Las enfermedades venéreas, una vuelta al pasado

¿Ha tenido relaciones sin protección con alguna persona de la que desconozca su pasado sexual? ¿Utiliza preservativo en los encuentros sexuales ocasionales? Éstas son algunas de las preguntas que el médico de familia tenderá a hacernos cada vez con más frecuencia en su consulta por dos motivos principalmente.

MADRID · 05 DE MAYO DE 2008 · 22:00

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El primero, que un abordaje integral de la salud no puede pasar por alto un aspecto fundamental como la sexualidad, como explica José Zarco, médico de familia y miembro del Grupo Nacional de VIH/sida de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria. El segundo motivo, y el más preocupante, apunta Zarco, es el repunte que las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) con la sífilis a la cabeza. Y el primero en detectarlas es el médico de familia, al que pueden llegar en las etapas iniciales aún sin síntomas. De ahí que incluir de forma rutinaria los hábitos sexuales en la historia clínica sea el gran reto de la atención primaria. Según el Centro Nacional de Epidemiología, en el periodo 1995-2006 se observa un cambio de tendencia claro de las ITS sometidas a vigilancia epidemiológica, con un repunte a partir de 2003. Algo que constituye un importante problema por sus complicaciones y secuelas -enfermedad inflamatoria pélvica, infertilidad, embarazo ectópico y cáncer de cérvix- si no se realiza un diagnóstico y tratamiento precoz. España muestra un ascenso de la incidencia de sífilis desde los 2,57 casos por cada cien mil habitantes en 1995 hasta los 4,31 registrados en 2006. Desde 2004 la tasa de sífilis supera la de infección gonocócica -que en 2006 estaba en 3,59 casos cada cien mil habitantes-, algo que en nuestro país no había ocurrido hasta la fecha, según el Centro Nacional de Epidemiología. Por comunidades, Canarias -con una tasa de 10,72- y Baleares (7,19) encabezan la lista, seguidas de Aragón (6,59) y Andalucía (5,59). Para las ITS no sometidas a declaración obligatoria, el Sistema de Información Microbiológica (SIM), que abarca datos de doce comunidades, refleja también un aumento de clamidia y herpes a partir de 2002. Según expertos el repunte de las ITS se debe a que el gran miedo que supuso el VIH, como enfermedad no tratable y mortal, de alguna forma se ha disipado y la gente no teme los contactos sexuales sin protección. Fernando Vázquez, Jefe de Servicios Básicos del hospital Monte Naranco de Oviedo y miembro de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), indica que algunas de estas ITS, como la gonococia, se vuelven resistentes a los antibióticos; y destaca que las infecciones de transmisión sexual tradicionales son "centinelas" del VIH. Aunque el virus del sida de momento parece mantenerse estable en los últimos años, no descarta la posibilidad de un repunte. Según Sanidad, de los 1.605 nuevos casos infectados por el VIH en 2006 -un 10 por ciento menos que en 2005- casi la mitad, el 49 por ciento, se deben a transmisión sexual. De estos, el 77 por ciento se atribuyen a contactos sexuales sin protección, que en el 65 por ciento de las veces fueron relaciones heterosexuales y el 35 por ciento restante a homosexuales. La globalización también ha supuesto un trasiego de ITS, y empiezan a verse algunas que eran muy raras en España, como el linfogranuloma venéreo. Aunque la más frecuente en las consultas sigue siendo el virus del papiloma humano, sobre todo en varones, aunque, según Sanidad, la prevalencia de infección por VPH es de las más bajas de Europa.

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