“En atención religiosa, la diferencia con Londres es abismal”

El español Rubén Fernández, que fue capellán en Londres 2012, critica la reducción drástica de licencias para atender las necesidades religiosas de los atletas durante los Juegos Olímpicos.

Daniel Hofkamp

PONTEVEDRA · 02 DE AGOSTO DE 2016 · 16:51

La Villa Olímpica. / Rio2016,
La Villa Olímpica. / Rio2016

Con los Juegos Olímpicos a la vuelta de la esquina, la organización apura los plazos para tener todo listo para el inicio de la competición. Entre los anuncios hechos por el comité Olímpico se encuentra el de la habilitación de un espacio multirreligioso, con cinco religiones representadas y una treintena de capellanes, que estarán a disposición de los atletas presentes en Brasil.

Como en otros aspectos, la organización de los Juegos no sale en este punto tampoco libre de críticas. El español Rubén Fernández, que forma parte de la organización Atletas en Acción y ha sido capellán evangélico en varios eventos deportivos en los últimos 30 años, cuenta a Protestante Digital que presencia de capellanes evangélicos -sólo cuatro- es ínfima en comparación a anteriores Olimpiadas.

 

Pregunta. Se han dado muchas menos licencias de capellanes evangélicos para los Juegos de Rio que en otras ocasiones. ¿Es escasa la presencia de sólo cuatro capellanes evangélicos en la Villa Olímpica?

Respuesta. La Villa en Rio albergará a 17.950 delegados permanentes, y muchos más que prefieren o tienen que alojarse fuera, pero entran y salen. Este espacio es, literalmente, una ciudad con todos sus servicios y necesidades, en la que 24 horas al día sirven decenas de miles de voluntarios, operarios, responsables federativos y políticos, y un largo etcétera. La Carta Olímpica señala que unos Juegos deben proveer recursos para atender las necesidades espirituales y religiosas de sus participantes. Las cifras hablan por sí solas. Eso sí, con respecto a Londres, Rio no se quedará atrás en la provisión de profilácticos y ya anuncia la distribución récord de 450.000 preservativos en su Villa.

 

P. Comparado con Londres, ¿es muy notoria la diferencia? ¿Hay alguna diferencia más que suponga una tara para la labor del capellán (espacio, actividad...)?

R. Abismal. Londres tuvo un equipo coordinando esta labor de servicios multi religiosos durante 4 años previos a los Juegos, y los 19 capellanes evangélicos internacionales, que se unieron a un equipo suficiente para atender tres turnos continuos de una Villa con demandas similares, fueron confirmados con un año y medio de antelación.

Entre los cuatro elegidos no hay nadie de África, Asia o Australia. Solo hay una mujer. Los cuatro capellanes cubren escasamente 5 o 6 lenguas y obviamente no podrán estar atendiendo necesidades dentro y fuera de la capilla cuando se les necesite. Los capellanes son voluntarios y no residen en la Villa. Con 4 capellanes se hará muy complicado contar con uno de ellos en posibles situaciones urgentes o de trauma.

 

P. Imaginamos que hay muchos atletas de fe evangélica en la competición. ¿Cuál es la labor del capellán?

R. La labor de los capellanes en eventos deportivos como este incluye la provisión de servicios en una zona específicamente dedicada de Capilla. Oración, estudio de la Palabra, recibir una Biblia en una lengua que puedas leer, alguien que te escuche, consejería, servicios litúrgicos, punto de encuentro con Olímpicos de mi propia fe, etc. Incluye también la intercesión, así como la presencia y disponibilidad para situaciones críticas, que tristemente se dan: lesiones, accidentes, crisis emocionales, la presión de ganar o el desconsuelo de la derrota, la tensión y la presión propia y del entorno.

Los servicios formales religiosos de Musulmanes y de Católicos son habitualmente mucho más regulares y concurridos, pero los deportistas y delegados Olímpicos entre los que hay desde voluntarios, delegados, entrenadores, atletas y hasta presidentes de Comités Olímpicos nacionales suelen desarrollar sus disciplinas espirituales por sí mismos, con ayuda de su entorno y a menudo nos ayudan a facilitar estudios bíblicos, presentaciones a sus propios equipos o incluso organizan servicios dominicales plenamente atendidos por ellos mismos (música, testimonios, meditación de la Palabra, etc).

 

Rubén Fernández.

Hay nacionalidades en particular como Kenia, Corea del Sur o EEUU en las que siempre hay un alto porcentaje de Olímpicos comprometidos y firmes en su fe en Jesús.

La principal razón por la que los capellanes internacionales son tan importantes, aparte del tema étnico, lingüístico y cultural, es porque los que son seleccionados son personas capacitadas y experimentadas en servir de forma integral a deportistas de alto rendimiento antes, durante y después de eventos deportivos. Les conocen y tienen su confianza. En muchos casos saben de los desafíos y necesidades de los deportistas y su entorno frente a un reto de estas características. Presencia, prudencia, saber escuchar, entender los retos de la identidad vinculada al rendimiento y el logro son algunas de las claves que un capellán deportivo debe saber manejar en un lugar como este. También saber que para muchas personas tu rol y tu presencia es incomprendida y puede que hasta ingrata, y responder con gracia y sabiduría sin imponer la obligación de una labor que si queda en mero testimonio posicional, no será muy eficaz.

 

P. ¿Hay oportunidades también para el evangelismo?

R. Un capellán deportivo que hace bien su labor no separará su disponibilidad y atención e intercesión a ser visto, esperado y preguntado en qué y quién le mueve a hacer lo que hace. Servir y amar incondicionalmente en la dirección y poder del Espíritu Santo te lleva a representar a Cristo en lo que haces y cómo lo haces, y genera constantemente oportunidades significativas de hacer un impacto para la eternidad. Muchos de nosotros hemos ido desarrollando recursos para poder servir eficazmente en necesidades sentidas de personas en el mundo del deporte. En mi caso, poder hacer coaching de alto rendimiento y mentorado deportivo con calificaciones profesionales me ayuda a poder servir a personas y ser Cristo conforme lo hago, que no se acercarían para un servicio religioso.

Además de esta faceta misional fundamental, hay organizaciones como Atletas en Acción que sirven y acercan a Jesús a clubes, equipos, otros eventos a nivel regional y nacional, y desarrollan recursos para ayudar a deportistas a acercarse y a crecer en Cristo y en su fe en relación al deporte. En Rio habrá un proyecto con 170 delegados de todo el mundo formándose y ampliando la visión de cómo hacer esta labor mejor antes, durante y después de eventos como una Olimpiada. Todos los participantes han sido seleccionados por tener relaciones significativas y un contexto natural de servicio y redes con deportistas de este nivel. Hay una red de intercesión a la que todos podemos unirnos para orar por cada deportista olímpico por nombre, también hay una excelente campaña a través de los medios audiovisuales y de redes sociales con www.struggleandtriumph.com, con historias de lucha y superación de Olímpicos y Paralímpicos que siguen a Jesús en múltiples lenguas, y que puedes seguir y compartir en forma de posts, breves clips, lecturas diarias… (http://athletesinaction.org/olympics/share)

En Rio y mundialmente a través de los esfuerzos de la Coalición Deportiva Internacional hay siempre multitud de recursos para aprovechar que conforme el planeta pone sus ojos en héroes humanos, podemos señalar al dador de la vida y a Jesús, incluso a través de las vidas y talento de algunos de esos atletas de talla mundial (por ejemplo:  https://issuu.com/ssgomag, también en varias lenguas.

 

P. Alguna cosa más que quieras comentar…

R. He empezado a hablar con algunas personas y sería estupendo colaborar para ofrecer en España la posibilidad de formar a capellanes deportivos desde comunidades e iglesias locales que crecieran desde la base, sirviendo y representando a Jesús en clubes, equipos y con deportistas desde nuestros barrios y pueblos, hasta lo más alto del deporte español.

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