Visita papal a Ecuador: indiferencia evangélica

Ecuador recibe la visita del papa Francisco con un recorrido desde el 5 hasta el 8 de julio. Para los representantes de la Iglesia Evangélica en Ecuador, la visita del papa Francisco responde al descenso que en los últimos años ha tenido la Iglesia Católico Romana (ICR) en países latinoamericanos.

En 1985 un 94% de la población de Ecuador se consideraba católica, Hoy de los 16 millones de ecuatorianos, en la última encuesta de Pew Research Center en 2014, el porcentaje de católicos cayó al 79%, mientras que los protestantes en su conjunto ascendieron hasta un 13% (un 10% según los estudios menos optimistas).

En Ecuador, el crecimiento de las iglesias evangélicas llega a todas las clases sociales, lo que le ha permitido ampliar su servicio y trabajo a nivel nacional.

INDIFERENCIA DE LOS EVANGÉLICOS

"Para nosotros los cristianos evangélicos, el movimiento del Papa en su desplazamiento a otra naciones tiene que ver con la búsqueda de lo que han venido perdiendo en los últimos años, que son decenas, centenas y miles de feligreses que de alguna manera han venido abriendo sus ojos a la Palabra del Señor", dice el pastor José Romero.

"Es un personaje internacional quien visita Ecuador y todo el mundo tiene que prepararse. Pero en términos generales, para la Iglesia Evangélica en nada influye", indica el pastor David Caicedo.

Por ello, aseguran que la imagen que el papa Francisco ha proyectado al pedir perdón por los actos cometidos en contra de los cristianos evangélicos alrededor del mundo, obedece a esta estrategia del Vaticano. En consecuencia, creen que la presencia del papa Francisco en Ecuador es fundamentalmente en los católicos en quienes tendrá incidencia.

"Pedir perdón ya no soluciona absolutamente nada, ya Dios tiene preparado todas las cosas. Nosotros simplemente debemos aferrarnos a lo que dice la Sagrada Escritura", comenta Caicedo.

"Creemos que el movimiento en esta área, con respecto a la postura que ha tomado el Vaticano y en su representación al Papa, tiene que ver más con un ambiente estratégico. El cambio debe comenzar con una característica de ajustarnos más a los principios bíblicos", asegura Romero.