El presidente de Barilla se disculpa tras boicot gay por su ‘homofobia’

Ante las presiones internacionales a la conocida marca de pasta italiana, Guido Barilla pide perdón por afirmar que nunca haría publicidad usando la imagen de una pareja homosexual.

ROMA · 28 DE SEPTIEMBRE DE 2013 · 22:00

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El presidente del grupo italiano Barilla, uno de los mayores fabricantes mundiales de pasta, se ha visto obligado a disculparse públicamente ante el aluvión de críticas y la amenaza de boicot internacional que se produjo tras sus declaraciones en las que mostraba su negativa a mostrar parejas homosexuales en las publicidades de la marca. "Me disculpo por mis declaraciones que han suscitado malentendidos o polémicas o si han herido la sensibilidad de algunas personas", declaró Guido Barilla, en un comunicado divulgado este pasado jueves. Barilla espera así calmar las reacciones suscitadas en todo el mundo por sus mencionadas declaraciones en una entrevista de radio en las que añadía que "prefiere a la familia tradicional". "Si los gays no están de acuerdo pueden comer pasta de otra marca. Todos son libres para hacer lo que quieran siempre y cuando no molesten a los demás", agregó, presionado por el locutor, conocido por conducir un controvertido programa de corte satírico. La última campaña del grupo italiano fue protagonizada por el actor español Antonio Banderas, que preparaba galletas como un mago para un grupo de chicos y terminaba con el lema de la marca: "Donde está Barilla hay un hogar". Guido Barilla también subrayó en la entrevista que "es favorable a la legalización del matrimonio gay, pero no a que puedan adoptar hijos", pero eso no lo puso a salvo de las críticas. "Como padre de familia creo que es muy complicado para una pareja del mismo sexo educar hijos", comentó. En la nota de disculpa, Barilla reitera que "respeta a toda persona, sin distinción alguna". BOICOT INTERNACIONAL Asociaciones de homosexuales lanzaron nada más difundirse la entrevista, a través de internet, una campaña para boicotear los productos alimentarios de la multinacional italiana, propietaria también de la marca de galletas Mulino Bianco. "Como el propietario nos invita a no comer pastas, lanzamos una campaña de boicot", anunció Aurelio Mancuso, presidente de Equality Italia. La asociación Arcigay se adhirió al boicot bajo el lema "todos somos de la misma pasta". Y a río revuelto ganancia de pescadores. Otras marcas de pasta italiana, entre ellas Buitoni y Garofalo, aprovecharon la ocasión en las redes sociales para manifestarse contra toda discriminación sexual y proclamar su respaldo a los derechos de los gays. Igualmente, la célebre marca sueca Ikea reivindicó el haber sido la primera a nivel internacional en incluir a los homosexuales en sus anuncios publicitarios.

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