Los hijos, víctimas silenciosas del maltrato doméstico

Los episodios de hacerse pis en la cama, dificultades para aprender a leer y escribir, agresividad, problemas de integración no son sólo sufridos por los hijos de mujeres maltratadas, pero están presentes en la mayor parte de ellos. Esta experiencia es dura para un niño y no lo olvidan en toda su vida, pero hay historias con final feliz, cuando madres valientes reescriben su vida y sus niños tienen ganas de volver a ser niños. INFANCIA ROTA Más difíciles de tratar resultan los casos en los que el menor depende de las instituciones públicas o de otros familiares cuando la madre fallece. El papel de la escuela no sólo es clave a la hora de ayudar a estos menores a superar el problema sino también a la hora de evitar que se reproduzcan estos patrones agresivos. Existen jóvenes que comienzan relaciones sentimentales a edad muy temprana, y ya se percibe en ellos una forma muy agresiva de relacionarse y además la entienden como parte del comportamiento normal. Para las asociaciones de mujeres, los menores se convierten también en víctimas en el momento en el que su guarda y custodia se transforma en un objeto más de enfrentamiento entre los progenitores. Todos los expertos coinciden en que la mejoría del niño es notable cuando se le aparta del entorno de violencia.