Ser cristiano, una vida integral para Melvin Rivera

Miércoles 8:00 am, cafetería La Mallorquina, calle San Francisco en el Viejo San Juan. Compartir más de una hora de charla con Melvin Rivera Velázquez en su Puerto Rico natal, puede suceder sólo una vez al año y Protestante Digital tuvo esta oportunidad. El Director de Publicación Bíblica Mundial de las Sociedades Bíblicas Unidas vive en Miami y viaja casi permanentemente. Quienes lo siguen en Facebook pueden conocer el mundo a través de sus ojos y, en los últimos días de julio, han podido conocer el encanto del Viejo San Juan tal como luce en las primeras horas de la mañana. “Por tercer año consecutivo, con mi esposa Aradí, de vacaciones en el Viejo San Juan en Puerto Rico. Amamos cada vez más nuestra patria”, posteó Melvin al llegar a la capital de la isla caribeña. “Me gusta caminar por las calles antiguas de Italia, Alemania, Escocia, Holanda, Noruega, Inglaterra, Francia, pero mi Viejo San Juan tiene un encanto especial...quizás es por el ´mi´”, confiesa mientras saborea un café negro con una ´mallorca´ con mantequilla. “Algún pecado hay que cometer” se excusa con una sonrisa, refiriéndose a la grasa láctea. Es que Melvin y su esposa Aradí llevan una dieta saludable, libre de carnes, baja en carbohidratos y casi sin lácteos. No lo hacen porque se hayan montado a la ´ola saludable´ que ha alcanzado últimamente a muchas iglesias de Estados Unidos y desde allí se expande ya a otras partes del mundo. “Se nota entre los cristianos un énfasis en la salud y el ayuno, y eso es positivo. Hace un tiempo un joven me dijo que estaba siguiendo un ayuno bíblico y cuando le pregunté en qué consistía me respondió que no comía carne y ni bebía leche por un tiempo determinado. ´Entonces yo llevo ayunando desde el 2005´!, le respondí”. La conversación continúa en torno a la comida caribeña y el sobrepeso que se observa en la población de Puerto Rico. “El sedentarismo de la vida moderna trae sobrepeso, pero aquí además los hábitos alimenticios lo acentúan porque muchas comidas son fritas, se consumen carbohidratos en exceso por el cotidiano arroz blanco, y a todo se le añade tocino, carne de cerdo, jamón… Si uno sale a la calle, en general las ensaladas brillan por su ausencia o son sólo de lechuga y tomate”, lamenta. TEMPLO DEL ESPÍRITU SANTO No obstante, en estas vacaciones en su patria, Melvin ha podido observar la promoción del cultivo de huertos caseros hecha desde el gobierno y ONGs, así como un mayor énfasis en la educación para la salud. Eso toca también a la Iglesia. “Aquí y en otros lugares, los cristianos están teniendo más conciencia de que cuidar el cuerpo como ´templo del Espíritu Santo´ va más allá de no fumar y no beber. Veo que la gente está prestando más atención a la salud unida a la vida espiritual”, afirma. En este contexto, Melvin reconoce que los adventistas hacen énfasis en la salud desde hace 100 años. “Los considerábamos como seres de otro planeta y ahora vemos que tenían mucho que enseñarnos”. Conocedor de múltiples culturas, Rivera Velázquez opina que en Israel todavía la comida es saludable, al igual que en todo Medio Oriente. “En cambio, el Caribe tiene la cultura del cerdo, a todo se le echa carne porcina!”, enfatiza. Su pasión por la cocina vegetariana se refleja en uno de sus blogs (www.micocinavegetariana.com) donde ha publicado algunas recetas de cocina boricua vegetariana, como el popular sancocho o el arroz con gandules. “En mi iglesia –Discípulos de Cristo, en Coral Gable- estamos en la etapa de redescubrir el valor de la salud y muchas veces se hace referencia a esto en los sermones”, comenta antes de abordar otro de los temas que le apasionan y es central en su vida: la difusión de la Biblia. Pero de "La Palabra en la era digital" trataremos en una segunda parte de este encuentro.