esperas que se convierta en un instrumento útil?

R. Toda mi investigación se basa en la pregunta de ministerio, ¿qué diferencia hace realmente lo que hago/hacemos en la fe de las personas?

Sé de muchos ministros que se preguntan lo mismo pero están ocupados así que hacer su propia investigación o encontrar tiempo para sentarse con libros académicos o artículos de revistas no es realista. La Investigación sobre el Discipulado busca presentar algunos pensamientos sobre los que reflexionar cada mes para que puedan ayudar a la gente a reflexionar sobre lo que hacen a la luz de los datos de investigación y no sólo sobre anécdotas. 

Estamos empezando con mi estudio pero esperamos poder incluir otros colaboradores que han hecho investigaciones a nivel de posgraduado en el curso. El objetivo es proveer conocimiento sobre lo que está pasando bajo la superficie de la iglesia de una manera que informe de la práctica de ministerios creando mucha conversación e intercambiando ideas.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Opinion - ¿Cómo lee la Biblia esta generación?